Capítulo 1

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Una lluvia arreciaba contra el ventanal de una casa ubicada en un barrio lujoso situado a las afueras de Londres. El lugar rodeado por altos muros negros, siempre había sido ignorado por los vecinos de la cuadra, sabían que pertenecia a una misteriosa zorra que se pasaba solo un par de veces al año por el lugar. Desde el pasado mes la paz fue sacudida por un montón de camiones de mudanzas, seguido por una gata esbelta, pelirroja, de un pelaje oscuro y un par de cuernos de carneros no muy prominentes de un tono celeste de lo más peculiar, ella salía y entraba del recinto un par de veces al dia.

La gata se encontraba sentada en un almohadón gigante junto a una de las ventanas que daban hacia la calle, tenía en sus libros un viejo grimorio que hace varios días trataba de descifrar. Un ruido mecanico y estridente rompió su paz y la obligo a bajar a la planta baja, miro por el visor de la cámara del timbre y vio a una pantera, alta y delgada, de negros cabellos lacios muy bien peinados, miraba fijamente al lente con unos ojos celestes que casi parecían brillar entre tal oscura persona.

-Diga?- Preguntó la gata con una voz algo cansada.

-Miss Kali, mi nombre es Erilyn, Erilyn Freya Goddard, vivo en la casa de enfrente y hacia varios días quería tomarme el atrevimiento de venir a visitarla.-

Kali se lo pensó unos momentos y luego abrió la puerta. Ambas se miraron un momento y luego la gata dio un paso a un costado dándole lugar a la felina para que entregase, sus pasos eran gráciles, confiriéndole a su porte un aire refinado, le sacaba dos cabezas a Kali, lo normal en una pantera.

-Miss Toha, soy la presidenta del consejo vecinal y es mi completo placer darle la bienvenida a esta humilde comunidad-

Aquello hizo que Kali levantara una ceja, en una cuadra no había tanta gente como para llamarle una comunidad, pero no discutió, solo ondeó un poco su colita trazando una S en el aire.

-La lluvia me ha exentado del trabajo, por lo que por fin pude hacerme un tiempito. ¿Cómo se encuentra usted? Puedo preguntar qué relación tiene con la anterior propietaria?-

-La cuadra está bien... En cuanto a lo otro, es mi madre, así que técnicamente la casa sigue siendo suya. – Respondió Kali mientras se cruzaba de brazos, odiaría la idea de tener que darle de comer a esa tipa.

-También soy parte de la iglesia que está aquí a dos cuadras, siempre estamos buscando fieles nuevos que quieran participar. Oh pero no se lo tome a mal, no es que la estoy reclutando, solo menciono un poco mas de mi.- La pantera le dedicó una afable sonrisa que seguramente habrá estado practicando mucho tiempo frente a un espejo.

-Católica... o Protestante?- preguntó Kali con un marcado disgusto mientras extendía sus energías y envolvía con ellas a la pantera, luego transmitía su presencia a través de ella haciendo que su pelaje se eriza y su expresión se descomponga ligeramente.

-Pro...protestante Miss Kali, creo que estos temas le... le disgustan.- Apenas terminó de decir la última palabra, comenzó a sentir su garganta cerrada. –Creo que tengo que irme...-

-Oh espera, recién ha llegado, no gusta pasar a tomar una tacita de café?- Le respondió Kali con una falsa sonrisa, los ojos de la pantera se desviaron inmediatamente a sus dientes los cuales los encontró más afilados y puntiagudos de lo que usualmente se ve en otros felinos.

-Oh... no no, estoy bien, porfavor espero que tenga un buen dia, por cierto le llego esto –

Erilyn le extendió una carta algo mojada y luego sin mediar más palabra se dio la media vuelta y se alejó a paso rápido a su casa.

Una sonrisa real surcó el rostro de Kali antes de bajar su mirada hacia la carta la cual abrió lentamente rompiendo el sobre con una de sus garras. Tras unos segundos leyéndola sintió que las fuerzas abandonan sus manos, el telegrama en el papel era breve, anunciaba una suspensión indefinida de sus funciones como agente elemental de la policía.

Alopexomaquia - NaNoWriMo 2023Donde viven las historias. Descúbrelo ahora