34 + 35.

+ cuatro.

chan solo ─ O4.1. salir un su jefe fue la mejor decisión.
...⁠ᘛ⁠⁐̤⁠ᕐ⁠ᐷ

─ hyung, no me toques ahí. ─ christopher se cubrió la boca avergonzado, su novio acariciaba su trasero.

estaba preparando el desayuno después de una magnífica noche con su novio, el hombre con su trabajado cuerpo se pegaba a la espalda del menor.

─ ¿quieres ir a cenar esta noche? ─ pregunta con su pesada voz que hacía erizar su piel.

─ mm ¿alguna ocasión que debamos celebrar?

─ pues que eres muy precioso. ─ susurra y luego lame su lechoso cuello.

chris sonríe ante las caricias y besos húmedos en su piel.

─ ¿qué sucede con tu esposa?

─ tú me importas mucho más que ella.

─ no me gusta que le mientas... ¿no puedes solo divorciarte de ella? ─ se da la vuelta entre los brazos del otro confrontandole cara a cara.

─ amor, ya te dije que aún no puedo hacerlo... ¿puedes esperar un poco más por mí?

─ esperaría toda la eternidad por ti.

chan sonrío en el beso que le propinó su novio, sentía pena por la esposa al ser la amante, pero hyung siempre le hacía olvidar sus penas entre sus besos.

...

─ hyung ¿quieres comer conmigo hoy? ─ pregunta el rizado, estaba sentado sobre el escritorio de su pareja.

era la hora de la comida y normalmente su hyung lo llevaba a un restaurante algo alejado del edificio.

─ claro amor, espérame unos segundos que termino de firmar estos papeles.

─ está bien, iré a arreglar mi mochila y vuelvo.

chris salió de la oficina, hacia su cubículo, metió sus cosas a la mochila y volvió con su hyung. este agarraba su chaqueta y se la ponía sobre los hombros, una vez vió a bang chan caminó a la puerta donde ambos salieron al estacionamiento.

─ ¿qué quieres almorzar, amor? ─ pregunta abriéndole la puerta de copiloto.

bang chan agradece con una sonrisa y entra al auto, una vez su novio también entra le responde.

─ ¿podemos comer galbitang?

─ claro, conozco un buen restaurante.

el trayecto en auto fue más rápido de lo que pensaba, hyung pidió una mesa privada entre los dos, pues ambos preferían estar solos.

la mesera tomó su orden y cerró la puerta de la pequeña habitación, chan se sentó sobre los cómodos asientos teniendo por fin su merecido descanso.

─ hoy no traes maquillaje. ─ mencionó hyung.

chris asintió, había salido apresurado de casa y no tuvo mucho tiempo de maquillarse, una de las principales razones por las cuales ese día había sido tan tímido.

─ no tuve tiempo... ¿aún me veo bonito?

─ eres el más precioso de toda la oficina, no hay nadie más bello que tú. ─ hyung sostiene la palma de su mano y lo alienta a levantarse de su lugar y sentarse a la par suya.