Leafmore

Prólogo

Me llevó tiempo aceptar mi pasado, incluso cuando comencé a ir a mis terapias semanales. La petición de mis papás había sido constante debido a mis cambios de humor y las secuelas que había dejado aquel incidente en mi; era como un soldado regresando a casa luego de ser enviado a la guerra, solo que a diferencia del soldado, nosotros no sabíamos a lo que nos estábamos por enfrentar.

—Buen día Natan, toma asiento por favor.— me sugirió el terapeuta de nombre Peter, obedecí con timidez.— bien, llevamos 4 semanas hablando sobre tus emociones y lo que ha estado pasando por tu mente últimamente, aunque veo mejoría en ti en necesario que comencemos a hablar sobre lo ocurrido ¿Serías tan amable de comenzar a contarmelo?.—

Permanecí con la vista en mis manos, jugueteaba con mis dedos como lo hacía a los 7 años al ser regañado por mi madre. Mis pensamientos variaban en cuanto entraba a ese cuarto en el que parecía estar horas y horas a pesar de permanecer solo una. Me costaba aún poder hablar del tema, incluso mis padres quisieron saber de lo sucedido pero les di detalles a grandes rasgos.

—Y-Ya ha pasado un año exactamente...ocurrió a principios del cuarto trimestre. Lo recuerdo bien porque Josh y yo estudiábamos en la biblioteca para los exámenes finales...— comenté aún con la vista en mis manos.

—Bien Natan vamos muy bien, ahora es momento de ir recordando poco a poco todo. Si queremos avanzar en tu tratamiento necesitamos llegar a la raíz del problema.—dijo acomodándose los lentes.

—Por favor no use ese término conmigo...— le pedí suplicante.

—Lo siento mucho Natan, entonces que te parece si me comienzas a decirme desde el inicio.— me miró.

—B-Bueno, como le comentaba era el último trimestre del año; todos parecíamos aliviados por el fin de otro año más. Ya había comenzado a solicitar mi ingreso a diferentes universidades del estado, después de todo...veníamos del prestigioso colegio fundado por los hermanos Friedman, el instituto 

Leafmore....—