FOREVER IN YOUR MIND

1

Era una mañana tranquila de Septiembre, Sara de 16 años, de pelo castaño y ojos celestes, que a cualquiera enamorarían, y, labios carnosos, se estaba preparando para ir al instituto después de unas buenas vacaciones de verano, en las que disfrutó como nunca antes había disfrutado, seguro que recordaría todas las fiestas y salidas que tuvo con sus amigas.

Recordaba cada detalle de ese verano, en el que por cosas del destino se enamoró a primera vista del DJ de una carpa a la que fueron una noche, intentó conseguir su instagram preguntando a todo el mundo que parecía que lo conocía pero no lo consiguió, pero obviamente no se rendiría tan rápido, quién no arriesga no gana.

Sara que estaba metida en sus pensamientos como casi siempre se sobresaltó cunado Elena, su mejor amiga, pelirroja con ojos verdes y labios en forma de corazón la llamó.

¡BUENOS DÍAS!- dijo.

¿Qué quieres?, no son horas de llamar a nadie- le regañó Sara.

Sí como sea, te tengo una noticia que a lo mejor te gusta- soltó la pelirroja desde el otro lado de la línea.

¿Y qué es exactamente?- preguntó Sara intrigada.

¿Recuerdas a ese DJ que te gustó en la carpa?- prosiguió.

Sí, me acuerdo de él- contestó la castaña.

Pues mira te cuento que me he enterado de que se llama Marcos y que va a nuestro instituto- dijo Elena.

Sara se quedó estática durante un buen rato sin decir nada, nunca habría imaginado que el chico que le gustaba y alcanzaba todos sus estándares fuera a su instituto, aún así se preguntaba como Elena había conseguido esa información, la voz de esta la sacó de sus pensamientos, sara ya no sabía si tenía una amiga o una agente de policía.

Hello... tierra llamando a Sara- dijo Elena.

Sí, estoy aquí- comentó Sara demasiado rápida, dando a entender de que estaba en sus pensamientos.

¿Has escuchado lo último que te he dicho?- continuó esta.

No- comentó Sara.

Ya lo he notado, bueno, el caso es que es de nuestra quinta y creo que va al B- terminó de decir la pelirroja al otro lado del teléfono.

Nunca voy a saber como consigues esa información, todo lo que pido o me gusta lo encuentras de la noche a la mañana, tendrás que enseñarme- dijo nuestra castaña.

Recuerda que estás hablando con una FBI, yo encuentro de todo. Bueno te dejo que tengo que vestirme, ¡BYEEE!.

Y así Elena colgó y Sara empezó a sonreír, cualquiera que la viera sabría que estaba enamorada de alguien, su sonrisa era demasiado obvia. Apuesto a que sentía más mariposas en su estómago que las que veras un día de primavera en medio del campo, ese chico la traía loca desde el día en que lo vio.  

No me puedo creer que seamos del mismo año y que vallamos al mismo curso- dijo para sus adentros- ¡NO ME LO PUEDO CREER!- gritó para sí.

Daba pequeños saltitos de emoción mientras pensaba todo eso, y que si conseguía su número o instagram podrían estar más en contacto, así ella podría tener más oportunidades de que se fijase y enamorase de ella, pero como siempre existen los contratiempos, cuando piensas que todo va a salir bien puede llegar algo para devolverte a tu sitio.

Durante todo el día no hicieron nada, ya que al ser el primer día de clases muchos profesores seguían en sus vacaciones, por eso se pasó todo ese tiempo hablando con Elena sobre como podía pedirle el instagram sin sentir vergüenza de ella misma, cada vez que se le ocurría alguna idea, Elena la descartaba y le empezaba a decir varios puntos que no había tenido en cuenta, como por ejemplo nunca decir que me has parecido guapo, otro era el espero que te acuerdes de mí, todas las ideas que llevasen esos componentes eran directamente descartadas, quería pedir su instagram no sonar como una necesitada de amor.