Título en español:
(O3): "demasiado para creer..."⏖⏖⏖⏖ ❨ « 🌦 » ❩ ⏖⏖⏖⏖
Recuerdos pasaban por la mente de Vegetta, quería averiguar al menos el porque su novio era tan dependiente de estas porquerías, según leyó cuando era más joven que muchas personas caen en estas adicciones por problemas, porque sus amigos les dicen que lo hagan, pero quizás sea un buen momento para mencionar que Veg ya sabía que su novio consumía esto, pero...no lo hacía con tanta frecuencia como ahora.
Pensando y pensando recordó que cuando él y rub iban al mismo salón llegó a enterarse de algunos problemas que el más alto había tenido desde que era un pequeño osito; peleas con sus padres, violencia y finalmente tener que huir de casa. Sin duda si era un caos todo lo que tuvo que pasar, literalmente se podía decir que su única compañía o en la única persona en la que podía confiar era el pelinegro.
Pero...¿Eso sería culpa de Vegetta? Quiero decir, todo lo que se ha mencionado anteriormente (al igual que los capítulos) han sido cosas que han sucedido a lo largo de ya un año, el Vegetta de ahora ya ni siquiera está decidido a seguir haciéndose daño a través del dolor de Rubius, pero no nos adelantemos a eso ahora. Continuemos mejor con otra parte de la historia.
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🩸𝖭𝖺𝗋𝗋𝖺 𝖵𝖾𝗀𝖾𝗍𝗍𝖺🩸Lo que había sucedido esa noche fue una mala idea, hasta el maldito día de hoy sigo sin saber con exactitud qué fue de mi esa noche, eso sí, Rubius me cuido y terminamos en su casa, aunque ... desperté muy tarde.
Desperté tan tarde que ni siquiera lo tenía a él a mi lado, no tenía idea de dónde pudo haber estado, yo me encontraba desnudo y con marcas en mi cuello y pecho, me sonrojé como un tomate.
Decidí salir de la cama y levantarme algo adolorido, eso sí que era extraño, no creía que eso pudiera haber hecho ese efecto.﹋﹋﹋﹋﹋
Cuando Vegetta se levantó y comenzó a cambiarse escuchó como la puerta del apartamento se abrió, era Rubius.─¿Chiqui? ¿Qué haces despierto a estas horas?
─Cerró la puerta detrás suyo y fue a donde estaba el pelinegro.─..Pues ya es tarde, por eso me desperté.
Se interrumpió así mismo y vió al peliblanco confundido.
─Oye, ¿Sabes por qué estaba desnudo cuando me desperté?─Pues porque follamos Veg, ¿Por qué otra razón estarías así? ─Soltó una risa burlona y se quitó su suéter tirándolo a la cama.
─Ah..- Si, entiendo. ─Miró hacia otro lado y tocó su espalda.
─Y sobre el dolor de espalda, creí que ya lo sabías, somos versátiles. Tú por cierto ayer me pediste que fuera así.
La cara de Vegetta estaba totalmente enrojecida, no sabía que responder a eso, así que solamente asintió.
─Si, si, está bien, ahm, desayunemos, ¿Te parece?
El desayuno de ese día había sido ameno, entre risas, sonrisas y carcajadas recordaban muchas cosas juntos; como cuando ambos eran inseparables en primaria, cuando Rubius perseguía a Vegetta por toda la escuela y cuando este aceptó que en cierto punto se había sentido atraído por su parte.
─Si..- Sin duda fueron buenos ratos, todo entre nosotros ha sido...algo extraño pero agradable creo yo.
─Yo también pienso lo mismo Veg, al menos desde mi punto de vista me siento feliz de al fin poderte tener conmigo y solo para mí.
─Así es, después de tanto 'luchar' por ello, ¿No crees?
Rubius asintió tomando la mano de Vegetta para acariciarla tranquilamente, el pelinegro no lo pudo evitar, tenía que hablar de lo otro.
─Entonces...Si fue así, ¿Por qué no me dejas ayudarte ahora que me tienes aquí para tí? Déjame hacerlo.
─¿Otra vez con lo mismo? Ugh..! ─Se levantó de su silla empujando la mesa, obviamente este tema no le agradaba.
─..Es que Rub, sabes que no me gusta verte así-
El peliblanco lo interrumpió y lo vió molesto. ─¿¡Y cómo te gusta verme, Samuel!?
─No tienes porque gritarme..
─¡¿No tengo que hacerlo?! ¡Pues lo hago porque sabes que odio que siempre digas eso! ¡¿Ayudarme en qué?! ¡Entiende de una vez que yo no tengo ninguna puta adicción!
─¡Si la tienes, Doblas, déjame ayudarte!
─¡Estás loco! ¡Eres un egoísta, solamente quieres estar con alguien 'sano' para que no te juzguen! ¡Mentiroso, ayer te la pasaste bien conmigo y ahora dices esto! ─Sin dudarlo un poco más tomó a su novio del brazo y caminó hacia la puerta.
─¿Q-qué haces? Cariño..!-
Abrió la puerta y lo sacó de su apartamento ─¡Déjame en paz! ¡Lárgate de aquí!
─Fue lo último que dijo y le cerró la puerta en la cara.Vegetta se quedó con las palabras en la boca, ¿Por qué cojones el híbrido oso actuaba así? Él solamente quería ayudarlo, necesitaba hacerlo y el otro se molestaba, si que era difícil de convencer.
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🩸";𝐏𝐨𝐰𝐝𝐞𝐫;"🩸⦅Rubegetta⦆ | (COMPLETA)
Romance‼️ SHIP DE CUBITOS ‼️ PARA COPIAS Y/O ADAPTACIONES SE NECESITA CONTACTAR CONMIGO _________________________ Vegetta se sentía idiota y de alguna manera también insuficiente, pues la persona que más amaba en este mundo estaba tan rota que no podía ay...