Parte 2

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Poco después del infierno que fue estar en ese vomitivo teatro, y de pensar y meditar un poco mas lo que me esperaba, logre relajarme y poner en blanco mi cabeza por un tiempo. Sabia que solo estaba exagerando las cosas, no podrían haber muerto tan fácil, simplemente estaba algo, Mmmm... histérico, si...

 Me sentía inquieto. Llevaba 1 hora completa sentado mirando a la nada, apreciando el paisaje de destrucción. Mis piernas ya se estaban acalambrando, así que me levante de un salto y empecé mi recorrido por el lugar, y aunque pareciera mas el escenario post 911, se podía ver algo a la distancia que no estaba destruido, pues lo que antes fue un lugar para grafitera y pegar papeles promocionales sobre burdeles y bares en casas ajenas, ahora era un paramo de ladrillos y polvo esparcidos por doquier, divididos por una grieta llena de agua que estaba escalando en tamaño, comiéndose la carretera poco a poco.

Inicie mi camino, escalando unos escombros, con muchas mas facilidad de la que pensé, y caminando hacia donde podía ver edificios que aun no se habían caído. Mientras realizaba mi travesía, pude ver lo que quedo de los barrios adyacentes. casas caídas o derrumbadas, guarderías y muchas escuelas de las que pensaba posibles, aniquiladas y pulverizadas en el piso y ni hablar de los apartamentos o conjuntos.

Esto me dio risa, eso y su "sistemas de tecnología anti terremotos". Lo digo porque durante mi caminata pude ver mi antigua colegio que presumía ante sus estudiante lo "mucho que invertía en nuestra seguridad", completamente destruido. Lamentablemente tengo el autocontrol de un niño de 10 años pues me desvié de mi camino, dando pequeños saltos, como los que daría una pareja de enamorados, para acercarme a mi colegio solo para pisarlo, escupirlo, patearlo y reírme diciendo:

Putos pendejos, no soportaron una catástrofe a escala nacional - Dije esto riéndome y pateando un pupitre que sobresalía el cual seria victima de mi desparche

Mientras me desquitaba tirando piedras al pupitre, en el cual había pasado tanto tiempo alguna vez, y ahora era completamente destruido a piedrazos, unos sonidos me empezaron a hacer zumbar las orejas. Inicialmente fue algo suave, parecía el sonido de un mosquito pasando por tu oreja, pero después se fue intensificando, y mientras se intensificaba, me di cuenta que no era un zumbido... Era reguetón a todo volumen. 

Asqueado, me tape mis orejas con mis manos como pude y mire al piso, caminando en circulos por el lugar, esperando que pasara aunque sea por un poco el sonido, pero al caminar, me di cuenta que estaba pisando el aun fresco cuerpo, de una mujer.

Quede paralizado por un pequeño momento, para después soltar el grito mas varonil que mi cuerpo me permitía y quedarme parado cerrando los parpados con fuerza y agarrándome la cabeza.

¡no fue suficiente hacerme ver todo un panteón de muertos, no... QUERIAN QUE TOCARA UNO!

¡PERDON! - Exclame saltando para alejarme corriendo del colegio

Incluso en la apocalipsis, el diablo encuentra maneras de atormentarme, por que no le pareció suficiente atormentarme con ese "vomitivo ritmo", si no también me hizo pisar el cuerpo de la profe que me daba calculo !Carajo, mis zapatos ahora tienen sangre impregnada!

Mientras estaba corriendo despavorido, alejándome lo mas que podía de mi colegio. La música esa, subió de volumen otra ves, y aprovechando el hecho de que estaban revelando su posición y que tenia ganas de apagar a piedrazos el parlante que hacia sonar ese "himno al diablo", me volví a desviar en dirección a la música, para ver quien mierda estaba haciendo una fiesta en medio del fin del mundo

en mi transcurso, me di cuenta que todo estaba destruido, aunque bueno, mientras mas me alejaba de la grieta, las casas y edificios cada ves estaban menos destruidos. Desde que salí corriendo de mi colegio, me di cuenta que mi alrededor estaba cada ves mas intacto, por lo que tome a el teatro como el epicentro del incidente. 

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Al poco tiempo pude llegar a un barrio que aunque estuviera algo afectado por el terremoto, la mayoría de casas solo tenían una pared caída o acaso alguna que siguiera intacta, en la medida de la palabra. Eran casas de un estrato, diría mediano tirando a alto.

Este lugar era muy bonito la verdad, había logrado soportar muy bien el terremoto, pero... 

Patria divididaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora