El corazón de Eros

01

Sergio

Tener caminatas por el bosque era una de mis actividades favoritas, ya que puedo ver a animales e interactuar con ellos, a veces es difícil creer como existen unas criaturas tan hermosas en este mundo. Ese lugar es hermoso.

Un pequeño ciervo se había cruzado en mi camino aquel día, noté algo en su mirada ¿miedo?, cuando intente acercarme a este, aquel animal cayó ante mis ojos, me acerque rápidamente a él y me agache para ver qué le sucedía, pero este yacía muerto en el suelo, una flecha de plata que se encontraba incrustada en su lomo había causado su muerte.

Cuando alce la mirada me encontré con Charles y Max, más conocidos como Artemis y Apolo, dos hermanos inseparables que son muy famosos entre todos los dioses. Sabía que ellos son superiores a mí, pero ese cosquilleo extraño que sentí en mi pecho no era debido al miedo.

Max es un dios hermoso y perfecto, alguien inalcanzable para mí, su mirada de superioridad lo demostraba. Por otro lado Charles es un dios igual de perfecto que su hermano, pero a diferencia de él, este suele ser más amable.

Pude entender qué significa aquel cosquilleo extraño en mi pecho, lo sabía, había visto estos síntomas antes.

Había encontrado a mi otra mitad, a mi pareja destinada. Tal vez nunca debí decirle lo que éramos, si tan solo lo hubiera hecho todo estaría bien.

Humillaciones vestidas de palabras dulces...

Cuando le conté a Max sobre nuestro futuro juntos él solo se burló de mí, tiró las rosas que preparé para él, intenté llamar su atención por todos los medios posibles, yo quería que él me amara también.

Tonto Sergio, ¿no pensaste que esto traería consecuencias? ¿ no pensaste que no eras tan atractivo? como para que él volteara a mirarte con amor. Cada vez que él me veía, en sus ojos había asco.

—Sabes que yo te amo —dije tomándolo del brazo, evitando que se vaya. El solo me miró con odio y respondió .

—Pero yo te detesto. —sujeto mi mano con brusquedad y procedió a empujarme.

Debí darme cuenta en ese momento, pero no lo hice. Cuando note que él me prestaba atención y me sonreía, creí que lo había logrado, había logrado que me amara

Salidas nocturnas y a escondidas de los demás, era tan claro darse cuenta que él detestaba que lo vieran conmigo.

Con el tonto de Eros y si soy un maldito tonto.

Todas las veces que te vi pasear de la mano con ese chico, es cierto, es muy lindo, pero ¿Por qué me besas después de besarlo? Siempre me preguntaba eso, ahora se porque.

Víctima de burlas, estaba acostumbrado a éso, pero yo te conté mi secreto porque confiaba en tí, ese era el maldito problema.

Yo confiaba en tí.

Poco a poco mi luz se fue apagando, ¿qué hago para poder salir de está oscuridad?

Mi corazón está roto, Eros tiene el corazón roto que irónico, cuando descubrí la razón por la cual me habías prestado atención, me destrozó por completo, si querías matarme ¿Por qué no me disparaste una de tus flechas?

Creo que eso hubiera dolido menos.

Mi decisión fue alejarme de ese lugar, igual a nadie le importaba si desaparecía. Así que decidí recorrer el bosque para encontrar un lugar donde ser feliz, deje todo, ya no quería ser un Dios, solo quería ser Checo, que volver a ser yo.

Y cuando pensé que había encontrado mi felicidad, apareciste para terminar lo que dejaste inconcluso.

¿Por qué me culpas de su muerte? ¿Acaso es una excusa para matarme?, se que quieres hacerlo, lo sé, lo sé desde ese día, porque sé que de esa forma tendrás todo el poder que deseás.

"Mata a tu pareja destinada y serás el ser más poderoso de todos, así podrás ser feliz con él".

Eso fue lo que te dijo tú mejor amigó ¿cierto?.

Si tu amado murió no fue por mi culpa, yo nunca le dije nada a mi madre, nunca lo hice, porque aunque tú tuvieras la culpa, jamás te acuse.

Los golpes y los insultos que me das, no me duelen, dejaron de afectarme hace mucho tiempo, si sonrió no es porque me quiero burlar de tí, lo hago porque sé que podrás ser feliz después de mí muerte.

Uno de los dos debe ser feliz, yo intenté qué los dos lo fuéramos, pero no fui perfecto, no era la persona que tú esperabas, lo siento por no cumplir tus expectativas, lo siento por pensar que me amarías.

Solo tenía 21 años, pensaba que conocía lo que era el amor, que era algo perfecto, pero no lo es, el amor te destruye y lo que yo antes creía que era lo mejor del mundo, ahora se que es lo peor que pueda existir.

Cuando deje de ver tu rostro y todo se torno negro, cuando sentí paz y tranquilidad supe que por fin sería feliz, espero que ahora él lo sea.