Choque de tronos

ciervo vs dragón

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Daenerys, al llegar a Bastion de tormentas, hombres de Bartheon permanecían junto a las grandes puertas, ella no pensaba que al caminar hacia la entrada le negasen el poder dar un paso más.
La chica los miro por unos momentos  y como era de esperarse, la princesa al intentar entrar al castillo los guardias cruzaron sus espadas impidiendo que ella entrase.

Daenerys no tenía más opción que entrar por la fuerza, pero ella era más de hablar y solucionar;

—Soy Daene.

—- Desafortunadamente, si sabemos el nombre de la bastarda que tenemos en frente. dijo un guardia mientras los otros que se encontraban junto a el reían

— si les parece gracioso el ser tan ignorantes, déjenme reir junto a ustedes. Dracarys. exclamó daenerys en alto valyrio mientras Drogón y Rhaegal se asomaban a su espalda y obedeciendo a su madre, exhalaron fuego por el hocico, quemando y haciendo cenizas a los guardias junto a las puertas que habían sido cerradas con un gran pilar fundido con hierro que rápidamente fue derretido.

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Dentro de la fortaleza, en el salón donde Lord Borros Baratheon se encontraba, al momento de escuchar ciertos gritos y un destello de luz el cual llego con una ola de calor, este quedó completamente inmobil y miro por un momento a sus guardias, los cuales se encontraban a un lado de el.
Cuando las llamas entraron al salón, intentaron sacar al Lord inmediatamente, pero no tuvieron el tiempo, junto a las grandes llamaradas la princesa había atravesado los escombros que estás habían dejado, y al momento de poner un pie en el lugar al que ella había querido llegar desde un principio, miro a Lord Borros, el cual se encontraba portegido por sus guardias, estos se pusieron por delante de su Lord empuñando sus filosas espadas, las cuales no dudarían en usar en contra de la chica Targaryen.

Los caballeros que estaban ahí no tenían miedo de una mujer, si no de lo que hubiera tras ella, las bestias que la acompañaban.
Aún así, por más temor que tuvieran por lo que les podía estar esperando fuera, bajaron sus espadas, ya que una mujer no podía ser una peligrosa amenaza.

Lord Baratheon al mirar a sus guardias bajar sus espadas, ordenó que las volvieran a levantar.

"— es una targaryen imbéciles, de seguro tiene a hombres fieles que vienen con ella y las bestias que la acompañaba, levanten sus espadas."

Sin embargo, Daenerys estaba sola, acompañada de sus dos dragones que permanecían fuera haciendo cenizas a los que hacían el intento de atacarlos.
La princesa se volvió a presentar una vez más, ahora en persona;

"—mi nombre es Daenerys Stormborn de la casa Targaryen, princesa de dragonstone, reina de pentos y madre de dragones."

La joven targaryen no era estúpida, ella sabía que no sería bienvenida ahí, pues ya se lo habían echo saber con la carta que se le había sido devuelta, aun así, Lord borros contesto a la princesa lo que ya se le había dicho en dicha carta.

"— usted no es princesa y mucho menos de dragonstone. creo que no fui tan claro en la carta que se le fue enviada, no tendrá el respaldo de mi casa y menos si se trata de una bastarda como usted."

Ella, al escuchar esto camino hacia adelante mientras aseguraba que ella lo último que era, era una bastarda, en respuesta a esto por parte de Borros, fue que no creería en las palabras de una extraña, y además extranjera que se hacía llamar princesa.

"— cuestione una vez mas mi origen y legitimidad y tendré su lengua. Dijo Daenerys mientras cada vez se acercaba más, aunque no por mucho, pues los guardias igualmente avanzaron hacia ella con las espadas en alto y apuntandola.

"— sere yo quien tenga más que solo una lengua. traiganme su cabeza."

Dijo Lord borros, a lo cual sus guardias acataron la orden y tres de los diez hombres que habían ahí hicieron el intento de poner de rodillas a la princesa para luego decapitarla.
Esto fue interrumpido por un fuerte estallido, el cual destruyó el techo del salón y las piedras se desprendieron desde arriba cayendo sobre algunos guardias dejándolos sin vida al ser aplastados por estás. Los que quedaron aún con vida pudieron apreciar a una bestia gigante, la cual tenía un aliento de fuego más reluciente que los propios rayos del sol, y con esto fue con lo que prendió en llamas a los guardias que se encontraban junto a Lord Baratehon. A esto, el único sobreviviente, el cual quedó con quemaduras grabes en los brazos fue Borros. El Lord aún seguía en pie y firme, y en sus condiciones aún podía pelear, así que tomo una espada del piso y reto a un duelo a Daenys, la cual se encontraba sobre el dragón de escamas doradas.

"—  baja de tu dragón y pelea, los Baratheon morimos en combate, no suplicando."

Dicho esto, la joven bajo de su dragón y empuñando su espada, a la cual ella llamaba filo lunar, atacó a Lord Borros.
La batalla fue reñida, pero aún así, con la experiencia que tenía el Lord, consiguió en más de una ocasión dañar a la chica, pero ella había sido entrenada por años, era más ágil con la espada y más rápida, teniendo esto en cuenta, la joven dejo que el Lord se cansará, ya que ella tenía más resistencia que el.
Una vez quedó sin fuerzas, Daenys le dió un buen zablazo en el hombro, el cual lo derribo al suelo.

Una vez allí, Daenerys quien se encontraba observando a su hija, desde uno de sus bolsillos saco la carta y la leyó en voz alta.

"— si me brinda su apoyo, será bien recompensado, con tierras, oro y será recordado por el resto de sus días con honorabilidad, y se le será otorgado un puesto en la corte real. Pero si se rehúsa, morira y su ejército será mío."

— Usted tuvo su oportunidad mi Lord, seré yo quien lo haga pagar por todas sus ofensas- dijo daenerys, pero el Lord, aún con las fuerzas que le quedaban se puso de pie y atacó a la princesa, pero sin darse cuenta, Daenys lo atravesó con su espada.
A Lord Borros se le escapó una risa de asombro, y sin quitar la mirada de Daenerys cayó al suelo, y con sus últimas palabras murmuró que los Baratheon también caen por sorpresa.