Carlie es una chica mitad Demonio, es curiosa, inteligente e inofensiva. Sus dones no desarrollados la perjudican, ya que no puede defenderse de terceros.
Lo que provoca en sus padres tomar la decisión de enviarla a un internado. Una escuela sobrena...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Los pequeños insectos de la noche se dejaban escuchar mientras caminábamos por el bosque. Denesia había puesto un sendero para nosotros de hongos pequeños qué brillaban de todos los colores en la inmensa oscuridad dejando ver el camino. Ellos por supuesto que podían ver en la oscuridad, pero en cambio yo no, así que para mi Denesia había hecho esto tan lindo y mágico, se lo agradecía intensamente. Se veían hermosos, una idea original ya que la luz de la luna no nos acompañaba esta noche.
Había pasado una semana de mi pequeña crisis, si pudiera decir pequeña. Pero hasta ahora no había vuelto a tenerla gracias a los chicos que simplemente me hacían olvidarlo entreteniendome con cualquier cosa. Me estaban ayudando mucho sin ellos saberlo. En este caso, estaba junto a ellos fugandonos del internado para ir a un lugar donde ellos acostumbran estar.
- Veamos... Tenemos que ir a docientos metros hacia el bosque negro - Denesia explica viendo un mapa en blanco sin nada escrito. Que ni Jimmy y yo entendemos lo que ve.
- Me siento como si estuvieramos en la película de JummanJy - lo miré, ¿como sabe de esa película si ellos no conocen mucho sobre la humanidad? - vi por la televisión de un chico. En esas cosas raras que tienen los humanos, son impresionantes - Sonreí al ver su cara. Sus ojos se habían iluminado, se veía muy tierno. Pero Denesia lo golpea en el hombro - ¡No puede ser, me golpeó!... - fingió dolencia - ¡¡¡ESPEREN!!! - se levanta la manga de su sudadera y asustadas por su reacción lo miramos - ¡Se me borró una línea!
- ¡Vete a la mierda estúpido! Estamos en algo serio - comienzo a reír viéndolos pero tranquilizando mis risas - Como les decía, tenemos que caminar docientos metros y encontramos el final del internado, después hay que cruzar el río, que será difícil si no tenemos con qué cruzar.
- ¿No se nadar, y ustedes? - pregunté.
- Si, sabemos - Jimmy respondió - pero el río no es tranquilo y aunque quisieras no podrías nadar. El río tiene muchas corrientes de la peste negra fuertes, lo suficiente para ahogarte aunque sepas nadar. - ¿Peste negra? - Se llama el río Zorg, el río de la muerte.
- ¿A qué te refieres con peste negra?
- El río tiene cierta sustancia negra, no es un río de humanos, estamos en el inframundo, Carlie.
- Entiendo...
- Cuando estemos allá veremos que hacemos... - Denesia nos dice y dobla la hoja - Hay que darnos prisa, si amanece temprano y no nos encuentran, nos van a buscar tenenos poco tiempo.
Entonces fue así como seguimos a Denesia a un lugar donde era completamente desconocido para mí. Ellos habían encontrado un lugar oculto donde nadie había pisado en hace mucho tiempo. Resulta ser que era como una especie de cueva ocultando un altar muy frío. Jimmy me dijo que ahí tenían algunas de sus pertenecias ocultas, y de verdad extrañe mucho las mías. No tenía mi celular, mi tablet y mi laptop. Extrañaba mucho mis doscientas mil canciones.
