One shots- Twice

Hot Pool-Michaeng

El sol da de lleno en su cara, suspira y agradece el calor que Australia le está dando a su cuerpo, Corea aún con temperaturas muy bajas. Mina lleva un rato recostada en un camastro a un lado de la piscina.

Un pareo cubre su cuerpo semidesnudo por el bikini, aún no ha tocado el agua, está esperando por una persona para poder meterse de lleno en ella, en la piscina. Cierra los ojos y aún a traves de los lentes del sol disfruta del momento. Su gira está yendo de maravilla hasta el momento y un día de descanso era justo lo que necesitaba.

Mientras tanto un cuerpo pequeño se acerca a ella, puede ver sus ojos cerrados y se inclina lentamente sobre el cuerpo tumbado, toma sus caderas y Mina se sobresalta. —¿Me extrañaste, cariño mío? —pregunta Chaeyoung y en respuesta Mina hace que se siente sobre sus piernas, la jala a un beso tierno.

—Siempre, Chaeng. —dice Mina, haciéndole un espacio en el camastro, Chaeyoung se acurruca en ella y aunque el calor es infernal, no se preocupan mucho.

De reojo, Mina admira el cuerpo de Chaeyoung, a diferencia de ella solo se encuentra en un bikini color blanco de dos piezas y una toalla en sus hombros. —¿Disfrutando la vista? —pregunta Chaeyoung, con un brillo en sus ojos al notar la mirada deseosa de su novia.

Por los conciertos no han tenido mucho tiempo a solas, y ahora lo tienen. Ambas quieren aprovechar el momento. Chaeyoung está insegura cuando Mina descubre su cuerpo, no cree poder contenerse de tocar.

—Vamos a nadar. —Mina se levanta y un bikini negro igualmente de dos piezas por fin ve la luz del sol. —No mires mucho, que esto ya le pertenece a alguien. —dice Mina guiñando un ojo y se tira al agua con gracia.

Chaeyoung sonríe y se levanta del camastro, se echa al agua, un poco más escandalosa. —¿A sí? —Chaeyoung nada a dónde está Mina, justo en medio de aquella alberca climatizada. —¿Y a quién? —la sostiene por las caderas y la pega a su cuerpo, ambas se contienen de gemir ante el roce de su cuerpo mojado.

—Verás, es una chica muy linda. —Mina pone las manos sobre los hombros ajenos, la tarea es mucho más facil gracias a la estatura de Chaeyoung. —Canta, baila y hasta rapea. —la japonesa se inclina y susurra en el oido de una agitada coreana. —Y me folla tan rico.

Chaeyoung tiembla cuando escucha eso. —Mina, aquí no. —dice a medias la menor cuando nota que las manos de Mina bajan rápidamente a sus nalgas, aprieta y masajea. —No podré deterneme.

—¿Tu sabes lo fácil que es cerrar una área en un hotel con unos cuantos dolares australianos? —la pregunta de Mina viene acompañada con una risita juguetona.

—Oh, no lo hiciste. —dice Chaeyoung pegandose aún más a la piel ajena.

—Claro que lo hice, ahora bésame.

Sus labios colapsan juntos, con hambre y dureza. Mina sostiene el largo cabello de Chaeyoung entre sus manos y jala el cuero cabelludo causando una reacción placentera por parte de la contraria. —Vamos a follar aquí, Chaeyoung. —dice Mina con los labios pegados al cuello ajeno, pasea su lengua una y otra. —Y después te voy a follar en nuestra habitación.

—¡Ahhgm! ¡Sí Mina! —contesta emocionada la coreana cuando Mina desliza una de sus manos pálidas por debajo de su bikini, acuna el pequeño pecho con su palma y da un apretón. La espalda de Chaeyoung se arquea ante el toque y deja caer su frente en el hombro ajeno.

Mina toma el pezón entre sus dedos y lo retuerce lenta y tortuosamente, con su otra mano ya está haciendo a un lado la tela blanca y sus labios se pegan al duro botón que exige atención. Chaeyoung la sostiene del cabello mientras empuja todo su tronco hacía delante, haciendo que Mina trague todo de ella.