♡̶ . ꒰🕊️ 𝗥𝗲𝗲𝘀𝗰𝗿𝗶𝗯𝗶𝗲𝗻𝗱𝗼 𝗲𝗹 𝗮𝗺𝗼𝗿 ១★💗ꜝꜞ ࣪

𝗖𝗮𝗽𝗶𝘁𝘂𝗹𝗼 𝟲: ¿𝗦𝗶𝗴𝗺𝗮 𝘆 𝗔𝘁𝘀𝘂𝘀𝗵𝗶 𝘀𝗼𝗻 𝗽𝗮𝗿𝗲𝗷𝗮?

Días pasando en línea recta, si recuerdan ese día en que un puño impactó contra el rostro de Dazai que lo envío al país de los sueños, Atsushi le hacía pedir disculpas esos días en que su superior permanecía en sueñolandia.

Durmiendo en sepulcral calma, aunque el primero en obtener el despertar visualizo al chico que tenía al lado, dormían juntos por ende compartir la cama problema nunca lo fue.

— Ay que lindo, Atsushi-kun~ que linda pancita quiero— -Si aquella pancita que mostraba indefenso de la pijama levantada, escaso centímetros de otorgar un par de suaves besos.

— ¡Dazai-san está bien! A Sigma, eres tú, lo siento creí que eras Dazai-san —Ese par de palabras suficiente fueron funcionando como un despertador, pero cometió un error en pensar que se trataba del mayor castaño.

El contrario se volteó un poco, ¿Qué tenía ese idiota qué roba la atención de Atsushi? Si bueno compartieron antes que llegara a la agencia, siendo esto así los celos que hervían en el corazón hacía doler el pecho.

— Lo siento Atsushi, estoy celoso de Dazai, pero en el fondo entiendo que estés preocupado por él. —El abrazar la almohada tal vez alivianaria la carga que conllevan los celos, ¿O no?

— Sigma, los dos son igual de importantes para mí, anda vamos a desayunar.-Dijo en la búsqueda de animar con el chico que compartía la cama, las manos que rodearon su cintura negaron el pasó —¿Sigma? —¿Qué pasaba con el oji-violeta? Abrazó tiernamente la cintura del hombre tigre, negandole el paso.

— Quiero estar así contigo, tenerme entre mis brazos hace que sea feliz en este estúpido mundo —Atsushi le concedió está petición, si ese mundo una porquería era con todas las letras, pero también halló algo aliviando las penas del dolor agonizante, un lindo motivo para continuar la vida despedaza que conservaba antes.

Luego de ese abrazo que más bien parecía durar una eternidad, fueron junto tomados de la mano yendo a su lugar de trabajo. Cinco días desde el desmayado del ex integrante de la port mafia, su subordinado se daba a la tarea de disculparse aunque perdió la cuenta de las veces que repitió la acción.

Este hecho un extraño sentimiento que desató la amistad entre Sigma y Atsushi, en muchas ocasiones estos celos del primero salieron a relucir exponiendo el cariño que día con día iba cultivando a su lado.

— Atsushi, tienes algo en tu cara, eso se me hace imposible dejar de verte —El halagar un método en reforzar la amistad se trataba, esa mirada violeta en la bicolor se fundían en un color bello.

— ¿Tengo comida? Porque si es así, yo- —Palabras fueron cortadas, una mano ajena a Atsushi descendió por la mejilla que impidió que hablará más.

— Belleza es lo que tienes Atsushi, mi bebé que tanto quiero, jamás me separare de ti —Vaya par de amigos, que en vista de los integrantes de la agencia los veían como una pareja, ¿Sigma y Atsushi saliendo?

Cuidando los pasos de la amistad es primordial, ¿Por qué? La razón es sencilla, porque se cruza las barreras de la amistad llegando un punto en cual sentimientos románticos nacen metiendo un conflicto si es amor o amistad, o si noviazgo era por lo general se construía empezando por la amistad.

Aunque algo más surgió a raíz de esa muestras de cariño inconmensurables, después de la hora de trabajo ambos muchachos se iban tomándose las manos yendo a casa, ¿Qué hacían esos días ahí?

Es simple de obtener una explicación, una película de adolecentes con muchos problemas psicológicos en algunas partes Atsushi sentía esa conexión entre él y un personaje con problemas de autoestima.

Su nuevo amigo también desarollo ese sentimiento viendo la película, al final acabó todo bien dejando un bonito mensaje de la adolescencia que es una etapa compleja en si.

— Eso fue hermoso, pásame los pañuelos —Las lágrimas resbalaron por mejillas del peli-blanco, los labios hicieron que hizo un pequeño puchero dejando que saliera una voz quebrada pero llorar delante de Sigma no sería lindo.

— Bebé ¿Te encuentras bien? ¿Por qué lloras? —El chico que lo acompañó en ver esa película habló lento, había dulzura en su voz juvenil, demasiado miel en el ambiente.

— Y-yo estoy bien, no te preocupes por mi Sigma —Aunque la debilidad lo evadió, tomándolo por sorpresa al encontrarse con el rostro del contrario y limpiando unas lágrimas bajando por su mejilla.

— Atsushi odio verte llorar, porque esos ojitos lindos si hablarán dirían adoro el chazuke, hazme un plato de rico chazuke que tanto amas, así como yo te quiero y cuidaré de ti fue una promesa de corazón. Ve a darte un baño, te tendré una sorpresa ¿Si bebé? —Una ferviente amistad se formó ahí, surgiendo sentimientos de proteger al chico que luchaban contra la tristeza, otorgó un beso en la frente y Atsushi obedeció a darse un baño.

El agua correr en su cuerpo lo calmó, como si las gotas de agua le ofrecieran un hermoso abrazo que confortaba, mientras el ex dueño del casino ya tenía una idea de esa hermosa sorpresa que planeaba.

— Atsushi ya puedes venir, ojalá te guste la sorpresa —Sorpresa lista a la reacción de tristeza enorme del peli-blanco, se sentaron en la mesa a comer, un plato de rico y humeante chazuke. En el tiempo que formaron su amistad Sigma buscó la receta de la comida favorita del albino huerfano.

— Está delicioso Sigma, siempre cocinas demasiado bien, buen provecho —Los halagos no se hacían esperar, un hermoso hogar formaron ambos en el nido de cariño mutuo.

— Come Atsushi, me gusta verte feliz y jamás llorando de dolor —Si la vida de su amigo fue complicada, rellena en abundante dolor, se ganó el corazón de Sigma y el mundo, él se lo daría porque quería demasiado a Atsushi.

Observando la dulce felicidad que un plato de chazuke pudiera ofrecer, un momento especial que debía parar en el corazón y mente. Nadie, absolutamente nadie sacaría esa ternura de chico.

Salieron del departamento que compartían, un cielo estrellado que veían en esa noche que el destino junta corazones para la eternidad, una eternidad de recuerdos compartidos.

— Es una bella noche estrellada, pero ¿Sabes qué es más bello? Tu existencia en este mundo, fuiste lo mejor que pudo haberme pasado —En eso mentiras no expresaban el color de sus orbes violetas, un iluminador de vidas era Atsushi, esa significado tomó en su vida.

— Me alegro haberte conocido Sigma, gracias por ser mi amigo y el chazuke estaba delicioso, gracias por consolarme —El sentimiento era mutuo por las dos partes, noche estrellada también podía ser una noche en la que las almas gemelas vuelven a encontrarse.

Lindo, precioso, lo que la vale la pena en este mundo.

— Awww tan lindo mi bebé, tú siempre precioso como un sol que alumbra mis días —Linda noche de estrellas bañó las mentes trastornadas de los dos, lo importante es que se querían con el suficiente cariño incondicional en sobrevivir en ese lugar por nombre mundo.