Una noche tras la guerra contra el Frente de Liberación y la Liga de Villanos dejaba una herida fuerte en los héroes de Japón. Había un joven que estaba destinado a ponerle fin a una pelea que llevaba más de un siglo. Pero antes de partir, tuvo que...
Ya había amanecido, era un día sábado pero laboral. Por fortuna para Ochako solo sería media jornada. Así que hoy tendría más tiempo para dormir. Pero, los planes cambiarían cuando escuchó que algo cayó al suelo.
O mejor dicho, alguien...
— Déjame dormir unos minutos más, Deku-kun... -Uraraka estaba medio desorientada porque quería seguir descansando-.
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(Cr: @ Tongu_11 en Twitter)
— Sumimasen, Uraraka-san. -Izuku estaba pidiendo disculpas con una sonrisa-.
El joven de pelo verde, pecas y cicatrices en los brazos y de nombre Midoriya Izuku estaba con el pecho al descubierto mientras se levantaba del piso. Había caído al suelo luego de hacer dominadas hasta el cansancio. Lo curioso es que conservaba su forma de adolescente, específicamente cuando tenía 15 años.
— ¿DEKU-KUN? -la respuesta que recibió asustaría a Ochako y vería que estaba el mismo chico que ella veía con admiración y otros sentimientos en la academia-.
— ¿Pudiste dormir bien? -preguntó el pecoso-.
— Hai... gracias por preguntar... -la heroína Uravity estaba levantándose de la cama, luego de lavarse la cara se prepararía para salir-.
— Uraraka-san, ¿no vas a desayunar? -preguntó Midoriya que llevaba un pan con mantequilla y jalea-.
— No tengo hambre, por favor no insistas. -ella estaba arreglándose el cabello como podía, ya se había puesto su traje de heroina y se dispuso a salir-.
— Uraraka-san, ¿a dónde vamos a ir? -preguntaba Izuku mientras caminaba con la castaña-.
— Tengo que trabajar, soy una heroína oficial. -se notaba que Ochako estaba cansada-.
— Sugoi, quiero ver a los demás. -le decía ilusionado el pecoso hasta que vio que la mochi se detuvo-.
Era un edificio bastante alto, en la entrada estaba un cuadro con las indicaciones de quiénes están en la infraestructura. Habían entre bufetes de abogados, oficinas administrativas, medios de comunicación y agencias de héroes.
Uraraka entró al lugar para acercarse al elevador para irse al piso 25. Como no había mucha gente por ser fin de semana, Izuku estaba curioso de ver qué sería lo que haría Ochako, y no tardaría en averiguarlo.
— Ohayo gosaimasu. -Ochako cambiaría su expresión a una más sonriente-.
— Uravity, ohayo. -Ryukyu fue quien la recibió-.
— ¿Por qué está en la silla de la recepcionista? -preguntó curiosa la castaña-.
— Es que terminé mi papeleo y quería probar cómo siente Lise-san cuando tiene que recibir a los visitantes. -Ryuko Tatsuma, o Ryukyu para los civiles, le gustaba siempre mantenerse activa-.
