Kinktober (DanSeok)

El dolor también genera placer

Pareja: Crazy Dan x Little Hyung Suk

Resumen:
— Esto es un castigo, cariño, así que portate bien para que acabe rápido y te dé tu recompensa.

Advertencia: Dirty talk y un poco de Jay x Hyung Suk, a webo que si
NA: Pamba al que no comenté , ah, no, eso es para el flufftober 🐾

****

Caminó hacia el pasillo que daba con el gimnasio, en dirección contraria que el resto de alumnos que querían salir luego de una larga semana de clases; vio nuevamente la nota que fue dejada en su casillero y sonrió, pensando en lo que le diría Jay y que era tan importante.

¿Será que acaso ya pensó la manera en qué podían celebrar su cumpleaños?, esperaba que si, su cumpleaños estaba a menos de dos semanas y quería que fuera lo más agradable posible.

Salió de sus pensamientos cuándo notó la cabellera rubia de su amigo y apresuró el paso, moviendo su mano para que lo notará, aunque sus piernas fueran demasiado cortas para ayudarle a llegar más pronto a su encuentro.

— Hola, Jay — Saludó, ladeando su cabeza al verlo tan serio — Y dime, ¿qué era lo importante que debías decirme después de clases?

Su rubio amigo se veía tenso, a menudo Jay era así cuando era sobre cosas personales, no le gustaba molestar (como si hablar sobre ello fuera una molestia); lo tomó de la mano y le sonrió, tratando de calmar lo que sea que estuviera pasando por la cabeza de su amigo.

— Puedes contarme, Jay — Su mano apretó la de Jay queriendo ayudarlo a decir lo que lo preocupaba — Nosotros somos amigos desde el primer año, puedes decirme lo que quieras.

Entonces Jay tomó aire varias veces, sus dedos rozaban su palma en un gesto demasiado suave que comenzó a preocuparse por lo que sucedía con su amigo hasta que lo vio fijamente a los ojos y entendió aún cuando las palabras no fueran dichas todavía.

Oh no.

— ...

— Jay yo... — Las palabras que quería decirle no salían de su boca, ¿cómo podía rechazarlo sin que se sintiera culpable?, lo que menos deseaba era lastimarlo.

— ¿...?

— No, Jay, eres una persona increíble, cualquier persona seria muy afortunada de que te fijes en ella pero yo... — Tragó saliva, no sabiendo de qué manera expresar lo que se había guardado desde que había sucedido el viaje escolar al parque de diversiones el año pasado — Todos serían afortunados de recibir una mirada tuya, Jay, pero no puedo corresponder tus sentimientos, no es por ti, es por algo sobre mí...

Las palabras que se hallaban impresas en el rostro de Jay le hicieron sentir tristeza; Jay era una persona increíble, lo había cuidado en su primer día de clases y más de una vez había pasado sus fines de semana en compañía de su rubio amigo; era su mejor amigo, así luego sintiera que estaba intentando comprar su amistad con regalos, la verdad era que era feliz con su compañía y hablando en los recesos sobre todo lo que les sucedía.

Jay era perfecto y cualquiera gustaría de él, pero no era lo que a él le gustaba.

— La verdad es que yo estoy saliendo desde el año pasado con...

Siquiera terminó sus palabras cuando alguien lo tomó del brazo y lo apartó de Jay con brusquedad; el olor tan penetrante a la colonia que usaba Dan inundó sus fosas nasales y sintió escalofríos, sabiendo de antemano que esto no terminaría bien.

Dan no era una persona amable cuando se trataba de esta clase de situaciones.

— Oye, Jay — La diferencia de alturas entre Jay y Dan era palpable; Dan siempre había usado su gran altura para mostrarse más intimidante con los demás.