Capítulo 11: Suiza, Aquí Venimos

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El héroe de Nadie

Capítulo 11: Suiza, Aquí Venimos

Los cuatro buscadores regresaron a su hotel y se establecieron en el área principal de la suite. Remus había sido muy tranquilo y contemplativo durante la caminata de regreso a la estación de tren desde donde se habían Aparecido.

Aunque morían de curiosidad, los otros habían permanecido en silencio, esperando hasta que fueran un lugar privado para escuchar lo que tenía que decir.

Una vez resuelto, Bill había vertido a todos un Firewhisky, aunque era temprano, pensó que se requería después de los eventos de la mañana.

"Así que", comenzó Tonks, "¿vas a decirnos lo que descubriste que el resto de nosotros no sabemos?" ella preguntó, tomando un sorbo de su bebida.

Una pequeña sonrisa cruzó la cara de Remus mientras miraba a sus compañeros. "Él sabe," fue todo lo que dijo.

¿Fleur lo miró cuestionablemente, "Knows? Qué sabe él?"

"Que Harry y Ginny son mágicos", respondió Remus, su sonrisa se extendió un poco.

Fleur lo miró escépticamente, pero Tonks y Bill asintieron cada uno. ""Puedes estar seguro de zo?" ella preguntó, frunciendo el ceño ligeramente.

Remus volvió a sonreír, "Por la mirada en sus ojos mientras hablaba de que eran mágicos y el sutil apretón de mi mano cuando dijo lo "Especiales" que eran", respondió, también tomando un sorbo de su Old Ogden.

Bill asintió lentamente, "Puedo ver eso", dijo humildemente. "Había algo en la forma en que lo dijo que llevaba más que simples palabras que hablaba."

Tonks asintió con la cabeza de acuerdo, "Sí, su tono hablaba mucho."

Bill parecía un poco triste, "Supongo que todo lo que podemos hacer es volver y hacer que todos sepan lo que descubrimos."

"No estés triste, mon cherie", dijo Fleur con simpatía.

"Sé que no debería, pero siento que de alguna manera he fallado", respondió Bill, su melancolía coloreando su voz.

"No hemos fallado, Bill", dijo Remus. "Es cierto, no los estamos trayendo de vuelta con nosotros, pero sí encontramos dónde estaban, que están a salvo por el momento y que han hecho algunos verdaderos amigos. Creo que lo hemos hecho bastante bien considerando las circunstancias."

Bill miró a Tonks, "Te debo muchas gracias, sin ti estoy bastante seguro de que no habríamos descubierto nada más que que habían estado en Niza."

"Gracias, Bill, pero no estoy seguro de merecer todo el crédito", dijo Tonks un tanto tímidamente.

"No te vendas corto", dijo Remus con una sonrisa. "Has sido invaluable."

Tonks le sonrió, con los ojos brillantes. "Así que soy útil tener alrededor?" ella preguntó, su tono juguetón.

Remus rodó los ojos, sacudiendo ligeramente la cabeza. "Sí, tengo que admitir que eres útil para tener cerca."

Fleur sonrió a Bill, con los ojos bien abiertos. "Supongo que pasamos una última noche en París divirtiéndonos, ¿eh?"

Bill leyó su mirada y sabía lo que tenía en mente. "Me suena bien. ¿Qué hay de ustedes dos?" preguntó, mirando a Tonks y Remus.

Para sorpresa suya y de Fleur, Remus asintió: "Suena como una buena idea", dijo, sonriendo a Tonks.

Fleur se iluminó de inmediato: "Si vamos a pasar la noche en la ciudad de ze, tenemos que ir de compras", dijo con entusiasmo, levantándose y agarrando a Tonks de la mano, ella puso a Tonks sorprendidos y se dirigió a la puerta.

El héroe de nadie -HIATUS-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora