Capítulo 28 El Castigo de Neil y la traición de Susana

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Una tarde, Neil pensaba y pensaba en como recuperar su dinero, cuando se le acerco un hombre y empezó a discutir con el

-¡Oye tu! quita tus manos de esa cama, es mía -el pelirrojo se asusto, quien era ese hombre, siempre había estado solo en esa celda y solo había una cama

-Pues te aguantas, esa cama es mía, yo llegue primero -dice el pelirrojo y Tom solo movía la cabeza

-¡Basta los dos! como si fuera algo bueno eso de yo llegue primero, no tienes vergüenza Neil

-Los días pasaron y Neil seguía discutiendo con su pareja de celda, hasta que un día Neil de tanto estrés le da un infarto, se lo llevan al hospital y le dicen a Tom, que si no lo sacan de esa celda, morirá, es demasiado el estrés que tiene. Tom decidió darle arraigo domiciliario , pero como no tenía a donde ir, Susana se ofreció para llevárselo a su casa, pensando en el dinero de Neil y la vida de reina que se daría

Llegaron a la casa de Susana y todo era felicidad, Niel estaba feliz de ya no estar en al cárcel, pensando que ya no tendría mas mortificaciones

Los días pasaron y Susana se empezó a fastidiar de Neil, ya no tenía dinero y no sabía como recuperar el dinero de Neil

-¡Niel, mira lo que ha salido de luz, todo el día te la pasas viendo la tele, ya no tengo dinero para pagar, ahora te toca a ti pagar todas las cuentas -el pelirrojo hizo una mueca de disgusto

-¡Ya Susana déjame en paz!ya te dije que voy a recuperar el dinero que me quito mi madre, mira te firmaré un poder, iras al banco y sacaras el dinero que tiene mi madre, soy su hijo y no sera impedimento, Eliza creo que esta muerta, y como quiera cualquiera de los dos puede sacar el dinero

Susana se dirigió al banco y en efecto saco todo el dinero, incluyendo el de Eliza, ella había desaparecido, la ultima vez que la vieron fue cuando supo que su madre le había quitado su dinero y ya no la volvieron a ver

En vez de ir a su casa Susana se dirigió a otro banco y puso una parte de ese dinero a su nombre, y el resto le daría la mitad a Neil y la otra se quedaría ella, después compro un boleto para Los Angeles solo de ida, no tenía intenciones de volver, se dirigió a su casa y Neil ya la estaba esperando

-¡Dime! te dieron el dinero

-Si, me dieron una parte, lo demás lo iré sacando poco a poco, no me lo pueden dar todo

-Con esto es suficiente por el momento -Susana se lo da y Neil lo guarda, de repente suena el celular de Susana

-¡Si Robert! ¡que pasa! claro que si me interesa, gracias por pensar en mi ¿cuando salimos? ¡como! ¡mañana! pero... si esta bien, gracias -la rubia colgó la llamada

-¡Niel! me hablo Robert y me dice que tiene un papel para mi, nos iremos de gira mañana, primero iremos a Los Angeles y de ahí a otros lugares mas, estoy feliz, volveré a trabajar, yo te llamaré por teléfono, para ver como estas -el pelirrojo la veía algo extrañado, pero confiaba en ella, le entrego el dinero, y eso era un punto a favor de ella

Al otro día muy temprano, Susana se despide de Neil, sin saber que esa sería la última vez que la vería. Ya solo Neil dice

-Hasta nunca maldita

Susana abordo el avión que la llevaría a su destino. Ya en el avión la rubia iba feliz, ya que no volvería jamás y era rica, y tenia todo el tiempo para divertirse, claro que le llamaría a Niel de vez en cuando para que no sospechara, pero después ya no le llamaría, inventaría algo para ya no llamarle jamás, sin saber que ese sería su último viaje

Minutos después, el avión comienza a agitarse, la azafata les dice que se abrochen los cinturones, hay turbulencias

El capitán le dice al piloto

-¿Que esta pasando? porque estas nervioso

-¡Capitán! me acabo de dar cuenta que no tenemos combustible -El capitán abre los ojos como platos

-Como es posible, si antes de salir siempre revisamos todo

-No lo se, alguien boicoteo el avión y no tenemos combustible

-Entonces hay que aterrizar de emergencia

-No podemos, ya estamos a miles de millas y ahorita estamos atravesando el mar, y no hay donde aterrizar

-¡Atención! ¡Atención! favor de no desabrocharse los cinturones, tenemos una emergencia y tenemos que aterrizar en el mar -Susana lanza un grito, el avión empieza a descender y de repente se escucha un estruendo, el avión cae de picada al mar, muchos logran sujetarse de las partes del avión, Susana cayo lejos de donde estaban los demás, gritaba, pidiendo ayuda, pero no la escuchaban, ya que todos gritaban también, antes de caer al mar, el capitán logra tener contacto con la base y les dice en donde aterrizaran, a las dos horas llegan los rescatistas, y logran salvarlos, de repente ven a lo lejos a una chica flotando, se aproximaron a rescatarla, pero ya era tarde, la chica ya estaba muerta, no sabía nadar, eso nadie lo sabía, entre sus pertenencias traía un teléfono apuntado y decía Neil Legan, le llamaron y los policías atendieron la llamada y le dieron la mala noticia de que Susana había muerto

-Lo siento mucho muchacho -dijo el oficial y se retiro

Ya Neil solo, empezó a reír y decía

-¡Perra! pensaste que te burlarías de mi, tengo muchos contactos y ellos me ayudaron, lo siento por la gente inocente, lo bueno es que a ellos lo salvaron y yo era el único que sabía, que nunca aprendiste a nadar. De mi nadie se burla, querías traicionarme y quitarme todo mi dinero, pero me entere a tiempo, que me habías robado

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Mientras tanto...Hacienda Villers

-¡Annie! ¡Ya basta! deja a Klin por favor -el pobre coatí estaba todo asustado Annie lo traía de un lado para otro y para colmo le había puesto un smoking, que había mandado a hacer en miniatura para el pobre de Klin, le agarraba la manita y le metía la manga del smoking y así lo traía

-¡Déjalo ya! -la pecosa tomo a klin y le quito el smoking, -Klin ira así de simple, es un animal, no lo quieras vestir como gente -el coatí parecía entender lo que Candy decía y con sus manitas le agradeció. La rubia le dio un besito

-Vamos Klin, o si no a la próxima que te vea, estarás vestido de traje de gala -la rubia sonrió al ver la cara de Annie

-¡Bueno! ni modo, de lo que se pierden los dos -la pelinegra los vio alejarse

-Ya veré a quien vestir, hay demasiados animales en la hacienda, tal vez a un gallo -sonrió y salió de la Hacienda

Créditos a la imagen de Neil y Susana a Beatriz Ramírez Itza

Chicas es todo por hoy, espero y haya sido de su agrado, nos leemos el el próximo capitulo si dios quiere, cuídense mucho

LA VENGANZA DE LOS GRANDCHESTERDonde viven las historias. Descúbrelo ahora