El Silencio Que Resuena En Mi Cabeza (Tadano x Komi)

Una pequeña visita nocturna.

El día era muy agradable, mi ansiedad había disminuido con el pasar de los años, todo gracias a Tadano y Najimi, principalmente Tadano, sin ellos no se si hubiera podido salir adelante.

Hoy había quedado en salir con Tadano, me llevaría a dar un paseo. ultimamente, Tadano se habia comportado... extraño. Usualmente suele ser amable, tímido y amigable pero, estos días han sido diferentes, es como suele ser normalmente, sin embargo, he notado como al estar cerca huele mi cabello y lo acaricia de manera tan sutil que apenas y pude notarlo, noto su mirada cuando interactúo con otras personas, no se si le alegra o me supervisa. Antes no importaba que usara, para el estaba bien, ahora al ir de compras suele escoger ropas holgadas y largas para mi, cuando me pruebo algo de mi talla, suele decir que luzco linda, pero con la ropa que el escogió me vería mas linda.

Aun con eso, creo que solo estamos avanzando en nuestra relación

Inocente Shouko...

Es normal si quiere cuidarme, lo entiendo

Lo entiendes...

Me hace feliz.

A mí aún mas.

Tadano sonrío ante lo que había leído en el diario de su novia mientras ella dormía.

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Shouko despertó, la luz que se colaba por su ventana comenzó a molestar en sus ojos, talló sus ojos con cuidado y lentamente se sentó en su cama, se sentía extraña, había algo que le picaba en uno de sus pechos, incómoda deslizó su mano hasta la zona donde la comezón se hacía presente pero...
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La respiración de Shouko subía y bajaba de manera tranquila, simplemente una vista hermosa... Soy tan afortunado...

Era una noche normal en mi día a día, valía la pena amanecer cansado siempre cuando pudiera ver a Shouko.

—Hi-hitohito...—mi corazón dio un vuelco al escucharla, se removió y apretó sus lindas manos en puños, la mire atónito, jadeaba. Comencé a sentir un cosquilleo bajo mi vientre seguido de una presión, sabía que era, sin embargo no me atrevía a ver hacia abajo —Nghh...— la escuché quejarse y fue entonces que la presión debajo de mi pantalón fue interrumpida por un dolor placentero y punzante pero momentáneo, ya no podía contenerme, su belleza y la forma en la que me llamaba en sueños...
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Fue entonces que se dio cuenta que su brasier estaba mal acomodado, se extrañó ya que nunca antes le había pasado algo similar pero, quizá se desacomodo por aquel sueño de la noche anterior, se había removido mucho, eso pensó.
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—Mghh..— mis labios presionaban los suyos y mi lengua saboreaba el interior de la dulce boca de Shouko, estaba sonrojada, que estaría soñando?...
Ese pensamiento se esfumó cuando al removerse rozó uno de sus pechos con mi brazo, me separé y admire orgulloso el hilo de saliva que nos unía. Jadeaba, ambos recuperabamos aire, a pesar de ello no me detuve, todavía no era suficiente. Deslice mi mano por debajo de la blusa de pijama de Shouko y retiré aquel molesto brasier, permitiéndome sentir la suavidad de sus pechos... No pude, simplemente no pude resistirme a...
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—Mh?— Antes de acomodar su brasier, algo la hizo esperar y revisar uno de sus pechos, ¿Porque estaba un poco húmedo?— Q-quiza sea leche... Pero no estoy embarazada...— aún así quizo engañarse con la inocente idea de que su cuerpo le había mostrado que ya estaba completamente desarrollada, ¿Verdad?
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Probarlo...