𝙀𝙣𝙩𝙧𝙚 𝙩𝙪𝙨 𝙢𝙖𝙣𝙤𝙨..

8: eres pequeña

Narra Victoria

Ahí estaba yo, acariciando su linda cintura mientras nos mirábamos a los ojos como si se tratase de una pareja de adolescentes totalmente enamorados. Luego de ese beso tan exótico, fantástico, lujurioso entre otras cosas no podía parar de pensar en sus labios, en como estos se movían sobre los míos, en como ella quería más y más contacto y como mis manos recorrían todo su cuerpo con leves toques y caricias. Estábamos las dos viendonos a los ojos, pérdidas en la otra mutuamente mientras que ella acariciaba mi cabello, sentía una conexión rara con ella, la sentía desde que nos conocíamos pero después del beso se hizo más potente y fuerte... Sentía que ella era la indicada, la chica de mis sueños o no sé, pero algo era y lo sabía. Pero tampoco quería que ella se sienta como un objeto que solo usaba para besar y ya, así que había que hablar las cosas.

— Quiero que sepas que no me arrepiento del beso -le di un beso en el cuello- y tú? -la observe mientras la menor estaba jugando con sus dedos-

Lucía: P-para nada -dijo nerviosa y levanto la mirada para dedicarme una linda sonrisa- fue... Mi primer beso, bueno por lo menos con una chica.

— Qué?! -dije exaltada- tu... Primer beso con una chica? Te gustan las chicas o no? No entiendo... Es bueno o malo? -se notaba un poco mi desesperación-

Lucía: Y-yo.... No lo sé -agachó su mirada con cierta tristeza y un poco de incomodidad- solo... Se que me eh sentido atraída con algunas chicas pero es que... Nunca estuve con una, ni me eh besado por una hasta hoy.

— Ah, ya te entiendo -suspire de alivio y la mire- linda, no te sientas presionada a averiguar a tu corta edad tu sexualidad, es un proceso difícil y eso es entendible okey?

Lucía: lo sé -apoyo su cabeza contra mi cuello y se acurruco en el- solo... Ahora que lo pienso me eh sentido atraída más veces con chicas que por chicos... Pero para saber nos nesecito experiencia, en eso tienes razón -dijo en un tono bajo, casi susurro-

— Exacto, eso es. Nesecitas experiencia para averiguar eso y todo va a venir a su tiempo okey? No te apresures con eso -la mire y se me hizo muy tierna, no podía negarlo me habían dado ganas de besaría de vuelta- te puedo preguntar algo?

Lucía: Claro, dime Vicky -levanto su mirada solo para mirarme y sonreirme-

— Puedo besarte de vuelta? -pregunte con un poco de timidez y desvíe mi mirada sonrojada- es que... Tus labios son tan lindos y suaves, y aparte sentí una conexión única -rei levemente-

Lucía: Claro que puedes tonta, solo ten cuidado -de acercó a mi y se acomodo sobre mi regazo-

Es cuestión de segundos nos encontrábamos en la misma situación que antes, nuestros labios juntos saboreandonos una a la otra, ya no era un beso tierno si no que ya era un beso subido de tono, un beso que no era Santo ni nada, este venía con otras intenciones creería yo. Mis manos en la cintura de Lucía y las de ella en mi cuello. Al poco tiempo tenía a Lucía besando y marcando mi cuello, definitivamente no la conocía así pero tampoco me disgustaba ese lado de ella, a su edad las hormonas eran unas cosas de locos y lo entendia perfectamente pero sabía que no podíamos pasar la raya por su edad, mínimo tenía que esperar a que cumpla 17. Sus besos húmedos y marcas en mi cuello seguían hasta que paramos porque el mismísimo calor se había hecho presente y también la falta de aire y agitación.

Narra Lucía

Al separarnos fue instantáneo que mis manos se metieron debajo de la camiseta de Victoria para acariciar y tocar su abdomen mientras nos seguíamos dando pequeños besos franceses.

— Dios... No sé que me pasa y tampoco sé porque estoy con un calor tan intenso, joder -dije agitada y me saque la camiseta quedando solo en sosten deportivo-

Victoria: -me miro fijamente de arriba a abajo y me dio otro beso más- eres muy linda... Pero lu, eres menor de edad y todavía eres muy pequeña para tener tu primera vez con una chica de 18 -río levemente y me acarició el cabello-

— Primera vez? No no, ya lo se. No iba a pasar a ese punto tranquila, se que todavía estoy pequeña para esas cosas -le di un beso tierno- podemos dormir?

Victoria: Claro linda, quieres que me vaya a dormir al sofá?? -sonrio-

— Noo, quédate aquí anda que no quiero dormir sola, si? -hice carita de perro mojado-

Y bueno, Vicky se quedó a dormir conmigo y fue la mejor noche de mi vida, la mejor de las mejores. Hubo besos, abrazos, caricias, hubo de todo y eso me encantaba y lo quería repetir una y otra vez si hacia falta, pero quería que Vicky nunca se vaya de mi lado... Ya era muy especial para mi y en poco tiempo le agarre un cariño inmenso. Nos quedamos las dos profundamente dormidas abrazadas en cucharita cosa que ninguna de las dos se dio cuenta pero me sentía tan segura con ella que no le prestaba atención a nada, solo a sus lindos ojos y su linda forma de ser y de tratarme.