C A P Í T U L O / T R E C E.

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Después del alboroto en la casa de Hinata, Naruto, Sasuke y Alex salieron de esta pero sin duda era el rubio quien estaba destrozado por lo que acababa de pasar ahí dentro, no pudo continuar caminando porque cayó de rodillas para con las manos cubrir su cara mientras lloraba desconsolado, Sasuke lo abrazo estando de rodillas y Alex no pudo evitar llorar por lo que estaba ocurriendo, todo eso paso gracias a su aparición en Konoha, nada había salido bien de eso.

"Todo es mi culpa, yo provoque esto", lo dijo Alex sorbiendo la nariz, "nunca debí volver a Konoha, solo arruine sus matrimonios, sus vidas, su felicidad", estaba lamentándose por lo que había sucedido.

"No digas eso Alex, pero no es momento de hablar de eso ahora, mejor ayúdame a poner de pie a tu madre para volver a casa", se lo dijo Sasuke y este asintió para limpiarse las lágrimas y caminar hasta su padre para ayudarlo a levantarse.

Entre los dos lo sostuvieron y caminaron con calma hasta la que era su casa ahora, en ese momento los tres vivirían en esa casa, al parecer fue obra del destino que ellos se quedaran ahí.

Cuando llegaron a la casa, acomodaron a Naruto en la habitación de Sasuke y lo dejaron dormir, sabían que estaba mal por lo ocurrido y debían dejarlo descansar.

Ambos volvieron a la sala en donde solo uno de ellos se sentó en el sofá mientras el otro miraba por la ventana pero estaba pensativo y un poco decaído por lo ocurrido con Hinata.

"Papá, ¿crees que...Hinata deje a mamá ver a Boruto y Himawari?", le pregunto Alex sentado en el sofá pero estaba muy estresado.

"No lo sé Alex, espero que lo haga, ella no es como Sakura quien de plano me prohibió ver a Sarada", sin duda eso le sorprendió mucho a Alex, jamás se imagino que esa mujer fuera tan cruel como para de plano prohibirle a su ex esposo ver a la hija que tenían en común.

"Eso es lo que me sorprende, nunca me imagine que la señora Sakura fuera tan...desalmada hasta con su propia hija pero esto también depende de Sarada, ¿ella quiere verte?", le pregunto a su padre sin dudarlo.

"No tengo idea, como te dije no me deja ni siquiera hablar con ella, ella es algo...obstinada", lo dijo cruzado de brazos para soltar el aire acumulado.

"Si, se nota bastante que lo es, pero me preocupa más mi madre, él es mucho más unido a sus hijos a pesar de ser el hokage y no estar con ellos todo el tiempo, para él Boruto y Himawari son su vida así como yo lo soy de alguna manera para los dos", lo dijo acomodándose la ropa sentado en el sofá.

 "Eso lo se muy bien, solo espero que Hinata no sea tan cerrada y le permita a Naruto verlos al menos el fin de semana", lo dijo mirando de reojo a la ventana.

Aun así Alex estaba un poco deprimido y lleno de culpa, todo eso paso cuando él apareció de nuevo en la aldea de Konoha y solo le quedaba lamentarse en silencio de alguna manera.

"No lo hagas", aquello confundió a Alex de alguna manera.

"¿No hacer qué?", ladeo la cabeza sin entender lo que le quiso decir.

"Lamentarte, no lo hagas ya que no tienes la culpa de lo que esta pasando", se acerco a Alex pero antes de que tocara su cabello al menos, lo jalo al piso de manera brusca, sorprendiendo al menor de alguna manera.

"Agh papá, eso me dolió", le dijo quejándose por el golpe recibido al caer del sofá.

"Silencio Alex", le dijo levantando la cabeza un poco para ver por la ventana pero se volvió a agachar al ver que un shuriken entro por la ventana y se incrusto en la pared.

El hijo escondido del SasuNaru (MPREG)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora