Huellas En El Tiempo

Ep. 5. Soltar

Hoy me desperté temprano, mi ventana estaba semi abierta y los rayos de sol se escabullen, me golpeaban la cara.

Estaba más tranquilo que de costumbre y solo tenia algo en mente, mi madre.

Tras darle vueltas y vueltas al asunto, recordé que cuando volví a ver a Ash fue porque durante el día, alguna de mis compañeras estaba usando su perfume, la misma fragancia que ella usaba..

Podría ser que para viajar solo debería estimular mi mente de alguna forma para que tenga alguna sensación que me recuerde a esa época de mi vida. Al menos, así fue cuando volví a ver a Ash, el recuerdo de ella volvió a mi mente acausa de un perfume, no recuerdo bien que perfume usaba mi mamá, tampoco se me ocurre alguna cosa que pueda llevarme a un momento.

Me emocionaba bastante la situación, sentía que estaba resolviendo un misterio, me sentí como un detective pensando en pistas y siguiendo los hilos para encontrar una respuesta.

En algún momento vi de reojo algo interesante, una foto en un porta retrato viejo, era de un metal tipo aluminio de color gris, bastante barato en mi opinión, nunca me gustó mucho y menos la foto que portaba, aún así, era un regalo que nos hizo nuestra madre, según ella las fotos eran más que momentos plasmados por un aparato. Para ella las fotos eran recuerdos en hojas.

Mi madre era amante de la fantasía, una mujer bastante alegre, siempre con una sonrisa aunque no tuviera motivos para sostenerla.

Ese recuerdo de mi madre me dijo la respuesta, si un recuerdo no era la mejor forma de revivir un momento, no habría nada sobre la tierra que me ayudase hacerlo.

Recordé que teníamos un álbum familiar, en él estaba la última foto que había puesto mi madre, una mía con quien era mi mejor amigo, fue la primera vez que invité a alguien a casa, le pareció que nuestra amistad era algo que se debía "atesorar" aunque fuese únicamente en una imagen.

Estaba aún acostado en mi cama, no había desayunado, pero tras dar con la respuesta, me puse de pie inmediatamente, fui a buscar una caja que tenia dentro de mi armario. Una caja de puros recuerdos de mi madre, en ella había un vestido el cual era especial, para mí siempre fue solo un trozo de tela que no le quedó más después de su segundo embarazo, pero ella decía que tan solo verlo la transportaba a una de sus mejores noches.

También dentro estaban alguna que otra de sus joyas, su anillo de compromiso y en el fondo de todo yacía mi esperanza de volver a verla, un álbum de fotos viejas, con una portada totalmente azul y un arcoiris en el medio, tenía resortes blancos sosteniendo las hojas y lo más importante, dentro habían una cantidad bastante grande de muchísimos momentos tanto de la adolescencia como de su adultez.

El libro no estaba lleno, un poco después de la mitad se terminaban aquellas fotos, la última por supuesto era aquella, donde yo estaba sentando con el mando de la consola del momento junto a mi amigo en un sofá café. Él tiene esa sonrisa enorme que lo caracterizaba y yo estaba algo avergonzado, ahora me siento como un patán por las formas en la que pude haberme comportado con ella.

Agité con fuerza mi cabeza evitando seguir dándole vueltas a un asunto que ahora no tenía sentido pensar.

Tomé la foto y la llevé a mi cama, en ese momento la vi fijamente, me concentré en el recuerdo, en lo que hacíamos los 3, en el olor que pude haber sentido, las sensaciones, los sentimientos, todo eso.

Mientras veía la foto, mi alrededor se empezó a nublar, no sabría decir si estaba siendo por lo concentrado que estaba o porque estaba funcionando.

Todo se fue oscureciendo hasta que ya no había nada más que la foto enfrente mio, luego fue como si estuviera en mi mente, porque sentía que la foto era gigantesca en comparación conmigo. Fue ahí cuando di un parpadeo tan largo que sentí que fueron horas y cuando abrí los ojos...