"𝑇𝒉𝑒 𝑅𝑎𝑖𝑛 𝑆𝑡𝑜𝑝𝑠" //𝐾𝑜𝑜𝑘𝑚𝑖𝑚//𝑀𝑖𝑛𝑖 𝐹𝑖𝑐

No te odio

Jimin había llorado, había llorado como hace tiempo no lo hacía, ¿Jungkook estaba bien? ¿Por qué su corazón se sintió tan bien al verlo? ¿Por qué no lo había reconocido? ¿O por qué fingió no hacerlo?

En su discusión con Taehyung, se había quedado en blanco, por un momento creyó estar confundiendo al chico, pero cuando su amigo apareció y menciono su nombre, supo que no se estaba equivocando.

Durante los primeros años que no lo había vuelto a ver, deseo tanto volver a hacerlo, siempre creía que aparecería en la puerta de su casa, que lo llamaría, no perdía la esperanza de verlo de nuevo, pero eventualmente lo hizo, ya no esperaba por su regreso, pero siempre lo recordaba, jamás pudo odiarlo por dejarlo, el rencor extrañamente no albergaba su corazón, podría haberse enojado con él los primeros meses, pero al final su corazón lo quería tanto que solo podía hacer eso, estaba triste, pero siempre recordaba lo feliz que fue con él.

Y talvez si, muy en el fondo deseaba verlo de nuevo, porque su corazón jamás pudo soltarlo, no importaba lo lejos que se fuera y a las personas que conociera, su corazón siempre pensaba en aquel niño que fue su mejor amigo.

Cuando Jimin tenia 15 años tuvo que mudarse con sus madres a Londres, una de ellas tenia un nuevo trabajo y gran proyecto como arquitecta en el País, por lo que la vida de Jimin dio un cambio muy grande, pero nunca le molesto, no hasta que paso 8 años lejos de casa y no podía ver a su mejor amigo tanto como quisiera, al menos una vez al año visitaba Seúl y podía ver Taehyung a quien conoció al comienzo de la escuela secundaria, deseaba ver a su abuelos y otros amigos, al principio lo había visto como un oportunidad de sanar, quizá irse lejos le haría sacar sentimientos que aun guardaba en su hogar con aquel pelinegro, le haría dejar de pensar en él y así superarlo, pero con el tiempo que se dio cuenta que no importaba que tan lejos fuera siempre terminaba recordándolo.

Un día caminando por las calles Lluviosas de Londres, se encontró con unos niños que jugaban en la lluvia.

Los niños saltaban entre charcos o tratando de no pisar las grietas de la acera, no pudo evitar soltar unas lagrimas y proyectarse junto a Jungkook, solían hacer lo mismo cuando llovía, incluso si el pelinegro se enfermaba porque sufría de rinitis, le hacía feliz ver a Jimin disfrutar de la lluvia.

Jungkook hacia lo que fuera por él, ese día Jimin hablo con sus madres sobre volver y continuar estudiando su universidad en Seúl, su madres tenían el mismo plan que él de volver a casa pero hasta terminar el año escolar de su hijo, por lo que llegaron al acuerdo de que Jimin terminaría su segundo año en Actuación en Londres y volverían a Seúl.

Nunca espero que durante su primer semestre en Seúl se volvería encontrar con el pelinegro que parecía ni siquiera conocerlo.

El Jueves por la tarde al salir de la universidad el Rubio noto que estaba bastante nublado y supuso que pronto llovería, maldijo por aun no tener licencia para conducir, a Jimin ya no le gustaba tanto la lluvia, no desde que vivió en Londres y llovía casi siempre.

Se había enfermado incontables veces por mojarse en la lluvia y no haber tenido un paraguas, había dañado celulares a causa de sus mochilas y suéteres mojados, porque no importaba donde lo guardara siempre resultaba mojado, inclusive cuando parecía un lindo día y hacia planes con sus amigos terminaban siendo arruinados por la lluvia. Así que no, ya no era una opción aquel día nublado en Seúl mojarse de nuevo, así que acelero su paso para llegar lo más pronto a su hogar.

Un poco mas tarde Jungkook apenas salía de la Universidad rendido, subió a su motocicleta y se dirigió a su departamento, a unas pocas calles de este observo frente a él, en una de las aceras, al rubio que era amigo del chico con ojos de tigre al que le había tirado la bebida, sin siquiera conocerlo, pero con un extraño sentimiento en su mente y corazón, se acercó a él.