Capítulo-3 [Editado]

36 13 2
                                    

Sherlyn Viscount Severn

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Sherlyn Viscount Severn

Luego de beber, bailar como nunca en mi jodida vida fuimos a por más alcohol. Ya estábamos al borde de la inconsciencia pero nos valió madres.

— Un whisky por favor— dije al llegar a la barra.

— Que sean dos.— agregó una muy borracha Rosalia, estaba peor que yo.

El camarero ataco nuestra orden y fue a por nuestras preciadas bebidas. Unos segundos después ya habían dos vasos delante de nosotros llenos hasta el tope que pedían a gritos ser bebidos. Nos miramos cómplice.

— Uno.

— Dos.

Al mencionar "tres" cogimos los vasos y bebimos todo de un trago, la fuerte bebida bajaba quemando todo a su paso, hicimos una mueca por el sabor y nos paramos para seguir bailando, me tambalee un poco por el movimiento pero logre equilibrarme.

Estábamos caminando a la pista de bailes, pero en el trayecto choque con alguna tía por lo que pude ver de su melena negra. Di unos pasos hacía atrás por la violencia del golpe.

Un chico me agarró de la cintura evitando que cayera. El toqué de sus manos en mi piel hizo que mi cuerpo reaccionara y se excitara junto a un escalofrío que se sintió bien. No se que me pasa con este chico pero es mejor mantenerlo alejado me incorpore quitando su mano de mi cintura.

— Gracias.

El chico del cual desconocía su nombre me arrastro hasta la barra.

— Un vodka— ¡Su voz! Dios era preciosa y hizo que me mojara más, de seguro ahora mismo debo de mirarlo con cara de psicópata.

Me miro directamente y en su mirada pude divisar un rastro de enojo que trató de ocultar lo cual no entendí

— Mi nombre es Derek Fernsby Burke.

Así que Derek lindo nombre.

— Ya, es lindo. Mi nombre es Sherlyn Viscount Severn.

Su cara se ilumino y ancho su sonrisa de oreja a oreja.

Chasqueo los dedos y apareció inmediatamente un camarero.

— Agua para la señorita— el chico me miro y se fue en busca de lo que Derek pidió.

— Eres la princesa del pueblo Grojband— solo asentí—. ¿Cómo es que se vive con tus padres?—lo mire con cara de horror y cerré mis ojos para tranquilizarme— lo siento no quería incomodarte— se veía arrepentido y realmente no quería verlo así, sentía algo por este chico pero apenas nos conocemos, debe ser algo del alcohol.

— ¿Vivir con ellos?— bufé con diversión— es estar encerrada en un lugar donde tienes todo pero nada a la vez. Vives con un estatus realmente alto pero no tienes el cariño de tus padres y eso es una mierda. Y en dos meses me comprometerán con alguien que ni siquiera conozco— soltó un sonido de enfado y eso me desconcertó— que sean así me hace daño...

—¿Vamos a un cuarto parece que tienes que despejar?—A ver, a ver este chico quiere follar conmigo y yo también quiero entonces...

— Mira pues sí.

Me tomó de la mano y me llevo a una habitación a oscuras con luces led rojas.

Se acerca a mí y desliza el cierre de mi vestido, lo retira con lentitud. Acerca sus labios a mi cuello dejando rastros de besos húmedos.

Se siente bien pero extraño cuando sus manos me quitan el vestido deslizandolo por mi anatomía, en unos segundos estoy desnuda en frente de Derek no se en que momento quito mi lencería.

Sus ojos esta cargados de lujuria pura.

Su boca muerde, chupa y lame entre mi cuello y clavícula. Se acerca a mi boca y juega con mis labios bruscamente al igual que yo con los suyos, y sí este chico besa de maravilla enreda su lengua con la mía en una danza.

Muerdo su labio inferior y sale un sonido de su boca que hace que me moje aun más.

Cierro mis ojos para disfrutar su camino de besos hasta mis pezones, juguetea con ellos como un jodido profesional su lengua calidad me vuelve loca. Los pellizca con sus dientes y gimoteo.

Me toma por sorpresa cuando sus dedos chocan de golpe con mi clítoris.

Suelto gemidos continuamente, me sujeto de la pared para no caer.

— Me excitan tus gemidos.

Introduce otro dedo y jadeo

Saca sus dedos y gimoteo, me carga estilo princesa que irónico ¿no?. Lo siento duro y caliente al enredar mis piernas en él.

Me deja sobre la cama y se sube sobre mí. Su erección se coloca sobre mi entrada a la vez que lame mi cuello y mandíbula, luego baja y por mis pechos y abdomen hasta llegar a mi entrepierna.

Besa la cara interna de mis muslos y la excitación solo aumenta, lame mi entrada anal hasta mi clítoris, me retuerzo y grito.

Me devora con experiencia que solo hace volverme loca, tengo la mente en blanco para pensar con claridad.

Envuelvo mis manos en su cabello haciendo presión para que no se separe de mi zona íntima.

Me penetra con la lengua y me deshago en su boca.

No deja que de un respiro cuando me gira en posición donde tiene mi culo a su merced me azota con fuerza y me trago el grito.

Agarra su dureza y la restriega contra mí, gimo y me tiro hacía tras para que me penetre pero no lo hace.

— Por favor hazlo— digo como puedo.

— ¿Por favor qué?— pregunta con diversión pero se nota que él también esta loco por entrar.

Quedo callada para torturarlo y esperé, porque no pienso rogarle.

Me azota con más fuerzas y grito, ya debo tener las nalgas de un color rojo, se restriega contra mi entrada.

— Follame dios, hazlo... ¡Hazlo!— entró de golpe sin ningún problema, estaba más que lubricada, solte un grito por la sorpresa, se sentía enorme me llenaba a la perfección.

— ¡Ah! Como me... llenas— dije entre gemidos.

El gruño.

Sus estocadas eran fuertes, esto si que era follar no como los otros.

El nudo en mi vientre se agrandaba cada vez más. Salió con lentitud y entro con rudeza llevándose un grito mío.

— ¡Derek!... Voy a...— no pude terminar la frase porque apretó ese punto sensible dejándome sin palabras, con su otra mano agarró mi cabello en un puño.

— Córrete para mí, reina— me desconcertó el apodo pero lo ignore. Entro y salió dos veces más.

Como si sus palabras fueran una orden me corrí apretándolo con mis paredes vaginales. Dio unas estocadas más y se derramo en mí. Sonreí al sentir algo caliente que obviamente era su semen.

Nos dejamos caer sobre la cama sin salir de mí.

Lo miré con una sonrisa enorme, todavía tenia ganas de él. Me senté a horcajadas en él.

— Me llenaste como nadie— soltó un gruñido—¿segundo round?— pregunte como si de un juego se tratara. Tomó mi cara entre sus manos y me besó con cariño.

— Sí— dijo sobre mi boca y sonrió—sí, princesa insaciable.

Obsesivo Amor [borrador][Parada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora