꧁༒☬22☬༒꧂

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Bob aún se encontraba abrazando a Candy Dealer, haciendo que Candy se durmiera en sus brazos.

Los demás ya los habían dejado tranquilos, ya que empezaron a ponerse alerta, de nuevo.

Streber salió de la habitación, ya que él tenía que ver que sucedía de manera física, o ver en dónde se encuentran los puntos ciegos de las cámaras. Si, Streber es la carnada.

Carmen volvió a tener su mirada fija en las cámaras, mientras que Ignacio veía a su amigo, o sea, Bob.

Ignacio se preguntaba una y otra vez como es que Bob pudo tenerle "cariño" a alguien más. De lo que el sabe, Bob no es de confiarse tan fácil, ya no más.

—¿Pasa algo, Ignacio? Te veo muy pensativo... — dijo Carmen, viendo al anteriormente mencionado.

—uh... No es nada importante, es solo que veo a Bob muy diferente...

—Si, yo igual... Lo veo un poco más... ¿Confiado? No sabría cómo decirlo.

Volvieron a colocar su mirada en quienes estaban durmiendo.

Bob aún estaba abrazando con fuerza a Candy Dealer, se veía que no quería que se separara de él, Candy apenas movía un músculo y Bob apretaba aún más, tenía miedo que se fuera, y se notaba.

Ignacio soltó un suspiro y vio, de reojo, las cámaras de seguridad, y vio algo curioso.

Vio a Hugo hablando con unos cuantos ocultistas, se veía enojado, más decir, furioso.

«Agh... desearía que estas cámaras tuvieran audio...» 

Pensó Ignacio.

Segundos después, se escucho como abrían de manera brusca la puerta y la cerraban de nuevo. Era Streber, se veía sobresaltado, y muy asustado.

Carmen e Ignacio voltearon a ver a Streber con sorpresa, ya que no esperaban que regresara tan pronto.

Mientras que este portazo hizo que Candy y Bob despertarán, dando un pequeño salto. Candy se vio obligado a separarse de Bob, pero no podía, ya que el agarre de Bob seguía firme y fuerte.

Bob empezó a abrir los ojos completamente, vio hacia abajo y vio a Candy, recargando su cabeza en su pecho. Bob rápidamente se sobresalto y lo alejó de el, obviamente, dejando de abrazarlo. Se cruzó de brazos y lo vio de manera amenazante.

Candy se sintió culpable de esto y se separó de él.

—¡Carajo, Streber! No puedes ser más silencio...

—¡Nos descubrieron! —interrumpió.

Cuando Streber menciono estás dos palabras hizo que a todos quienes se encontraban dentro de la habitación se les helada la sangre. Voltearon a ver fijamente a Streber.

—¿A qué carajo te refieres?...

—Hugo, el sabe que Bob escapó, y va venir aquí, en esta misma habitación en donde estamos nosotros para ver qué pasó con exactitud—decía desesperado, el aire se le acababa y no hablaba con tanta claridad, pero se entendía—. Pero hay algo más...

—¿Qué es? —pregunto Candy, muy interesado en esto, por obvias razones.

—... Hugo... Ya sabe que nosotros lo ayudamos a salir...

Esto hizo que a Ignacio y Carmen se quedarán completamente quietos, parecía que su alma se había ido de sus cuerpos.

Todos estaban asustados. Candy vio a Bob, y este se veía que lo estaba más, hasta parece que iba morir en cualquier momento del miedo.

Bob se veía completamente asustado, temblaba y se veía que en cualquier momento se iba a desmayar, incluso, que parecía que iba a llorar.

Candy sabía que esto le tensaba a Bob, pero no sabía qué hacer, no podía llamar a Ignacio o a Carmen, ya que ellos estaban hablando con desesperación a Streber. Así que decidió hacerlo por si mismo.

El de ojos morados agarró delicadamente la mano de Bob, obviamente si sobresaltarlo o enfadarlo.

Bob se dio cuenta de esto y lo volteó a ver, y su respiración... se relajo un poco...

Candy acarició con lentitud la mano de Bob, manteniendo su mirada fija en el de mayor estatura. Bob apretó su mano y apartaba la mirada, nunca se habia sentido tan indefenso en su vida.

—Tenemos que salir de aquí... Ahora —comunico Ignacio.

—No podremos, nos descubrirán —dijo Streber.

—Es verdad, pero tendremos que salir de aquí —dijo Carmen, yéndose de parte de Ignacio.

—Pero... ¿¡Acaso están locos!? —dijo Streber.

Ahora, Streber, Carmen e Ignacio estaban discutiendo, por si salir o no.

Esto estresa aun más a Bob, parecía un bebé indefenso. Candy no dudo de hacer algo.

—¡Ustedes si que son necios!

—¡Tú lo eres! 

—¿¡Pueden guardar silencio de una maldita vez!? —grito Candy, haciendo que todos lo voltearan a ver y guardarán silencio—. Somos un equipo, no enemigos...

Decía Candy enojado. Nadie se esperaba que él gritara, haciendo que se sintiera incómodo el ambiente.

Candy volvió a ver a Bob a los ojos y su mirada se relajo, saco un dulce y se lo entrego a Bob, dedicándole una sonrisa.

Bob ve el dulce de arriba a abajo y acepta el dulce, que era una paleta. Metió la paleta en su boca y disfruto el dulce. Candy Dealer acarició su espalda, intentando tranquilizarlo aún más.

Ignacio y Carmen veían esto con confusión, pero ya no mucho, sino que ya sentían que había algo entre ellos que eran más que amigos. Mientras que Streber veía esta escena embobado, confundido y, sobre todo, con un poco de envidia.

 Mientras que Streber veía esta escena embobado, confundido y, sobre todo, con un poco de envidia

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Estaba aburrido-

Un amor muy...peculiar [Candy Dealer x Bob Velseb]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora