Reinterpretation of Evangelion

Capítulo 9

Amanecía un nuevo día en Tokio-3. En el interior de cierto apartamento situado en el este de la ciudad, una chica de cabello azul dormía apaciblemente. Eventualmente, la chica se despertó por su cuenta, sin necesidad de despertador, y se percató de que algo no estaba como siempre. En lugar de estar tumbada en el colchón, la chica se encontraba recostada sobre un cálido cuerpo humano. Rei Ayanami abrió sus ojos sorprendida, y se topó con el rostro de Shinji Ikari, durmiendo plácidamente bajo ella. Entonces las eventos del día anterior acudieron a su mente. La chica sonrió y volvió a acomodar su cabeza sobre el pecho del chico.

Rei estaba feliz como nunca antes en su vida. Desde que Shinji y ella habían iniciado su relación sentimental la vida de la chica estaba llena de alegría, pero el día anterior, en el que habían hecho el amor por primera vez, había sido el clímax de dicha felicidad, nunca mejor dicho. La peliazul sentía que después de compartir el íntimo acto, su confianza y conexión con el otro era plena. El lazo que los unía era inquebrantable. Además, el acto en sí... había sido muy placentero, pensó la chica mientras sus mejillas se sonrojaban. Shinji y Rei eran completos novatos, desde luego, pero la pasión juvenil había sido más que suficiente para compensar ese problema. La primera vez había sido torpe, el ritmo dispar, la postura improvisada, los nervios a flor de piel. La segunda, después de cenar y antes de dormirse juntos en la cama, exhaustos, había sido más precisa, más eficiente, más plena. La primera elegida aún estaba sorprendida de lo bien que se había sentido. Si bien intuía que el acto en sí debía ser agradable por lo que había aprendido en clase de salud y lo que había leído en algunos libros, la realidad superaba por mucho sus expectativas.

Eventualmente, la chica notó que su compañero de cama se movía ligeramente. Al dirigir su mirada a su rostro, vio cómo Shinji abría los ojos, finalmente despertándose también "Buenos días, Shinji" saludó ella.

El tercer elegido abrió los ojos por completo, percatándose de la situación en la que se encontraba "No fue un sueño..." pensó mientras una gran sonrisa se abría paso en su rostro "Buenos días, Rei" devolvió el saludo el chico, rodeando con un brazo a la chica y estrechándola contra él para después acercar sus labios a los de ella y besarla "¿Dormiste bien?"

"Sí" asintió la chica "¿Tú?"

"De maravilla" respondió el chico irradiando alegría por cada poro de su cuerpo "Cómo para no dormir bien después de lo de anoche" pensó el tercer elegido para sus adentros. Aún le parecía estar viviendo una fantasía, pero el tacto de la suave piel de Rei contra la suya le confirmaron que en efecto, lo que estaba viendo era real. Shinji no cabía en sí de gozo. Rei y él habían hecho el amor y había sido maravilloso. El acto en sí lo había deleitado sin igual, era infinitamente mejor que cualquier experiencia que hubiese experimentado en el pasado. Pero, además, ahora se sentía más unido a la chica que nunca. La vergüenza que hasta hacía tan sólo un día sentía por desear a su novia se había esfumado. Sentía que ahora podía ser completamente sincero con ella, sin tapujos ni miedo a ser juzgado.

Ambos pilotos se mantuvieron en la cama durante unos momentos más, sencillamente disfrutando de la calidez y cercanía del otro. Shinji dirigió su atención a su reloj de pulsera, comprobando la hora. Las ocho menos cuarto. Si hubiese amanecido en casa de Misato, el chico probablemente estaría a punto de levantarse para ir a la ducha, y así tener tiempo de hacer los almuerzos. No iba a ser necesario esa mañana, sin embargo. El tercer elegido agradeció mentalmente que la noche anterior Misato no hubiese hecho muchas preguntas cuando le dijo que pasaría la noche fuera. Probablemente había sido en parte porque la mujer estaba frustrada por tener que quedarse hasta tarde trabajando, de lo contrario quizás tuviese que inventarse alguna excusa. Si Misato averiguaba que había pasado la noche con Rei las bromas no acabarían nunca.