Frutas, verduras, frituras, blah blah blah.
Tom miraba todo aburrido, tenía los brazos recargados en el carrito de compras, aún no tenía nada en el pero es que le daba tanta flojera comprar.
Bill por su lado estaba saltando de la emoción internamente, todos los estantes estaban llenos de colores que él no había visto, de imágenes, de texturas. Tenía ganas de poner todo en el carrito.
-Tooooom.- grito.- ¿Esto que es?- señaló un plátano.
Realmente él podía saberlo por si mismo, pero quería que Tom le prestará atención ya que solamente movía el carrito con la mirada aburrida y eso comenzaba a ser molesto para él.
-Eso es un plátano o banana, como le quieras llamar. Es una fruta bastante dulce.- asintio mientras le sonreía a Bill.
El pelinegro sonrió un poco satisfecho ante la atención que se le fue brindada.
-¿Podemos llevarlo?- pregunto mientras tomaba tres pencas en sus brazos y los cargaba como si fueran bebés.
Y esa fue la justa imagen que llegó a la mente de Tom, Bill meciendo a un bebé pelinegro en brazos, con una sonrisa en la cara y una mamila en su mano derecha. Rápidamente Tom borro esa imágen de su mente, que pensamiento tan estúpido, lo ignoro y asintio.
-Si, de hecho eso tengo que llevar.
Bill le volvió a sonreír y puso las tres pencas de plátano en el carrito con sumo cuidado.
Siguió poniendo cosas que Tom le permitió llevar a casa. Tom no necesitaba nada de las cosas que Bill ponía en el carrito,pero tenía la sensación de que debía complacerlo.-Tom ¿Te puedo decir Tommy?- pregunto de la nada el pelinegro.
¿Debería dejarlo?, que le dijera así era casi como un apodo de pareja, un apodo cariñoso, un apodo que transmite amor en sus letras, una sensación que ya había sentido antes, puesto que así le llama ella. Pero ¿Por qué con Bill se siente diferente?, como si la palabra le diera una especie de paz a Tom.
Pero no podía permitirlo, Bill solo era su proyecto.-No, ni hablar.- negó repetidamente con la cabeza.
Bill bajo la cabeza desilusionado, creyó que a Tommy...Tom le iba a agradar eso.
El mayor escucho un pequeño sollozo tras él, habían cambiado de pasillo hace rato y había dejado a Bill atrás.
Volteó confundido, miró sorprendido como Bill caminaba con la cabeza agachada, con un brazo tapando su abdomen y el otro cubriendo su rostro.
-Bill...¿Qué te pasa?- pregunto quitando el brazo para ver el rostro del menor, los ojos rojos al igual que el resto de la casa, los labios fruncidos y lágrimas corriendo por todo su rostro.
-Snif...es que...snif...no me dejaste llamarte Tommy...y...snif...yo siento algo raro en mi pecho, me lo oprime y eso...snif... provocó mis lágrimas...toooooooooom.- sollozo.
Tom se dio un golpe mental al no recordarse a si mismo que todavía no le enseñaba a Bill todo lo que tenía que saber acerca de las emociones, estúpido tom.
Miró al pelinegro con arrepentimiento y lo rodeó con sus brazos formando un abrazo, eso lo calmaría un poco. Una señora mayor que pasaba por ahí los miro tu sonrió tiernamente, pensando que era una joven pareja, Tom le correspondió la sonrisa.-Bill... tristeza, tu te sientes triste.- le susurro en el oído.
-Lo sé...snif...mi sistema lo acaba de asimilar...toooooom...snif...abrázame más fuerte.- sollozo contra su hombro.- ¿No me aprecias?...snif
Tom los miro con los ojos abiertos. Claro que lo apreciaba, Bill es el proyecto que le hará ganar millones, es obvio que lo aprecio.
-Bill, no digas tonterías, yo te aprecio demasiado, solo que no te dejare llamarme por ese apodo.- dijo mientras le sonreía tiernamente, Bill soltó otro sollozo.
-Es que...snif...yo te quiero llamar así...como a...snif...Gustav, a el de cariño le diré...snif...gus... él...no se va a molestar.- siguió, Tom por alguna extraña razón quiso quitar el nombre de su compañero de la boca de Bill, le molestó también ese apodo.
-De acuerdo, llámame tommy.- dijo rápidamente ante el fuego que comenzaba a crecer en su pecho al imaginarse a Bill con Gustav cerca.
-¿Enserio?, gracias Tommy.- de un momento a otro el rostro triste del pelinegro ahora se remplazo por una sonrisa abierta, los ojos dejaron de estar rojos a verse alegres. Abrazo a Tom por el cuello, correspondiendo a los brazos que estaban en su pequeña cintura desde hacer un rato.
-No es nada Bill, ahora sigamos con las compras.
Este asintio alegre y cambiaron de pasillo a uno con decoración navideña.
......
Holaaa, lamento no haber actualizado antes, y también lo lamento porque este capítulo es suuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuper cortito.
Otra cosa, no se si leyeron mi tablero pero pues en caso de que aquí les digo, tengo planeado hacer un maratón para navidad, de ambas historias, para que tengan que leer durante las fiestas, en caso de que se aburran durante la comida como yo, bueno, el caso es que todavía no está asegurado pero en caso de que lo haga les estaré avisando por mi tablero. Estén atentas y atentos.
En fin, los amo aliens 🫶🏻
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Proyecto Humanoid [Twc nr] (Toll)
RandomTom Kaulitz, el mejor científico de Alemania es asignado para comenzar con el Proyecto Humanoid.