No soy capaz de encontrar el rumbo.
Soy capaz de tocar esos anhelos que coseché durante años,
tengo el confort de la lluvia a través de sus caricias, la compañía de leales estrellas.
¿Eso es realmente cierto?
De haber categorizado cada grano de arena que pisé...
De haber bautizado cada algodón que hay en el cielo...
De haber contado cada lágrima que cruzaban la noche...
De haber nombrado cada diamante que resplandecía en sintonía con la luna...
¿Por qué?
¿Por qué nada es suficiente?
¿Eso no era lo que quería entonces?
¿Lo que buscaba?
¿Qué necesitaba?
...
¿Qué quería?
Mis huellas comenzaron a perderse entre tantas...
No soy capaz de encontrar el rumbo...
No soy capaz de encontrar el final...
Cada caracol en mi bolsillo, cada concha marina en mis manos me cuentan una historia diferente...
No hay cansancio.
No hay dolor.
Solo el abrumamiento ante un final incierto...
Independientemente de la velocidad... de la distancia, de la manera en que lo intente... del zig, zag...
No soy capaz de encontrar el rumbo...
Vuelvo a lo mismo.
Vuelvo a repetir el círculo.
Círculo que se vuelve vicioso en cada paso.
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Piezas.
De TodoEstamos conformados por piezas, las cuales pueden ser sentimientos, emociones, recuerdos, experiencias, personas y hasta cosas. Mis piezas están conformadas de cualquier cosa que haya cruzado mi mente, perdí bastantes en el camino, otras personalmen...
