-Mitsuri Kanroji, la "consejera del amor" de nuestros dos tórtolos, ¡qué hermoso el amor!.
-"KYAA, qué hermoso es el amor!"
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-Primera historia.
-Si no te gusta este shipp, te invito a retirarte sin dejar comentarios agresivos...
-Sanemi está callendo tan bajo ahora mismo.- dijo un heterocromático- -¡A mí me parece una escena muy extravagantemente cliché!- dijo Tengen observando a nuestros dos tórtolos desde un arbusto con su compañero Obanai. ¿Qué hacían ellos ahí? Ni ellos sabían, pero lo que sí sabían es que esa escena es muy románticamente cliché.-
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-Gracias por invitarme a este lago, Shinazugawa.- dijo el azabache un tanto avergonzado por lo de hace rato.- -Ajá, no es nada, y. . Ya deja de decirme "Shinazugawa", es muy formal. Dime solo Sanemi. -Giyuu soltó una risita- De acuerdo, 'Sanemi'- dijo entre pequeñas risas.-
Sanemi solo atinó a sonreír ligeramente.
Tras esta pequeña conversación, el ojiazul procedió a retirarse, despidiéndose con una ligera sonrisa -pero bonita-, Sanemi se quedó un rato más allí, la paz del lugar le agradaba bastante, se iría a ese lago más seguido, definitivamente. Unos minutos más tarde, los dichosos espías de Obanai y Tangen se le acercaron al albino a hacerle millones de preguntas relacionadas con 'Giyuu'. -¡Mi extravagante amigo! -Tengen, deja de decir "extravagante" en todas tus oraciones.- dijo el más bajo de los tres, Tengen solo le atinó a mirarlo mal.- -¿Ustedes qué hacen aquí? -¿Acaso no podemos? -Bagh. Excusas. ¿me estaban viendo, no?- dice ya cansado Sanemi, ahí se fué su paz interior.- -. . . ¿Tan obvio era? -¡SERÁS!- le grita el ojiamatista, era más que obvio que esos dos estaban ahí hace al menos media hora- -Ya, ya, el tema, ¿¡cuándo te le vas a declarar!? -¿crees que tiene los huevos necesarios para hacerlo?- le dice Obanai a Tengen, en sí, razón no le falta, todavía no tenía las agallas para hacer eso.- -Dos cosas, uno, todavía no lo haré, dos, cierra la puta boca enano de cuarta. -Aigh, ya empezó el enojón- se burló el más bajo.-
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Cómo siempre, nos encontramos a un albino y a una pelirosada platicando, discutiendo que harán en su próxima jugada del amor, según Mitsuri. Sanemi ya tenía en mente su declaración, pero necesita el apoyo de la chica, no se siente completamente listo aún.
-¡KYAAAAA! ¡YA TIENES PLANEADO TU DECLA. . !- la muchacha es callada por el albino.- -¡No lo grites, tarada!- susurró medio gritando.- -. . . Lo siento, solo me hace ilusiones el qué te dirá, el cómo lo planearás, el dónde te declararás, ¡Son muchas cosas que pensar, me emociona!- dijo muy emocionada.- -. . Me va a costar. Sí.
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Ya sé, me he desaparecido un tiempo, sí, pero he tenido unos cuantos problemas, pero he aquí el cap. ¡Se acerca el final de este mini-fic! Se despide, Zune. ‹3
