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Al cerrar la puerta me ví en el gran espejo de cuerpo completo, era un desastre, mi cabello estaba revuelto, mis labios rojos, mis mejillas rojas y mi ropa fuera de lugar.

Maldita sea, me veo como un completo chico sin experiencia.

Palmee mi rostro y me enfoque, buscaba la ropa que Jisung me había pedido.

Por un momento pegue los pies en la tierra, no deja de pensar "estás siendo manipulado para que tengas relaciones" mi cerebro me gritaba, me pedía que me detuviera pero, recordaba sus manos, el sentimiento de estar acorralado y eso podía más conmigo.

- No pienses Minho, solo hazlo. - Me mire al espejo con la ropa entre las manos.

Baje mis pantalones y ropa interior, me quite el suéter y la camisa de botones quedando completamente desnudo.

Tome la falda entre mis manos y me agache metiendo un pie y después el otro para subir la falda hasta mi cadera dejando que está cubriera mi trasero ahora expuesto al no llevar nada de bajo.

Mi erección seguía arriba así que por ese lado no tenía problema, tome el top entre mis manos, este tenía un pequeño estampado de un manga de dudosa procedencia y me lo puse, este solo cubría mis pezones dejando mi abdomen blanquecino un poco erizado y rojo por el frío.

Me puse unas calderas un poco largas negras decoradas en parte superior con dos líneas blancas y por supuesto la diadema con las orejas de gato.

Pensé en agregar un pequeño detalle y coloque un collar en mi cuello con su nombre "LeeKnow" escrito en ella, en el que había mandado a hacer hace tiempo.

Me mire frente al espejo, tuve la sensación de que me tomaría fotos o subiría algún vídeo pero mi realidad estaba un poco más alejada de eso.

Suspire pesadamente, tenía nervios, puse mi mano pesadamente en la fría perilla y la gire viendo frente a mi la puerta de mi habitación terriblemente silenciosa.

Del otro lado estaba él, ¿Que reacción tendría?.... ¿Porque me preocupa eso? Mierda, estoy pensando cosas extrañas.

Di el primer paso, todo estaba bien, di el segundo y después el tercero, mi respiración se aceleraba. Mire la puerta frente a mi, temblorosamente puse mi mano en la perilla para después girarla.

Estaba de espaldas, no tenía su camisa puesta, podía ver desde atrás los tatuajes de sus brazos y uno que no había visto en su espalda, este se giró y abrió sus ojos de golpe.

Cerré la puerta tras de mi, estaba nervioso pero no dejaría que lo supiera, puse mi mejor cara de desagrado y di un paso hacia adelante.

Jisung sonrió ampliamente, no quería sonrojarme pero estaba viendo sin querer sus abdomen, tan marcado y firme, me miraba coqueto mordiendo un poco su labio.

- Maestro, con todo el respeto que se merece.... Está tan bueno. - Este se acerco a mi, yo no quería hablar pero no lo importo en lo más mínimo.

Me tomo de el trasero y me subió haciéndome enredar las piernas en el.

-Uhh ¿Sin nada abajo? - Uno de sus dedos paso de largo por mi entrada haciéndome empuñar mis manos. - Mmmm... Lee, me estás provocando.

Camino conmigo subiendo a la cama donde me puso en el medio de esta, su mirada estaba fija en mi rostro, podía sentir su mirada comiéndome vivo.

Estaba sobre mí, viéndome como un depredador mira a su presa.

Sin decir nada, sin despegar los ojos de mi, una de sus manos tomo mi mandíbula y con uno de sus dedos acaricio mi labio inferior, su mano bajo por mi abdomen descubierto hasta llegar hacia abajo tomando el dobladillo de la falda.

-Minho, ¿Puedo meter mi mano de bajo? - Sonrió nuevamente para después mirar hacia abajo.

No dije nada, solo asentí con mi cabeza.

-No no no, dime. - Su mano fue hacia mi pene acariciándolo por el encima. - Se que no quieres hablar pero eso le quita lo divertido, dime qué puedo meter mi mano debajo de tu falda.

Su tono burlesco se sentia como un balde de agua fría en mi, quería que lo hiciera, estaba jugando conmigo.

Su mano subía y bajaba pero cuando veía que cerraba los ojos paraba.

Mierda.

-P-puedes...

-¿Que puedo Minho? Yo puedo muchas cosas.-

- Mete.. tu... Puedes meter tu mano. - Mire hacia mi alrededor, evitando su mirada sobre mi.

- Así que puedo meter mi mano debajo de tu falda para manosearte.... Hmmm. - paso uno de sus brazos debajo de mi cabeza, haciendo que me levantará un poco y lo mirara a los ojos.

Sentí su mano alejarse de mi erección para ir hacia el dobladillo de mi falda, su mano fue subiendo llevándose la falda sobre la parte posterior de la palma, sentía mi piel erizarse, estaba muy cerca, tan cerca.

Tocó muy suavemente mi erección, sentía mis ojos brillantes, Jisung acerco su rostro lo puso a un lado de el mío dejando su oreja a un lado de mi boca.

Suavemente tomo mi erección y empezó un vaivén, lentamente hacia arriba y hacia abajo, mi respiración empezó a acelerarse, me desesperaba la lentitud con la que esté lo hacía, pero sentía todo tan de piel.

-R..rápido... Dije más como un suspiro.

-¿Rápido? Me gusta lento y ver cómo poco a poco tu respiración se desestabiliza, pero... Si lo quieres rápido...

Sin avisos, empezó a subir y bajar de golpe rápido, de mi boca salieron con fuerza gemidos quebrados por la repentina acción haciéndome arquear mi espalda y encurbar mis dedos.

- Se escucha tan lindo gimiendo. - Escuché la voz de Jisung un poco ronca. - Di mi nombre, dilo.

No sabía que hacer, se sentía tan bien su mano, era más grande y fuerte que la mía, abarcaba más de lo que yo podía.

Apretó suavemente mi miembro parando el movimiento.

- Di mi nombre, y te haré sentir mejor que esto. -Jisung lamió y mordió la punta de mi oreja haciéndome sentir un cosquilleo seguido de el movimiento de su mano.

Se sentía tan bien, tan bueno, está bien, lo haré.

- J-jisung.. - Pude tener una nueva vista de mi, mi voz sonaba totalmente diferente, no me reconocí, sonaba tan excitado, tan llevado, no era yo.

-Eso... Sabía que podías, ahora que lo dijiste una vez... Podrás hacerlo unas 10...15 o 20 veces más. - Beso fugazmente mi mejilla y se separó de mi haciéndome lloriquear por la repentina distancia.

Vi en primera fila como de su pantalón se notaba un gran bulto, quitó su cinturon dejandolo a un lado de mi. Quitó su pantalón para después liberar al gran amigo que tenía allá abajo intentando escapar.

-No te prometo que no te vaya a doler, pero puedo prometerte que te va a encantar. - Sus palabras sonaban tan sexys y buenas.

Okay, creo que me estoy enamorado de este chico.

Dios perdóname por lo que estoy a punto de hacer.

....

2/..

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ONLYFANS ▪︎ HanKonwDonde viven las historias. Descúbrelo ahora