October ─ Grant Collins

Capitulo Uno: Encuentros Inesperados

Flashback

—¡Oh, mierda! — Helen suelta una carcajada al ver cómo su batido cae sobre la ropa de su prima.

—¿Qué te pasa?! —exclama Lexy, furiosa.

—Lo siento, primita —se disculpa sarcásticamente y se aleja.

Más tarde...

—No era necesario traerme a casa —dice Helen, ajustando su mochila en el brazo.

—Es un gesto de disculpa por lo de esta mañana —explica Grant.

—Sí, claro —responde ella, rodando los ojos.

—Bueno, me tengo que ir —dice Grant.

—Está bien, hasta luego —contesta Helen secamente al entrar a su casa.

Grant la observa mientras entra, como si estuviera hipnotizado.

—Deja de mirar a tu novia —se burla su hermano pequeño, Henry.

—No es mi novia, Henry —replica Grant, subiendo al auto.

—Claro —responde Henry con una sonrisa.

Una semana después...

—Helen, necesito que prepares todo el menú. El hijo del presidente ha alquilado la cafetería, así que solo él y sus amigos podrán entrar.

—De acuerdo —dice Helen, comenzando a preparar malteadas.

Mientras coloca la última, escucha que Grant ha llegado, pero no le presta atención hasta que oye un nombre familiar.

—¿Lexy? —piensa, asomándose.

Recuerda la última vez que vio a Lexy, en el funeral de su novio Junior, cuando estaba en una mala etapa.

—Helen, necesito que lleves esto —le dice su jefa.

—Está bien —responde, llevando el pedido a la mesa.

—¿Helen? —dice Lexy, sorprendida.

—¡Oh, hola, Lexy! —saluda Helen con un tono forzado.

—¿Se conocen? —pregunta Grant.

—Sí, es mi prima —responde Lexy secamente.

—Qué sorpresa, prima, me alegra que estés bien. Te ves muy feliz —comenta Helen sarcásticamente, mientras todos la miran.

—Me alegra que superaras lo de Junior —añade, mirando a Grant—. Te pareces mucho a él.

El ambiente se torna incómodo al mencionar ese nombre.

—¿Quién es Junior? —pregunta Grant.

Lexy guarda silencio, con una mezcla de tristeza y enfado.

—Cinco minutos más y nos retiramos —dice el guardaespaldas desde la barra.

—¿Qué tal una foto? —sugiere Grant, sacando su teléfono.

—Bueno, yo me retiro —dice Helen.

—No, ven, siéntate con nosotros —insiste Grant.

Helen declina educadamente.

—Estoy en hora de trabajo.

—Bueno...

Helen se retira y Grant se toma una foto con Lexy. Poco después, se van.

—Bien, Grant, es hora de irnos —dice el guardaespaldas.

—Espera un minuto —responde Grant y se acerca a Helen en la barra.

—¿Qué pasa? —pregunta Helen mientras limpia.

—Quería invitarte a la fiesta de Halloween en la Casa Blanca.

—No creo que tus padres dejen ir a una chica que trabaja en una cafetería —responde ella, sonriendo.

Grant sonríe también, encantado por verla sonreír por primera vez en la semana.

—Grant, ¿estás bien? —dice Helen, agitándole la mano en la cara.

—Sí, perdón. No te preocupes, mis padres te adorarán. Además, ya eres mi amiga, ¿no?

—Sí, claro —responde Helen con una leve sonrisa.