"Me gustas George, pero no puedo"
"¿Por qué no?"
"Porque voy a morir"
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Astrid no es la típica Ravenclaw. No estudia, no es inteligente y se ha quedado fuera de la sala común demasiadas veces.
George Weasley se ena...
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Astrid todavía estaba sentada en su escritorio en la sala común de Ravenclaw.
Mojando su pluma en la tinta, comenzó a escribir una vez más.
'Estimado profesor Dumbledore,
Espero que se encuentre bien.
Voy a hacer esta carta breve. Como sabes, soy mayor de edad para hacer magia fuera del recinto escolar.
Teniendo esto en cuenta, he tomado la decisión de unirme a la Orden.
Sé que puede que tengas dudas, pero en mi defensa, mis padres formaban parte de la orden a la misma edad. Quiero seguir sus pasos.
También sabes que soy mucho más avanzada que la mayoría de los estudiantes de esta escuela. Por favor déjame hacer esto.
Gracias,
Astrid Stonewall.'
Astrid selló la carta y la puso en su mesita de noche.
Mientras se metía en la cama, sólo podía pensar en la experiencia de hoy.
****
Era una fría mañana de octubre.
Astrid odiaba tener frío pero hoy era emocionante. Le encantaba ir al pueblo y elegir sus dulces favoritos de Honey Dukes y algunos suministros nuevos de Zonko's.
Pero esa no fue la razón por la que Astrid se despertó temprano esta mañana.
Dana Creak, su compañera de dormitorio y una buena amiga, la despertó a la fuerza de su sueño.
"¡A! ¡Despierta! ¡Llegas tarde al desayuno!" Astrid no movió un músculo. "¡Había una carta misteriosa para ti en la sala común! ¡También Lewis Harrison estaba preguntando por ti!"
"¿De quién es?" Preguntó Astrid, con la voz ronca y los ojos medio cerrados. Ella ignoró por completo el comentario sobre Lewis Harrison. Dana ha estado burlándose de ella durante meses.
"¿F&G?" Dana dijo casi en tono interrogativo.
Los ojos de Astrid se abrieron de golpe mientras arrebataba la carta de la mano de Dana.
"¿Qué es todo esto?" Ella preguntó.
"¡Te lo explicaré en el desayuno!" Astrid dijo.
"Te veré en el gran salón. Tengo demasiada hambre para esperar." Dijo su amiga tímidamente. Astrid ahuyentó a Dana, pero la mirada de Dana no la abandonó hasta que Astrid cerró la puerta.
'Querida A,
Descubriremos quién eres para Navidad. Puede que no seamos Ravenclaws, pero somos igual de inteligentes.
Hay una reunión en Hogsmead. Esperamos que venga alguien contra Umbridge.
