REGRESE

Capítulo 39 Mito Senju x Madara Uchiha Parte 3 final.

MITO

Después de la primera visita de Madara frente a frente después de más de treinta años. Su querida esposa se comporta como una señorita de dieciséis o veinte años.

Patética...

Estaba llegando a la casa un poco malhumorada... Entro a la casa veo a Hashirama sentado en el sofá.

— Como te fue en la cita con el joven Uchiha -preguntó Hashirama-

— Él no llegó -dije sentándome en el sofá-

— ¿Que? Pero porque no llego. -dijo el-

— Quien llegó por parte de él fue Madara. -dije levantandome para servirme un trago escocés-

— ¿¡Que!? -dijo el quitándome el trago y lo miro incrédula por haberme quitado mi trago-

— Sí, así como me escuchas Madara llego por su lugar y después llego su amada esposa. -hice mueca con mis manos-

— Pero que, que dices pero tú le enviaste la dirección con el otro nombre.

— Pues si así hice. Pero no se que sucedió y el se aparece detrás de mi. Lo que sabe que detesto eso. -dije-

— Esto es extraño -dijo el- ¿Estas segura que le enviaste con el otro nombre y luego él se presentó en el restaurante.

— Bueno es que yo no soy grabadora para estar repitiendo -dije malhumorada-

— Ya, ya tranquila. Creo que es reencuentro no te dejo bien, emocionalmente -dijo Hashirama-

— Mañana iré a visitar a Tôka -dije- y trataré de convencerla de que venga con nosotros.

— Está bien.

En eso llega Kawarama todo asustado por la llamada de la casa Uchiha. Me da llamada y lo escucho hablar. Y decirme lo sucedido. Mis manos temblaban del miedo. Después de colgar la llamada.

— Ella, ella fue secuestrada... -dije en susurro.-

— Que sucede Mito. -dijo Kawarama-

En eso agarro a Kawarama del cuello con toda mi furia.

— Me habías dicho que no tenías nada que ver con los gemelos Kinkaku y Ginkaku. -le grite-

— Si, si es verdad.

— Mito, Mito, Mito suéltalo. -dijo Hashirama, tomándome de la cintura-

— No se de que me hablas. -dijo en el momento que lo dejaba sin aire-

— Izumi, nuevamente está secuestrada. -dije y lo tiré al suelo-

El trataba de soltarse de su corbata por falta de aire.

— Ya te dije que hace tiempo ellos no trabajaban para mi.

— Pues busca a tus hombres y diles que tienen que rescatar a alguien importante. Que les doy menos de cuarenta y ocho horas para que la encuentren.

— Ahora mismo lo hago. -dijo el-

— Diles que me la traigan viva, sin ningún rasguño. Oh sino le van a caer todo el peso de la ley. -dije-

— Vamos a la casa de Madara Uchiha. Debe tener a Naori en la casa.

— Son las doce de la noche -dijo Kawarama- no puedes irte sola.

— No se lo estoy preguntando.  Si no me acompaña. Bien iré sola. -dije-

— Pero hace tiempo que no sabes la casa donde vive. -dijo Hashirama-