Humanos

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Inferiores, débiles, vanales.

Uraume tenía muchas formas de describir a los humanos, no importaba fueran chamanes o no.

Cuando sellaron a Sukuna Sama hace tantos años fue eso lo que hicieron, sellarlo. Era tan fuerte que no habían podido con él. Y hoy era igual.

Como hormigas corriendo de un lado a otro , en este mundo moderno los chamanes regian cada zona de la ciudad celosos de su territorio.

Pero Sukuna Sama era inteligente. Era muy inteligente y ahora que tenía su propio cuerpo se había hecho de una técnica antigua que le permitía ser visible a los humanos.

Y ellos mundanos como siempre sé sintieron atraídos por el poder que el rey de las maldiciones exhalaba.

A Uraume no le gustó la idea en un inicio. Que Sukuna se relacionara con esos seres inferiores y asquerosos , su rey estaba muy por encima de ellos. Pero también entendía que era viable.

A Sukuna en realidad no le importaba usar a los humanos como escudo, sospechaba que una parte de Satoru Gojo estaría dispuesto a sacrificarlos por un bien mayor. Le interesaba disfrutar de los placeres.

Mujeres, alcohol , todo de lo que se vio privado en su sello. Les facilito a los humanos armas y a cambio ellos le daban el dinero que le funcionaba para su vida de placer. Lo idolatraban por la fuerza y poder que expedía sin saber que ni siquiera era humano, y al llegar a uno de esos lugares nocturnos pronto su regazo estaba ocupado por mujeres.

———

La residencia de Sukuna estaba oculta con velos y velos que ni siquiera los seis ojos habían podido ubicar.

Hm. Pensó con ironía Uraume, los chamanes confiaban de más en Satoru Gojo.

Pero tenía que aceptar que aunque lo encontraba inferior a Sukuna, el albino era un obstáculo para que Sukuna pudiera hacer todo a sus anchas.

Pero hasta el usuario de los seis ojos tenía debilidades y lo habían comprobado cuando no logró detener a Sukuna en aquella ocasión.

Satoru se distrajo con su amante herido y así Sukuna pudo ser libre.

Y ahora tenían a su hermana.

La maldición que lo acompañaba arrastraba sin esfuerzo a la chica por el cuello de su ropa. Su cuerpo inconsciente era jalado por el piso lustroso del lugar.

- Sukuna- sama - le saludó Uraume poniendo una rodilla en el suelo-

A unos metros Sukuna está sentado tras un escritorio de caoba. Sentado de forma despreocupada con un puño de su mano sobre su mejilla.

Están en su oficina , en un espacio elegante.

- ¿A que se debe que manches mis pisos con eso , Uraume? - le pregunta señalando el cuerpo de Kazuha que está en el suelo.-

- La encontremos en el patrullaje . Venía de una pelea al parecer - le explica- es la hermana menor de Gojo Satoru.

Ante eso Sukuna ladea la cabeza . Sus ojos van a la chica, tiene heridas en su costado y su cuerpo inconsciente tiene los claros vestigios de una dura pelea.

- ¿Es así?

- Lo es . - responde el peliblanco- Portaba la Katana con el sello del Clan Gojo. - dice y desde cuclillas le extiende entre sus manos el arma a Sukuna.

La maldición se pone de pie  y toma el arma. La elegante funda negra brilla bajo la luz, y puede ver grabado el sello del clan Gojo. Sukuna mira a la chica, aunque inconsciente encuentra similitudes entre la energía con el seis ojos , confirmándole que existe un parentesco.

- Bien , déjanos -

Uraume hace un movimiento con su cabeza y se pone de pie saliendo del lugar.

Sukuna camina en un círculo alrededor de la joven. Luego se pone frente a ella y con su dedo anular he índice en su frente le hace despertar.

La ve jalar , aire y toser. Apretar los dedos contra el suelo y apretar los dientes ante el visible dolor de sus heridas que no han sido curadas.

- Levanta la cabeza - le dice Sukuna y pone la katana enfundada de la chica bajo su barbilla-

Ojos azules lo ven con sorpresa y luego su ceño se frunce.

- Hm. Sí, eres su hermana- contesta con desdén-

- S-Sukuna...- musita ella -

Jamás a estado frente a él, fueron otros quienes habían estado presentes en su surgimiento y luego la maldición se esfumó como humo.

Pero es él, puede sentir la presión de su energía maldita. Para su sorpresa no lleva ropa tradicional, es un pantalón negro y una camisa blanca arremangada en los antebrazos lo que usa.

La calidad de la tela y el estilo de vestir le hace saber que los rumores son verdad, debe de estar metido en otros asuntos con humanos.

- ¿Cuál es tu nombre ? - le pregunta con su voz profunda, ojos rojos que parecen clavarse en su alma-

Pero ella sigue en silencio, mirándolo con sus ojos azules que relucen por el dolor. La ve llevarse una mano a su costado en donde aún sale un poco de sangre.

- Sé que eres una Gojo- dice con asco en su voz- Está de más que trates de ocultar tu identidad.

- Kazuha. - dice casi entre dientes-

Sukuna sonríe de lado.

- No voy a hacerte daño - le dice y la ve fruncir el ceño mientras se pone de cuclillas frente a ella- Tómalo como un indulto por que eres familiar de un rival respetable.

Sukuna pone una mano en su costado y pronto la herida comienza a cerrarse. Igual ella siente algo de molestia y ante lo agotado de su cuerpo , el cansancio vuelve a ganarle y cae inconsciente.

Sukuna se pone de pie mientras la ve y limpia su mano con un pañuelo.

Muchos pensarían que lo usual sería usarla como un chantaje hacia Satoru. Cambiarla por él o algo así.

Pero si tiene paciencia , y usa sus cartas de otra forma el daño que puede hacer será mayor.

- Voy a usarte para destruirle la vida- le dice mientras sonríe ante su cuerpo inconsciente-

Tiempo después en efecto no sólo el daño sería hacia Satoru. Sukuna pensó usar a la joven, pero involucrarse con ella haría que el destino se riera en su cara.

Continuará....

———

Vivo por los enemies to lovers 😩🤍

Paréntesis para decirle a Suguru bebé que nadie lo culpa por ser un precioso y que Satoru se distrajera con él 😌 *besito en su frente*

Quédense aquí que esto se va a poner buen

SEDA  | Sukuna x Oc | +18Donde viven las historias. Descúbrelo ahora