Capitulo XVIII

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《《~~~~~~~~~~~◇~~~~~~~~~~~》》

Legue a casa e inmediatamente me encontré a mi madre en su modo interrogadora, como si se hubiera perdido un capítulo de la telenovela que creía que era mi vida. Vio que entraba con las bolsas en mis manos y se dio cuenta en seguida de donde venía.


-¿Y como te fue hija? ¿Encontraste tu vestido ideal? ¿Cómo están tus amigas? Vamos cuéntame.

-Tranquila mamá, estoy cansada.

En realidad no me encontraba tan cansada, pero sabía que esa noche vendría Chat, lo había prometido, y quería estar tranquila y dormir un ratito así podíamos quedarnos hasta tarde charlando sin que el sueño se interpusiera.

-Déjame dar una ducha primero.

-Pero cuéntame un poquito, que luego voy a salir.

-¿Vas a salir? ¿A dónde? ¿Con quien?- esta vez los papeles se intercambiaron y ahora yo la interrogaba.

-Tu respondes mis preguntas y yo las tuyas ¿Trato?

Suspire, no sabía que se estaba ocultando mi madre pero rogaba al espíritu de mi padre que no se haya estado chateando con un desconocido y empezado a tener citas a ciegas cuando ni siquiera había pasado un año de duelo, pero tendría que ceder para averiguarlo.

-A ver- dije tratando de recordar las preguntas- Bien, no y Bien, igual de emocionadas que tu.

-¿No encontraste vestido? Bueno entonces te mostraré los míos, aunque no creo que sean tan lindos como los de tu amiga ¿puedo verlos?

-Más tarde mamá, ahora contesta.

Mi mamá puso la misma expresión que yo al recordar las preguntas.

-Si, a un bar, con amigas. Yo también tendría que volver a salir, no eras la única deprimida. Pero yo tenía que ser fuerte por las dos. Vamos ve a bañarte, te dejaré todos los vestidos en tu cama ¿si?

Me tranquilice un poco y le di las bolsas a mi mamá, aunque sabía que en parte lo hacía porque quería verlos. Me alegraba que saliera con amigas y no la juzgaria si algún día quisiera pasar de página, por más que sea raro. Le di un pequeño abrazo antes de ir al baño y le agradecí, solo esperaba que el día del baile no me recibiera con el doble de emoción que hoy, cuando solo había sido una prueba de vestuario con amigas.

Me metí a la ducha y me quede allí durante un largo rato, escuché a mi madre saludar desde la puerta con un fuerte "te quiero" antes de irse y luego perdí la noción del tiempo. Cuando salí el baño estaba hecho un sauna y no me podía ver en el reflejo del vidrio debido a lo empañado que estaba. Prendí el secador y comencé a avanicarme el cabello para que se secara lo más rápido posible, luego salí de la ducha aun con la toalla y fui a mi habitación.

La cama estaba estampada de 5 o 6 vestidos de varios colores, además del celeste y el rojo de Marinette, el primero que llamo mi atención fue uno con tonos lila y violetas que brillaba cuando le daba la luz, contrastaba con otro negro con flores rosa y... el vestido de novia de mi madre. ¿Porque mi madre...?

Un ruido llamo mi atención, mire hacia la ventana y me encontré la imagen sonrojada de Chat Noir en la terraza.

-¡Chat! Llegaste temprano- dije sobresaltada sosteniendo fuerte mi toalla

Chat noir volteo y se tapo la cara.

-De hecho... estuve esperando en el tejado un rato y como no aparecías me preocupe....

Mire la hora y efectivamente tenia razón, él no había llegado temprano, yo me retrase en la ducha perdiendo la noción del tiempo.

-Oh...

El Tiempo: Único Testigo De Nuestro Encuentro (Chat Noir Y Tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora