ஜ۩۞۩ஜ M̈ök̈s̈ḧä ஜ۩۞۩ஜ

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⚠️Este fic está clasificado para personas mayores de edad. Esto es una advertencia de contenido.⚠️

¿Puede un sentimiento mantenerse casi intacto por mucho tiempo? Se preguntaba Hwanwoong mientras caminaba por los pasillos de un hospital. ¿Se puede extrañar a alguien por tanto tiempo? Cómo es posible albergar tantos deseos de volver a ver a una persona, de saber cómo está o cuánto ha cambiado. Hwanwoong apenas seguía siendo el mismo después de siete años, tal vez... había engordado un poco o aumentado su masa muscular; pero su interior seguía añorando tiempos pasados. Por supuesto, no extrañaba todo lo pasado, hubo cosas que debió superar y otras en las que reflexionar; pero no pudo deshacerse de la nostalgia ni de la tristeza que le provocaba la ausencia de 'aquel que no podía ser nombrado' (alias que inventó Dongju junto a los demás para evitar decir su nombre en su presencia). Sin embargo, daba igual mencionarlo o no, aquello no iba a cambiar el hecho de que no había sido capaz de querer a alguien más con la misma intensidad, ni que hablara sobre él con Geonhak en una de sus tantas citas médicas. Divisó la puerta de madera del consultorio que tan familiar se había vuelto y tocó suavemente.

— Pase. — Escuchó decir desde el interior, por lo que se adentró en la habitación, pudiendo divisar a Geonhak en su vestimenta rutinaria y sus lentes. — Oh Hwanwoong-ah, ya es hora de tu cita ¿no? — Dijo mirando su reloj e invitando al otro a sentarse.

— Pues sí, ya tenía ganas de venir, hace mucho que no nos vemos y solo chateamos con los chicos de vez en cuando.

Geonhak suspiró cansado. — Trabajar en el hospital no es fácil, todos los días estoy lleno de consultas.

— Confirmo, nunca nadie nos dijo que la vida de adulto era más difícil que la de estudiante; desde mi última cita contigo he estado en esta coreografía particularmente difícil que me ha impedido enfocarme en otras cosas ¿sabes cuántas veces terminé comiendo solo ramyeon en el día?

El otro asintió. — Por cierto, cuando llegue la hora del almuerzo pasa por la oficina de Seoho, le va a alegrar mucho verte.

— Solo quieres que sea tu recadero para que traigamos la comida de la cafetería a tu consultorio. — Dijo entrecerrando sus ojos, adivinando las intenciones del contrario. — Además, sabes que va a seguir pidiéndome que acose a Dongju y a Keonhee para que se reúnan con nosotros a cenar.

— Esos dos piensan que son los únicos ocupados con sus 'agendas de celebridad', pero Seoho y yo también estamos muy ocupados, y aún así nos esforzamos en querer planificar una comida con todos.

Hwanwoong rió ante la mortificación que mostraba el de voz gruesa. — Está bien, pasaré a ver a tu ardilla cuando terminemos.

— Ok, ahora pasemos a lo que nos concierne. — Dijo mientras escribía sobre una hoja en blanco. — ¿Has presentado algún síntoma de ansiedad recientemente?

— Sabes que no es eso, dejé de tener esos episodios hace años.

— Ni me recuerdes ese tiempo. — Se estremeció un poco. — Incluso te regañé por ver películas de terror sangrientas.

— Quería superar mi trauma rápidamente, ahora ya puedo ver sangre sin tener ganas de desmayarme.

— Pensé que podrías haber tenido una recaída, en los últimos 3 o 4 años habíamos reducido tus citas porque estabas mejorando.

— Y porque eres un buen psicólogo. — Lo interrumpió.

— El caso es... que pensé que detendríamos las consultas luego de que la última fuera hace meses, y me preocupé cuando de repente pediste una cita.

— Es que... — Se debatió la mejor manera de introducir el tema. — Ya sabes... necesito saber...

Geonhak se mantuvo pensativo unos segundos, hasta que entendió a qué se refería el menor, suspirando agotado después. — ¿¡De nuevo!? Yeo Hwanwoong, ¿cuántas veces voy a decírtelo? Deja de preguntarme sobre 'ese que no puede ser nombrado'.

SamsaraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora