5

2.7K 235 33
                                    

_¡Te diste cuenta!, ¡Ella fue primero!, ¡Hiciste bien en esperar!.—Festejaba la pelirroja.

__No festejes, seguro besa a todas, no quiero ni pensarlo.—Explicó. Sentía fuego en cada momento de pensamientos de chicas junto a su presa.

__¡Fue ella la primera!, ¡Entiende!, Ya la escuchaste antes, decía que no le interesaba nadie, y te.. ¡Beso!.

Tenia razón, había dicho aquello, pero se sentía insegura, por que la besaba si ni se conocían, que raro. Otra cosa, iba a ignorar ala castaña en el baño, pero ella fue esa primera, la había besado, así que esperar valió la pena, bueno no tanto, por que la beso como si se besara con muchas en los baños.

Estaban tomando un café las tres, rubia, pelinegra, pelirroja, charlaban con toda alegría más que nada la pareja, notaban que jennie estaba decaída y perdida mirando el suelo, así que fruncieron el ceño como un perro triste.

__Esta tildada, y creo que escucharnos es lo menos que va a hacer.—Habló la rubia toqueteando la cintura de su novia.

__Ay.—Soltó una risita.—Al parecer quedaste muy mal Jennifer.—No recibía respuesta.—Jen..

__Esta perdida, mírala.—Literalmente estaba mirando el suelo toda dura como un pan de ayer. La pelirroja miró hacia otro lado, ¡Sorpresa!, ahí se encontraba la castaña de pircing, estaba mirando a su hermana, y ella no se había dado cuenta. La tailandésa volteo al cruzar mirada con la pelirroja fue aterrador.

__¡Jen!, ¡Jen!.—La movió con sus manos hasta que reaccionó.—¡Lalisa te estaba viendo!.

__¡Y a mi que!.—Soltó despegandose de las manos de su hermana.—¡Ya no me interesa!, ¡Esa come perras!.

__Hey, Eso pensaba Jisoo de mi, y le soy más fiel que... no se... Le soy fiel, como un perro a su humano.—Explicó un poco de mala gana ya que no le salió decir bien al principio.

__No, ya me hiciste enojar, tardaste mucho en hablar, vete a otro lado.—Ordenó la pelirroja con un poco de mal humor.

__¡Pero!, dije que soy la más fiel.—Quejó.

__¡Vete!.—La rubia se nego.—¡Park!.

__¡Bueno!, ¡Pero que te quede claro que te soy fiel!, ¡Ahora me voy a encerrar en el baño!.—Gritó.

__Es ahí donde se comen a todas las perras.—Dijo jennie sin remordimiento.

__¡Por que tu eres la perra!, y, y, y ¡Ahh!¡Váyanse ala mierda!, ¡Me voy al baño a llorar!.—Alzó la voz. Sin recibir respuesta se fue hacia donde dijo.

Las dos kim se miraron, los celos aveces les gana, y no podían controlarlo, es algo de la sangre, algo que nace ya en el apellido.

__Iré a buscarla, me dio inseguridad.—Se levantó pero fue detenida por la mano de su hermana.—¿Que quieres?, eh Jennifer.

__Como soy tu hermana menor, tengo derecho a preguntarte una cosa muy importante, así que toma asiento.—Ordenó.

__Si, pero apresúrate, no quiero que se coma a ninguna perra.—Se sentó nuevamente.

__Bien, dime...—Trago grueso.—Tal ves parezca rara mi pregunta, pero... quiero saber..—Jugo con su cabello mientras tomaba algo de aire.—¿Que se siente tener un pene dentro?.—Preguntó con vergüenza.

__¡J-jen!.—Tosió al oír la pregunta.—N-no lo sé, y-yo n-no se..

__¿Nunca has follado con rose?.—Elevó una ceja, eso sería raro.

__N-no, s-si, l-lo he echo, p-p-pero c-co..

__¡¿Entonces que se siente?!.—Ya estaba harta de que su hermana Tartamudee a su pregunta.—¡Vamos, suéltalo!.

This is furiousDonde viven las historias. Descúbrelo ahora