HP: vida mágica

Capítulo 51

Capítulo 51

ALBUS DUMBLEDORE

Albus Dumbledore sintió que las salas de Hogwarts cambiaban cuando sintió que alguien aparecía del castillo Hall. En todas las circunstancias, debería haberse unido a Edward, pero algo más grande estaba en juego aquí.

"No puedes esperar más", vino la réplica de su amigo más viejo. Y Albus miró a Gellert, que estaba sentado frente a él, mirando a Albus con los ojos estrechos.

Albus paseó por su oficina, su mente acelerada mientras pensaba en esas palabras. Sabiendo en lo profundo de su corazón que Gellert tenía razón.

"Pero todavía no tenemos pruebas suficientes. Yo ... "pero su argumento fue cortado.

"Y nunca lo habrá", llegó la rápida respuesta de Gellert mientras se levantaba.

"El ritual que te di es antiguo, más antiguo que incluso tu amigo alquimista" y, por supuesto, Gellert sabía de su relación con Nicholas. Sin embargo, tenía razón. Había recorrido la biblioteca del hombre y no había encontrado información adicional sobre el ritual.

"El único registro que queda de algo similar permanece en la forma de la historia de esos niños. El cuento de los tres hermanos e incluso esa historia ha cambiado mucho. No puedes esperar más ", habló Gellert.

Y Albus suspiró, pensando en esas palabras. Alcanzó el pergamino en su escritorio, algo que había estado ocupando su tiempo durante bastante tiempo. Los detalles del ritual fueron bastante claros. Dumbledore los hojeó una vez más, tratando de pensar en cualquier otra alternativa. Sin embargo, ninguno le vino a la mente.

El ritual que Gellert le había dado era magia antigua. Magia que se había eliminado gradualmente, deliberadamente debido a la gran cantidad de peligro que representaba para el mundo mismo. El Ritual era supuestamente similar al utilizado por los Peverells, y era una súplica para convocar a la muerte misma.

De lo que había reunido de varias fuentes, Los Tres Hermanos habían usado el ritual para convocar a la muerte en busca de ayuda en su lucha contra el primer Señor Oscuro, Herpo el Falta. Albus consideró bastante irónico que Herpo y Tom compartieran muchas similitudes. Ambos eran famosos Parselmouth con una alta afinidad por las artes oscuras. Ambos habían tratado de engañar a la muerte haciendo Horcruxes.

"Ok, haz los preparativos", dijo Albus finalmente después de un suspiro. Tom había tomado sus decisiones, y era hora de que toda esta farsa terminara. Esta guerra ya les había costado cientos de vidas inocentes. Era hora de que todo terminara.

"Es bueno que hayas hecho la decisión. Haré los preparativos, pero ¿tienes los Tres Regalos ", cuestionaron Gellert y Albus rígidos por eso. Los Tres Regalos, los dones de la Muerte, las Reliquias de la Muerte, habían sido un sueño de la infancia para ellos en algún momento. Y cuando Albus miró a los ojos de su viejo amigo, recordó los momentos en que había compartido ese sueño con el hombre.

Albus Dumbledore y Gellert Grindelwald, Maestros de la Muerte, controlador de los sauces. Gellert sabía que estaba en posesión de los tres elementos, dado que eran la parte por excelencia del Ritual, pero nunca lo había cuestionado sobre ellos anteriormente. La mirada de Dumbleodre se demoró en su amigo antes de asentir lentamente.

Vio los ojos de Gellert iluminados, antes de agregar una fascitación algo infantil.

"Puedo echar un vistazo?"

Albus se calmó ante esas palabras, y tenía todas las razones para negarle al hombre esta solicitud. Sin embargo, al final, no pudo. Entonces, metió la mano en el cajón y sacó los dos artículos que había colocado allí.