Cómo Vivir Sin Vos?

cap 4

Pov Mia

cuando me fui para el spa me choque con un pibe alto, morocho, morenito y lindo o por así decirlo.

-Sorry, fue mi culpa, vine distraída- dije mientras agarraba mi cartera que se había caído -no, no fue mi culpa, nada es la culpa du una persona tan linda como vos- me respondió agarrando lo que se me había caído de la cartera.

- ¿oye, me podrías decir donde esta el restaurante? Estoy re contra perdido, es un lujar tan grande- dijo, se veía medio confundido así que sin duda lo ayude, total tenia un montón de tiempo hasta que termine la sesión de fotos de Sonia.

Bueno Mía, es la hora de hacer tu bondad del día

Estábamos yendo en silencio hasta que el decidió hablarme - bueno y ¿Cómo te llamas? - ¿encerio no sabía cómo me llamaba? He estado en un billón de revistas, periódicos y salí en TV ¿Cómo no iba a saber mi nombre?

-me llamo Mía... Mía Colucci- dije fingiendo amabilidad y una sonrisa -ahhh ¿Vos SOS la cantante esa de erreway?

Hasta que por fin se da cuenta será que no estoy lo demaciada maquillada que en los shows? Sigo siendo hermosa igualmente.

- si, esa jaja- dije, sin presumir obvio ¿no? Pero era obvio que se iba a dar cuenta éramos el grupo top del momento tipo era obvio -¿vos? ¿cómo te llamas?

- me llamo Lorenzo Garnica pero si quieres dime Lolo- ¿Lolo Garnica? Siento que ya había escuchado antes un tal Lolo Garnica pero no me acuerdo.

De repente me dio muchas ganas de hacer pis, pero no sabía dónde estaba el baño

-Lolo, no te vayas a enojar pero ahora soy yo la que está perdida ¿sabes dónde está el baño? - dije, estábamos cerca del restaurante, ya se podía ver así que más allá yo ya me podía ir

- Si te llevo - dijo -pero no vos anda al restaurante no quiero molestarte más, mira está allá el restaurante, solo dime dónde está el baño- dije señalando el restaurante -no tranqui total puede esperar la comida y vos ya me ayudaste a llegar, te debo una, vamos- me dijo tranquilo, sonreí y dejé que me llevará

Estos más o menos era un centro comercial nomás que más chiquito, pero
Aún así era enorme, fuimos hacia las escaleras eléctricas y subimos al 4 piso ya me había perdido, había un montón de gente y no podía ver nada.

Llegamos a un lugar extraño y muy alejado pero con mucha gente, era donde estaba el baño.

-si querés yo te agarro la cartera, hay mucha gente y mientras vos estás en el baño te lo pueden robar - en algo tenía razón.

-si toma, ahí vengo- le di mi cartera y me fui para el baño, había mucha gente y tuve que hacer cola.

Después de mear me fui a lavar las manos, termine y me seque más manos y una niña que estaba a mi lado se seco las manos aguantandolas y me echo jabón en los ojos y me ardieron, la niña ni me miró y yo me frege los ojos.

Cuando me dolían un poco menos me fui directo a donde estaba Lolo con los ojos cerrados

-no sabes una niña ordinaria me echo jabón en los ojos - dije fregandome los ojos una vez mas pero no hubo respuesta como si no estuviera -¿Lolo?... ¿Estás ahí?- dije abriendo un poco los ojos y no estaba ¡Se había ido con mi cartera!

Tal vez se fue al restaurante para esperarme ¿no? Espero

Me fui al restaurante corriendo pero me di cuenta que no estaba y que se había ido ¡Me robó! Que hijo de puta

Fui super agitada por tanto correr hacia el área de juegos donde estaban Marizza y Lujan y las encontré con un chico medio raro cuando ellas me vieron se veían sorprendidas

-chicas...hombre...cartera...celular...robar- dije no podía estresar toda la historia porque apenas me alcanzaba el aire de tanto correr

- habla claro Mia - dijo Marizza molesta

Si pudiera ya te lo hubiera dicho pelotuda

Agarre mucho aire y volví a respirar normal .

Pov Marizza

-¡un hombre me robó mi cartera donde estaba mi celular y mi plata y obvio mi maquillaje!- dijo Mia- sabía que no te podíamos dejar sola ni por un minuto- dijo Luján pensativa y yo me rei y ví como el mono ya no estaba, parecía un ninja ese pibe.

- ¿y que querés que hagamos nosotras?

-pues, no se- dijo Mia

-HOLA MIS AMORES, COMO ESTUVIERON SIN MI- Grito mi mamá y me dió tremenda verguenza que todos se nos quedaban viendo

-Mamá, deja de gritar, Dios- dije mientras la soltaba del abrazo que nos había dado

-vamonos ¿dale?- dijo Luján y fuimos para el auto y a casa.