Operación Mamá

Caputulo 7

Fecha: 23 de julio.

Para: Vicktor volkov.

Corresponsal de la revista World News International.

Departamento de Noticias de Casablanca. Microcasete número 3.

Hola, tío vick siento no haberte enviado antes una cinta, pero he estado muy ocupado. Encontrar una mamá es un trabajo pesado que requiere hacer muchos planes. Pero no me quejo, ya que pami agradece lo mucho que le ayudo. Dice que, si no fuera por mí, su vida sería tranquila y aburrida.

Sé que te alegrarás de oír que la Operación Mamá va de maravilla. Con mi ayuda, madre y lena se ven todos los días y se que se gustan porque se dicen cosas muy bonitas. Pami le dijo a lena que, para ser una mujer sin hijos, sabía muchas cosas. Y lena le dijo a Pami que, cuando quisiera, podía dejar de fingir que es perfecta.

Pero me gustaría que se dieran prisa en casarse, porque Pami no es muy buena niñera. Nos deja comer pizza casi todas las noches. Y cuando se nos terminó la ropa limpia, le dijo a Sasha que podía ponerse los calzoncillos del revés, ya que nadie lo iba a notar. Ayer se dejó a sammy en la farmacia. Estábamos ya en la hamburguesería cuando se dio cuenta de que no iba en el coche.

Pero eso no está tan mal, ya que nos dio cinco dólares a Sasha y a mí para que no se lo contáramos a lena. Así que ahora tenemos dinero para la tarta de bodas. ¿Crees que será suficiente para comprar una de esas tan bonitas con una fuente? Espero que sí.

Oh, oh, tengo que irme. Oigo a madre por el pasillo y se supone que debo estar en la cama, aunque no tengo sueño. ¿Por qué siempre que los mayores están cansados, son los niños los que tienen que acostarse? Se lo preguntare lena. Ella lo sabe todo. Adiós por el momento. Dimitri.

P.D. No olvides que sólo faltan diez días para el gran día.

El teléfono de la cabaña estaba sonando. Elena lo oyó cuando se acercaba corriendo a la puerta. Entró con rapidez y descolgó el auricular.

-¿Diga?

-¿Lena ? -preguntó la voz de Dima-. ¿Dónde estabas? Creía que no ibas a contestar nunca.

-He salido a correr.

-¿Puedes venir a nuestra casa?

-¿Qué pasa ahora?

-Se trata de Sammy. Madre le ha hecho acostarse y ella se ha llevado a Tic y a Tac a la cama y ahora no pueden despertarse.

Aquello no era sorprendente, teniendo en cuenta que Tic y Tac eran peces tropicales.

-dima, lo siento, pero no creo...

-Por favor -le suplicó el niño-. Hazlo por el pobre Sammy. Quiere mucho a Tic y a Tac, y ahora que Brutus se ha ido... Por favor, te necesitamos.

La joven suspiró. No podía negarse a aquellas súplicas y dima lo sabía.

-Está bien. Voy para allá.

-Estupendo.

El niño colgó de inmediato, como temeroso de que cambiara de idea si le daba tiempo.

La joven pensó que eso era justamente lo que debía hacer. Y lo que se había jurado hacer después del beso inesperado de Yulia. Se juró que a partir de aquel momento guardaría las distancias. Era lo más sensato.

Pero, en lo que concernía a los Volkov de cualquier edad, no podía actuar con sensatez. Empezó a darse cuenta al día siguiente del beso, cuando dima, Sammuel y Sasha llamaron a su puerta con un almohadón lleno de ropa sucia y le pidieron que se las lavara para que su madre no se enfadara con ellos. Le explicaron que habían roto la lavadora y la secadora al utilizarlas para limpiar su colección de piedras. Lena los miró un momento sus rostros suplicantes y su resolución la abandonó en el acto.