nos conocimos en la colina (TERRY & TU)

11. La confusión

CON CANDY Y LUMIER

POV LUMIER

-- disculpa Candy ¿estás bien? -- que pregunta más tonta acabo de hacer es obvio que está melancólica por Terry, ese idiota no pudo aprovechar la oportunidad para arreglarse con ella y lo único que hizo fue irse ¡cobarde!, aún que, siento que yo me interpuse, si no hubiera estado aquí tal vez ellos hubieran hablado u otro puede ser si Terry no la encontrará herida tal vez se encontrarían en otras circunstancias mejores

-- si, ¿porque lo preguntas? -- me responde mirándome interrogante

-- por nada en especial -- mejor si no le hago acordar el momento

-- ¿cómo sabe mi nombre señorita Lander? -- la escuché preguntar, en ese momento me di cuenta de mi error, nosotras nunca nos conocimos y era raro que yo supiera su nombre, ¡¿qué hago?!, ¿porque tengo la costumbre que se me suelte la lengua?, trate de buscar o pensar algo hasta que

-- ahhh eso es porque lo dice en su ropa señorita enfermera -- le dije con una sonrisa para que no note mi nerviosismo, Candy se miró a la ropa

-- oh, tiene razón, disculpa si mi pregunta te incómodo -- ella también respondió con una sonrisa al ver que tenía la etiqueta de identificación en su ropa

-- jajajaja, bueno no importa -- sonreí mientras giraba mi rostro a la ventana para contemplar como cae el día para dar paso al atardecer

-- ¡ah se me olvidaba! -- al decir eso se dio la vuelta y fue a traer algo de el carrito de medicinas -- aquí tiene esto son algunas de sus pertenencia que le sacaron para realizar la operación -- me entrego una cajita de madera y al abrirla me di cuenta que eran unas de mi joyas, no tenía muchas pero eran importantes, mire un poco y Vi mi anillo entre todos, lo agarre entre mis manos

-- ¡es mi anillo, este es lo más importante que poseo! -- dije mientras lo acercaba a mi pecho para apretarlo, este anillo me lo dio mi abuelo como recuerdo de su difunta esposa para mí, para que pueda guardarlo como símbolo de protección

FIN POV LUMIER

mientras Candy solo pensaba con la mirada perdida como abrazaba el anillo con fuerza, creyendo que el anillo era el anillo de bodas que tenían Terry y Lumier por lo cual sintió mucha melancolía, aún estaba sorprendida que el joven que trajo a su esposa era Terry, solo había pasado un año y medio desde que se separaron ¿cuándo fue que se conocieron?, ¿ se habrán casado hace poco?, debe ser porque no creía que se hayan enamorado a primera vista y con solo un par de meses se hayan casado, ¿o sí?, ya no sabía que pensar

se quedó con la paciente durante una hora charlando, a pesar que Candy se sentía algo incómoda Lumier era muy amigable hasta el punto de ver qué de vez en cuando le lanzaba una mirada extraña animando la a algo como diciendo "tú puedes", por lo cual ella no entendía a lo que se refería esa mirada

-- tiene un buen esposo, ¿son recién casados? -- sí, por fin hizo la pregunta que tanto le carcomía el alma, al ver a Lumier ella parecía estar confundida, como si no hubiera entendido su pregunta hasta que....

-- ¿casados?, a qué te..... -- antes que Lumier respondiera las dos dieron un brinco al escuchar como la puerta se habría de golpe y algo asustadas miraron a la puerta llevándose la sorpresa que era Terry y detrás de él había unas enfermeras, el entró sin ver a Candy, cosa que la puso algo triste, Lumier al darse cuenta que se dirigía a ella e ignoraba a Candy la enfado, ¿cómo podía ignorar a su amor de esa manera?, ¿acaso no la ama?, ¡la perderá si sigue así! -- joven.... -- antes que diga nada el inglés se le acerca bastante para el gusto de ella para que una voz suave le susurré

-- es hora de irnos -- al decir eso Lumier es alzada en brazos de Terry sin darle tiempo a responder que por la sorpresa e inercia se agarra del cuello del inglés cerrando los ojos, habré los ojos ante la mirada de todos, las enfermeras que vinieron con el inglés miraron con cara de disfrutar de la escena, pero al ver a Candy se notaba tristeza y felicidad en su mirada, giro para ver a Terry encontrándose con sus ojos muy cerca, miro hacia su manos y se dio cuenta de lo que hacía y como si le hubiera quemado suelta su cuello en consecuencia que casi cae hacia atras, al sentirlo, de nuevo se agarra pero está vez de las ropas, no sabía qué hacer su rostro sentía hervir a llamas y solo quería ocultarlo