El trebol maldito

07: La otra miembro

"¡Que haces en mi habitación!"

Grito la hermosa chica que tenía cabello plateado.

"¡Y bien porque no hablas! ¡Dime la razón por la que irrumpiste en mi habitación!"

Aunque su expresión estaba algo ruborizada, la mirada de ella parecía ser estoica como si me estuviera mirando desde una posición superior.

Ya me había topado con clase de personas que actuaban de esa manera.

Y eran los que tenían que ver con la Realeza.

Subaru: "Solicito, permiso para hablar mi señora."

No quiero meterme con la Realeza, no porque tenga miedo sino como una maldición o algo cada vez que interactuaba con alguien de la Realeza mis problemas se multiplican.

Subaru: (La insignia real, la selección real, negociaciones en Pristella, el encuentro con Abel, la guerra civil por el trono, el príncipe heredero, sacramento del rey inmortal, y etc, etc.)

"Veo que tienes modales. Permitido."

Subaru: "No tengo idea como llegue en este lugar."

Me encontraba muy cansado por los sucesos de ayer.

Subaru: "Lo último que recuerdo es que estaba en la entrada de mi habitación."

"¿Quieres que te crea esa viles mentiras? Eso es absurdo."

Subaru: "No estoy mintiendo es la verdad."

"Como sea, sal afuera de mi habitación antes que decida aplastarte como un mosquito."

Subaru: "Buen solo déjame recoger mis cosas."

Me encontraba en ropa interior ya que no tenía otro cambio de ropa para dormir.

"De inmediato."

Subaru: "Bien."

Ya me metido en problemas de alguna manera terminado en su habitación no quiero meterme en más problemas.

Yendo a la salida. Sujetando el pomo de la puerta. Decido abrirla.

Y en ese momento.

"Te matare."

Cierro la puerta antes que suceda lo peor.

Manteniéndome seguro dentro la habitación.

Subaru: "Oh no. Mi maldición ha comenzó."

Subaru: "Oye esta es la única entrada y salida de esta habitación."

"Si. Así lo es."

Subaru: "Entonces porque estaba conectado con ese lugar."

Lo que había pasado era que al otro lado de la puerta se encontraba el baño/retrete que estaba siendo usado por Yami.

"No sé de que hablas. Pero ya te he dicho que salgas de aquí necesito cambiarme."

Subaru: "No espera. No abras la puerta."

Ella se había levantado y mantenido sujetado el brazo.

Al quitar el seguro y abrirla de nuevo la puerta, en el otro lado se encontraba una habitación oscura poco visible. Pero apenas pasado un segundo los gruñidos ellos habían escuchado.

Subaru "¡Ciérrala!"

Ambos cerramos la puerta y asegurar de ponerla seguro, ya que esta vez al otro lado se encontraban las mascotas de Yami.

"Pero que está pasando en esta manicomio de locos."

No puedo discutí eso. La bienvenida de anoche fue algo explosiva.

Era como si el castillo tuviera vida propia y que las puertas al abrirla a uno le llevara a un lugar al azar.

Sin tiempo de relajarse el seguro de la puerta se desbloqueo desde afuera.

"Detrás de mí."

Es lo que ella dijo con aparecer la intención de protegerme. Teniendo en cuenta de lo iba entrar iba ser mas malo de las dos veces que se habrio la puerta.

Al abrirse la puerta, alguien inesperado se encontraba esta vez.

Vanessa: "Noelle-chan. Se que la realeza le gusta tener el desayuno en la cama pero deberías saber que uno quiera comer debe ir al comedor."

La que habia entrado era Vanessa, ella viendo que nosotros estábamos competiendo la misma habitación. Y manera que ambos nos encontrabamos vestido.

Vanessa: "Parece que ya has desayunado. No sabía que te gustaba los niños más jóvenes."

Noelle/Subaru: "¡Esto no es lo que parece!"