Jimin salió del baño después de un relajante baño con rosas.La mucama que le pusieron a su servicio se acercó a Jimin.
-— permítame ayudarle al joven Park -— dijo ella mientras tomaba las prendas que usaría.
— Yo puedo, descuida — le sonrió esperando a que salga.
— Sumajestad me dejó en claro el ayudarle.
— entonces ayúdame con mi cabello y maquillaje una vez que me haya cambiado.
La muchacha asintió estando de acuerdo y salió para darle privacidad.
Que vergüenza, tal vez su personaje no le importaba pero a él sí.
Una vez cambiado a unas ropas dignas de la realeza las observo en un espejo de cuerpo completo, era la ropa más bonita que haya tenido.
La muchacha lo peinó delicadamente sus cabellos teniendo cuidado de no jalar fuerte, le fué colocando ricos perfumes en su piel y cabello, lo maquillo de manera sencilla pero que sin duda resaltaba más la belleza de Jimin y para finalizar de una caja que había traído con ella sacó una corona.
— No hace falta — Dijo sorprendido al ver cómo se la colocaba.
— Su majestad dijo que un rey debe portar una corona
— No quiero abusar tanto, ya es mucho dejarme quedar aquí.
— Su majestad dijo que era bienvenido, está corona se la da porque el así lo quiere.
Jimin sonrió sonrojado y la dejo terminar en colocarla.
✨✨✨👑✨✨✨
— Sumajestad no tengo como agradecerle.
Jimin y Yoongi se encontraban en el gran comedor desayunando ambos encontrándose a los extremos de la mesa.
Yoongi lo miro y dejo su tenedor en el plato llamando su atención.
— De hecho tengo algo en mente Rey Park.
Jimin limpió con cuidado la comisuras de su labio.
— Si? Me entraría escucharlo.
— Ya que mi hermano lo trató de esa manera tan despreciable — Dijo fingiendo decepción — pensé en que tal vez te gustaría verlo caer.
Jimin lo miró y sonrió, se levantó de su lugar y se aproximó hacía él.
— Rey Min, que es lo que me está proponiendo — dijo mientras caminaba lentamente tocando la mesa con sus dedos gentilmente — acaso usted propone una venganza en conjunto?
Yoongi miro como Jimin había llegado hasta el, y al un mantenerse sentado tuvo que subir la mirá.
Jimin tenía los ojos brillantes de emoción y Yoongi amo ver esos par de zafiros tintiniando.
El castillo siempre se mantuvo en oscuridad así que las velas eran su única compañía para ese par.
Jimin podía recordar un párrafo de la historia donde ellos unían fuerza para derrotar a los protagonistas, pero ellos actuaban de manera desastrosa.
— Rey Min Yoongi —susurró siendo tan claro de escuchar por lo silencioso del castillo.
— Rey Park Jimin — le contesto también en un susurró.
Yoongi se sorprendió un poco al ver cómo Jimin se iba agachando lentamente hasta sus piernas.
Ahora Jimin tenía que levantar la mirada.
— Deseó mi reino de regreso — Le confesó mientras con una mano acarició la pierna de Yoongi — no quiero verlo ir a la miseria por una plebeya sin estudios.
Yoongi sonrió complacido de escucharlo, acarició gentilmente la cabellera de Jimin.
— ¿Cuánto lo deseas?
— Con todas mis fuerzas...
Yoongi acarició su mejilla y Jimin se restregó con la cálida palma cerrando los ojos a gusto Jimin no dejo de acariciar la pierna de Yoongi e incluso se atrevió a recostarse en esta.
— Creí que estabas obsesionado con mi hermano — dijo mientras que sugetaba con fuerza su mentón — Espero no resultar traicionado.
Jimin miro como los ojos de Yoongi tintiniaron en un hermoso rojizo.
Jimin se levantó soltando el fuerte agarre y apartó los platos de la mesa para sentarse en esta.
— Odió a los hombres infieles — Jimin hizo un puchero fingiendo inosencia apartando la mirada a la derecha ofendido.
— ¿Odias a mi hermanito? — soltó juguetón mientras le acarició los muslos.
Jimin tenía las piernas separadas permitiéndole a Yoongi tenerlo cerca, podía sentir las caricias de sus muslos subiendo a su cadera.
— Lo odió — lo volteó a ver — y a su amante igual.
Yoongi se levantó se su silla quedando ambos rostros a centímetros de distancia.
— Entonces hay que castigarlos — dijo mientras miraba los esponjosos labios de Jimin. — Te hizo llorar?
Jimin sonrió y se relamio los labios teniendo los ojos en esos que no se apartaba la mirada de estos.
— Me rompió el corazón — sintió como en un casi inexistente rose sus labios se tocaban.
Yoongi finalmente alzó la mirada para verlo.
— Hay que hacer que ambos paguen — Le dijo mientras sus labios se dijieron a su oreja — Hay que hacerlos sentir tú dolor.
Jimin tembló alte los roses de los labios con su sensible oreja y el aire caliente que sintió.
— Rey Min — Jimin acarició su brazo — No quiero lastimar los.
Yoongi frunció las cejas apartándose un poco para verlo a la cara.
— No estás furioso? No quieres romper sus esperanzas una por una? Acaso lo que te hicieron no te pone furioso? — Yoongi lo miro cuestionando sin medir sus palabras — o acaso un lo amas eres acaso un perrito faldero Park?
Ahora Jimin era el enojado y sin importale nada tomo de los cabellos a Yoongi jalandolos hacía atrás,lo hizo gruñir.
— Ese imbécil no tiene lugar en mi corazón — Jimin aún estaba molesto — Cuida como me hablas Min.
Yoongi se sintió caliente, Jimin lo tenía sujetado del cabello sin miedo, quería probar todo de él.
Jimin lo fué soltando para pasar su mano por su mentón hasta sus labios.
— Rey Min no me haga enojar — Puchereo como si nunca se hubiera enojado.
Yoongi sonrió sintiendo esas uñas repasando su cara ojalá sentirlas en su espalda clavándose.
— Mis disculpas, solo quiero asegurarme de que no sea una trampa.
— ¿Tiene miedo de mí?
— Temo confirme lo suficiente.
Jimin sonrió gentilmente y puso sus manos en el cuello de Yoongi mientras hacía sonidos de inconformidad.
— No ve lo que me hizo, a mí, al rey Park Jimin, primer doncel de la familia real del sur que fué criado para gobernar todo un reinado por si solo — Jimin hacía muecas exageradas de llanto — Si el no me valoró al final no merece nada de mí.
Yoongi se rió y lo abrazo por la cintura, Jimin también lo abrazo ocultando su cara en su cuello.
— Ese bastardo, lo haré pagar — le acarició el cabello gentilmente — Solo únete a mí y obtendremos lo que más anelanos.
Jimin sonrió, sostuvo con su mano la mejilla izquierda de Yoongi mientras le daba un pequeño beso a la otra.
— Rey Min como decirle que no
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¡Reencarne como el villano! YM
FantasiaJimin tenía un único consuelo en su novela favorita desde niño, le encantaba leer como la protagonista se enamoraba de un gran príncipe y derrotaban a los villanos que se interponen en su caminó. Jimin no espero que su miserable vida cambie radicalm...