⿻ꦿꪳ։ 𝘐𝘯𝘵𝘦𝘳𝘤𝘰𝘯𝘦𝘤𝘵𝘦𝘥 ☆Jotakak☆

⿻ꦿꪳ։ Esmeraldas

- Hijo...

- Mm?

Madre e hijo se encontraban desayunando después de la noche donde estuvieron los amigos de Kakyoin hasta tarde.

- Sé que me has hablado mucho de este Jotaro, veo que después de todo se llevan muy bien.

- Oh, si.. compartimos muchos intereses.

- Sí, pero no creí que fueran tan cercanos.

Esta río un poco en tono burlesco para que este le viera algo desconcertado.

- ¿A qué quieres llegar con eso ma?

- Pues desde hace mucho no te veía tan cariñoso con alguien, ya sabes... desde Maryah.

Este se vio un poco incómodo ante aquel nombre y aquella comparativa.

- Ay no mamá, estamos comparando a mi ex con un amigo.

- No sé Kakyoin, con Polnareff no eres así de cariñoso, para mí está curioso el afecto que se muestran Jotaro y tú.

Procedió a terminar su desayuno y dar risitas burlesca.

- Hablando de Maryah... ¿Qué fue de ella querido?

- La verdad no lo sé, ya sabes, después de terminar no es como que hablemos o algo.

- Ella ya está en la universidad ¿no?

- Creo que si, recuerda que sacó cursos más cortos.

- Ay si, ella me agradaba mucho como nuerita. Pero en fin, igual te veo muy alegre con tus amigos y eso me pone super feliz.

- Si... Maryah era una chica muy agradable, pero ya sabes. No se dio.

Kakyoin igual había terminado su desayuno.

- Ya, dejo de molestarte. Sabes que cualquier decisión que tomes con tu vida siempre te apoyaré corazón, ahora ve a lavarte los dientes ¿No te molesta que te lleve al instituto tu vieja madre, o si?

- Sí, me da vergüenza.

La vida luego de devolverle la burla para que luego ambos rieran

- Bien sabes que nunca me avergüenzas ma.

Después de que Kakyoin terminara de alistarse fue junto a su madre al colegio, una vez en la puerta esta se despidió de besito con su hijito, Kakyoin adoraba mucho a su madre y nunca estos actos le agobiaban, así que no era problema demostrarle afecto frente a su colegio.

Este ya llevaba casi dos meses instalado, poco a poco era más reconocido por la cercanía que mantenía con Jotaro ya qué el mencionado era muy bien visto, así que Kakyoin debía tener algo para agradarle al gran Jotaro.

Esto incluso creó que alguna que otra chica decidiesa acercarse, siendo este día uno de estos días ya que al llegar a su pupitre encontró una nota sellada.

Jotaro estaba entrando y acomodándose cuando encontró al pelirrojo con una nota en su mano, firmada con un lapicero rosa brillante y con algunos corazoncitos.

Esto le llamó la atención.

- ¿Qué es eso Kakyoin?

- Oh, hola Jotaro, no lo sé lo acabo de encontrar en mi pupitre.

Jotaro volteó a los lados viendo a una chica de cabellos castaños viendo nerviosa a la dirección de este, sabiendo en seguida que era ella.

Kakyoin abrió la nota y comenzó a leerla, mostrándose una sonrisilla en su rostro.

- ¿Sabes quién pudo haber sido?

Pese a que Jotaro seguía viendo a la chica se limitó a decir.

- No.