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Ahora que sabía que Scott era un hombre lobo nos llevábamos mejor. A él le estresaba ahora tener que lidiar con dos paranoicos que se sacaban teorías de la cola con un: "¿Te imaginas que...?" guardado en la mochila.

Quería saber qué se sentía manifestar la vida de otro que no sea yo tal y como lo hacía Eros conmigo; aún así con todas esas teorías sacadas de la cola, Scott era muy paciente con ambos (aunque no sé cómo lo hacía porque yo ya nos habría dado un sape como lo hacía Eros conmigo).

Tampoco hablé nada acerca del sueño extraño que tuve, asumí que se trataba de otro sueños raros porque acostumbro tener demasiados; como uno en el que Woody se comía mis rodillas JAJAJAJAJA (un clásico, pero me dolió)

En cualquier lugar y tiempo mi vida se basaba en el: "Pero no le di importancia". 

Scott y Stiles me invitaron entusiasmados a su entrenamiento de Lacrosse porque yo no sabía qué más hacer en mi tiempo libre. Scott decía que le emocionaba demasiado ser titular del equipo. Yo no entendía una mierda de deportes, pero aún así me alegré por él y fui a verlos.

Olvidé que Isaac también estaría y me llevé una sorpresa cuando lo vi.

Stiles y Scott eran de esas personas que con suerte se acordaban de los nombres de las personas con que frecuentaban, por lo que ninguno conocía a Isaac.
Sólo se referían a él como: "el sujeto raro que coquetea contigo".

Isaac se veía bonito ese día, o al menos así lo vi yo a la distancia porque estaba sin lentes y veía borrosa su cara.
Lo saludé con la mano y él respondió hasta que Jackson lo empujó y le dijo algo en voz baja mientras me miraba con una sonrisa de superioridad, luego Isaac me vio con sorpresa y continuó con lo suyo sin volver a verme el resto del entrenamiento.

Eso me hizo sentir mal departe de Isaac, pero por otro lado, estaba tan molesta que definitivamente cagaría a piñas a Jackson en algún momento, pero aún no era el tiempo, por lo que me centré en mis dos amigos quienes comenzaban a pasarla mal por la licantropía de Scott.

Cuando noté que Scott se ponía extraño Stiles me hizo una seña para que actuara como si nada estuviera pasando, al menos hasta que tacleó a Jackson por no poder controlar sus instintos y le dislocó el hombro.

Stiles se lo llevó a los vestidores y no los volví a ver más por lo que tuve que regresar a clases antes de que Jackson decidiera acercarse y andar cagando el palo como acostumbraba hacer.

Aunque tampoco sirvió de mucho porque me encontré con sus padres, es decir a mis tíos, en la escuela al cabo de una hora del incidente.

— ¿Tú estabas ahí? — Preguntó la señora.

Tenía que mentir. — Un rato sí, pero luego regresé a clases. ¿Qué ocurrió?

— Uno de los muchachos lo golpeó tan fuerte que ahora tiene el hombro dislocado. Ahora no estamos seguros de si podrá jugar el partido del fin de semana.

Asentí preocupada, como si me importara y los acompañé por un momento hasta que apareció Stiles caminando y como el idiota no es nada sutil, se escondió de la forma más obvia posible al verme con los padres de Jackson.

— Ya regreso. — Comenté y los dejé solos. 

Caminé hacia el pasillo donde se había escondido Stiles con extrañeza. No sabía cómo reaccionar realmente. Stiles disimulaba tan mal que podía escuchar su respiración.

— Sé que estás ahí.— Comenté agotada.

Él salió de su escondite y me vio molesto. — ¿Qué hacías con los padres de Jackson?

Manada (Shifting)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora