una cachonda insaciable por como se movía, por como queria más, estaba falta de sexo,
Duramos bastante, ella quería mas y más, yo se lo daba toda, entraba y salía con facilidad, le daba golpes al fondo de la vagina, ella daba suspiros sonoros, yo aumentaba la velocidad, ella aumentaba sus ganas; al final, eyaculé en su coño, dentro, le deje todo; saqué mi polla, me senté a un costado en el sofá junto a ella, en eso ella se agachó, cogió mi polla casi flácida ya, y con sus labios la empezó a limpiar, que casi la pone erecta otra vez. Al terminar, se levantó, se vistió, y antes de darme un beso en la boca y que yo dijera algo, me dijo: no te preocupes, yo vine, te dejé las manzanas y me fui. Gracias, nos vemos.
Nunca más volvimos a hablar, ni de esto ni de nada, volvímos al statu quo anterior, el del: hola que tal, y el del: adiós nos vemos. Durante un tiempo yo todavía tenía dudas acerca de si lo comentase alguna vez con alguien pero no fue asi, despues de años, ya, casi lo he alvidado, ahora ella ya esta muy mayor.
© Richi67