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Pov Marti

—No deberias estar haciendote la cabeza con eso. —Camila intentó tranquilizarme.

—Es que si yo solo quisiera estar con alguien entonces se lo diria tambien. —conteste mientras no dejaba de caminar de un lado a otro en el living.

—Quedate quieta por favor. —dijo mientras ponía pausa al video que intentaba ver. —Escucha, ¿por qué no solo hablas con ella?

—Porque recien ayer hablamos de ir más serio, ya hacerle este planteo me parece estúpido. —le conteste.

—Ah genial entonces tengo que fumarmelo yo. —rodo los ojos.

—¡Hermosas Damas! —entró Gianfranco como solo él suele hacerlo.

—Llego el stripper que había pedido. —Camila rió y se levanto a saludarlo.

—Puedo serlo si queres. —le guiño el ojo. —Pero no hoy...porque les tengo otra propuesta.

—Cualquier cosa que vos hayas planeado para hacer un jueves claramente va a terminar en desastre. —mi mejor amiga negó.

—Tenganme un poco de fé che...—apreto sus labios. —Hable con el papá de Nico para que nos deje usar su barco y hacer una fiesta ahí. —soltó y ambas nos miramos.

—¿Y te dejo? —pregunté yo.

—Si, tuvimos que convencerlo pero termino diciendo que si. —sonrió orgulloso.

—Esta bien, yo entro. —accedió Camila.

—Yesss. —festejo el castaño con un puñito. —¿Y vos, Benza?

—Supongo que también. —un grito de festejo se escucho después de que yo confirmara.

—Podes decirle a Lourdes también. —me sugirió.

—Le voy a decir pero seguramente me diga que no. —suspire. —Su hermanita y el trabajo la tienen bastante ocupada, no creo que tenga tiempo para una fiesta.

—Es una lastima. —yo asentí. —¿No podes hacer que deje de trabajar en ese restaurante? Tenes la plata suficiente para comprarlo.

—Preguntale como salió todo la última vez que intento comprar un local gastronomico para su novia. —Camila se burló y yo le di un codazo. —Auch.

—Medio que te lo merecias. —dijo Gian.

—Si fuese por mi ya la hubiera hecho dejar el restaurante hace rato pero me pidió que no me meta en esas cosas y yo voy a respetarlo. —les conté.

—¿Y si haces que ella misma quiera dejarlo y te pida ayuda? —Gian puso su cara que solo pone cuando tiene un plan.

—¿Y como? —pregunté.

—Si ella quiere estar con vos de verdad no le va a gustar que cada vez que la invites a un lugar te tenga que rechazar ¿no? —asentí. —Y tampoco le va a gustar ver que hay otras personas intentando levantarte...—me miro como para que entienda a que quería llegar pero no. —Dale celos Martina.

—¡Si! —adhirio Camila. —Así también te sacas la duda de si quiere que sean exclusivas o no.

—¿No es algo infantil? —ambos levantaron sus hombros. —Esta bien, ¿pero creen que funcione?

—Va a funcionar. —dijo seguro el castaño. —Además el dress code de hoy es bikini así que las mejores modelos de Londres van a estar hoy bailandote de muy muy cerca...quizás alguna de Paris tambien, y de España, y de Italia...

—Ya entiendo porque le dicen "el toro" —dijo Camila y los tres reímos.

—¿Y Lourdes como se enteraria? —pregunté.

Sweet Nothing || MARTULIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora