Capítulo 4 | Camiseta

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—Sophie, haz caso a Jesse, va él.— Dijo el padre mientras me miraba fijamente

—Ves, el viejo me da la razón.— comentó Jesse divertido

—No me hagas cambiar de opinión, Jesse.— Volvió a comentar Walt

Jesse salió, pero detrás de este fue Sophie, ahí no había nadie, pero de repente un rodamundos con pinchos apareció y rasgó entera la camiseta de Sophie, dejando ver todo su abdomen y una pequeña parte del sujetador negro.

—¡NOO! ¡MI CAMISETA DE EMINEM!—

Jesse se asustó con el grito y se giró para ver que pasaba, igual que Walt, que este simplemente salió de la caravana sin mostrar expresión de sorprendido.

—Dios, vaya destrozo.— Dijo Walt poniendo una pequeña mueca.

Jesse simplemente se quedó mirando el abdomen de Sophie embobado.

Walt se dió cuenta de esto y habló

—No, no te vas a quedar así, no con este chaval con complejo de horno suelto.— Comentó a Sophie señalando con la cabeza a Jesse.

—Y que me pongo, no se si lo sabías pero me he unido al negocio hace unas horas, no he traido ropa.— Contestó

—A mi no me molesta, como si se queda así.— Dijo Jesse

—Ya, ni de coña— Walt se acercó a Sophie para observar la camiseta. Era una blanca y holgada, que en el medio tenía una imagen de la canción "Mockingbird" y de fondo a Eminem con un microfono em su mano.

—Vaya, no tiene arreglo.— dijo

—¿Y que hago? No tengo más ropa, y nos quedan cuatro días para estar aquí.—

—Yo te puedo dejar algo, he traido ropa de sobra, porque tu padre siempre me hace cambiarme al terminar de cocinar.— Ofreció Jesse.

Sophie miró a su padre esperando su aprobación, a Walt no le hacía mucha gracia pero terminó aceptando, eso era mejor que Jesse se quedara embobado cada vez que la mirara.

—Bien, iré a por una.—

Jesse entró en la caravana y salió con una camiseta que ponía "I ♡ boobs"

—No, no me voy a poner eso, ve a por otra.— Rechazó Sophie

—Era coña— rió — Tengo una de Eminem, ¿la quieres?.—

—¿De verdad tengo que contestar a eso?, traemela antes de que vaya yo corriendo a buscarla anda.— contestó

—Vale vale, sacó el carácter del padre, ¡pero la belleza de la madre!— Eso último lo dijo gritando y metiendose dentro antes de que Walt pudiera alcanzar a tirarle algo a la cara, Sophie solo se quedó quieta, algo sonrojada, y con una mueca.

Un minuto después Jesse salió con una camiseta doblada en la mano, y se la entregó a Sophie.

Esta la desdobló y pudo observar una camiseta con este estampado:

Esta la desdobló y pudo observar una camiseta con este estampado:

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—Es... pre... ¡CIOSA!— Exclamó, y sin saber muy bien por qué, abrazó a Jesse.
Este al principio se quedó tieso pero luego se amoldó a abrazo y posó sus manos en la cadera de Sophie, pero en cuento Walt miró con los ojos al rojo vivo este subió las manos hasta la espalda.

Después de no mucho Sophie soltó a Jesse y fue al interior de la caravana para ponerse la camiseta.

Salió con la camiseta puesta y le llegaba por las rodillas, pareciendo que no llevaba nada debajo debido a su pequeño short.

Jesse no era alto, ni mucho menos, pero siempre usaba camisetas y pantalones oversize, o simplemente una o dos tallas superiores a la suya, no le gustaban los jeans apretados ni las camisetas que simplemente llegaban por la cadera, siempre vistió como "vagabundo", igual que en el instituto, y Sophie se acuerda perfectamente de eso:

Sophie y Jesse iban juntos a las mismas clases (también a química, que les daba Walt) y siempre se llevaron bien, llegaron a considerarse mejores amigos incluso, un día, estaban los dos en casa de Jesse, mientras este fumaba "maría" ella simplemente hablaba con él mientras observaba como sd iba acabando el contenido de la pipa.

Acabaron durmiendo juntos esa noche, incluso se besaron en un momento, pero solo eso.

A la mañana siguiente, cuando Walt se enteró de que su hija había dormido con su famoso alumno yonki, se presentó en casa de este hecho una furia creyendo que se habían drogado juntos, o incluso que habían tenido sexo, y Walt no dejó que Sophie volviera a ver a Jesse.

Cuando estos dos empezaron a trabajar juntos, Jesse se lo explicó y Walt, increiblemente, le creyó, por eso cuando Sophie apareció y se unió al negocio junto a Jesse, no le importó, no por ahora.

Sobredosis de amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora