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La aglomeración de personas que acudieron a presenciar la música en vivo del evento se encontraban riendo y disfrutando bajo el cielo nocturno. El ambiente era fresco y agradable.

Yeonjun, Soobin y Taehyun llegaron justo a tiempo para poder presenciar el espectáculo desde el momento en que comenzara; a los pocos minutos también lo hizo Kai y todos se encontraron.

Hyuka, no hacía falta que los mandaras a traerme, ¿sabes? —dijo el pelirrojo en voz baja buscando que solo el mencionado lo escuchase—. Igual iba a venir, niño dramático.

Kai solo asintió sin darle mucha importancia a aquella declaración y el grupo prosiguió a buscar un buen sitio; el evento estaba por comenzar.

El festival dio inicio de forma normal. Algunas de las canciones no eran las más conocidas, pero la buena energía del sitio era contagiosa y la estaban pasando bien.

Numerosos focos brillantes daban luz y claridad al escenario de considerable tamaño, iluminando hasta sus esquinas. A esas horas, ya cantidad de bandas independientes habían hecho sus actuaciones, dejando paso entre los últimos a la banda de Beomgyu, Hikers.

La presencia escénica de la agrupación de cuatro personas podía ser apreciada con claridad, eran bastantes buenos. Y no, no es una opinión subjetiva solo porque son amigos de uno de los miembros; cada quien destacaba a su manera.

Sin embargo, la atención de Taehyun se había desviado solo al guitarrista principal; es decir, Beomgyu. Esa noche lucía más increíble de lo que pudo haberlo apreciado alguna vez; concentrado en llegar a cada nota pero al mismo tiempo divirtiéndose, sonriendo como si estuviera viviendo el mejor momento de su vida. Quizá sí lo estaba, el mayor había nacido para estar en los escenarios acompañado de su guitarra eléctrica. Su cabello azabache caía por su frente, por la cual comenzaba a asomarse unas perlas de sudor gracias a la intensidad del momento.

HIkers presentó tres canciones propias, para después finalizar con un cover de la canción de una banda americana, adaptándola a su estilo propio. Beomgyu cantaba algunas partes.

«No se siente mal. No se siente mal en absoluto. No me importa nada, no me importa nada más que tú.»

El guitarrista esperaba sus emociones pudieran transmitirse de la forma que buscaba a través de su voz, porque realmente estaba sintiendo aquella canción en lo más profundo de su alma. Incluso en ese momento, no paraba de pensar en una sola persona; en su chico, quien más vale se encontrase entre esa multitud del público.

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El primer día del evento musical tuvo su hora de finalizar cerca de las dos de la madrugada. Era fin de semana, estaba bien. Todas las presentaciones acabaron con normalidad, había sido un éxito para la mayoría.

mala idea. [taegyu]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora