¿️ǫᴜᴇ́ ᴘᴏᴅʀɪ́ᴀ sᴀʟɪʀ ᴍᴀʟ..? [ᴋᴀʀʟɴᴀᴘ]

ᴄᴀᴘɪ́ᴛᴜʟᴏ 1

(ɴᴀʀʀᴀᴅᴏʀ ᴏᴍɴɪsᴄɪᴇɴᴛᴇ)

El sol comenzaba a salir, hacía muchísimo frío, el viento era notable al igual que la tranquilidad de las calles.

No pasó mucho tiempo cuando comenzó a sonar la alarma de Karl.
Era su primer día de clases, el chico no había podido pegar un ojo en toda la noche, se había quedado planificando algunas cosas y leyendo sus novelas favoritas.
No tardó mucho en darse cuenta de la hora que era..

-7:30.. ¿¡7:30?!- se levantó rápidamente de la cama mareándose un poco..

(ɴᴀʀʀᴀ ᴋᴀʀʟ)

-¿cuánto tiempo estuve despierto?- no podía creer que ya el primer día de clases llegaría tarde y además lleno de ojeras.
Caminé bostezando hacia el baño, necesitaba tomar una ducha y despertarme un poco.

Comencé a desvestirme para luego meterme a la ducha y comenzar a bañarme, se sentía bien el agua tibia recorrer mi cuerpo, la verdad estaba seguro que me iba a animar bastante.
Al salir agarré la toalla y me la enrollé en la cintura para luego dirigirme hacia mi habitación a cambiarme.
Primer día de clases..
¿qué podría ponerme?. Busqué un poco de ropa y me terminé decidiendo por una camiseta blanca clásica, un par de pantalones azules algo ajustados por un cinturón, una camisa a conjunto del pantalón y unos zapatos blancos.

Agarré mi bolso con toda la ropa, y mi mochila con las cuadernolas asignadas, para luego ir a la cocina.

-¡buenos días ma!-le dije a mi madre la cuál se encontraba cocinando el desayuno.

-¡buen día Karl! ¿cómo dormiste?- preguntó ella sonriéndome.

La relación que tenía con mi madre era muy linda, ella y yo siempre fuimos muy unidos, le cuento todo y siempre me escucha y aconseja, simplemente la amo mucho.

Al escuchar la pregunta de mi madre me puse un poco nervioso soltando alguna que otra risa.

-¿no dormiste?- dijo ella mirándome seriamente.

-no.. estuve muy ocupado planificando todo, y se me pasó la hora- respondí bostezando.

-ya veo, tienes una cara de dormido- aseguró riéndose.

-por suerte tu querida madre se levantó temprano para hacerte tu desayuno favorito, así subís ese ánimo- dijo ella con una dulce sonrisa.

-¿¡WAFFLES!? ¡te amo ma!- corrí hacia ella para abrazarla, siempre sabia como subirme el ánimo, la verdad.. la iba a extrañar mucho.

-bueno, come que se enfría y se te hace tarde- dijo mientras me acariciaba el pelo.

Faltaba tan solo media hora para que pasara el tren, y todavía tenía que ir a la estación, se me hacia tarde..

Terminé de comer el delicioso desayuno que había preparado mi madre y me fuí rápidamente al baño para lavarme los dientes y terminar de aprontarme.
Agarré el bolso, me colgué en un hombro la mochila y fui nuevamente a la cocina para despedirme de mi madre.

-adiós ma, te voy a extrañar mucho, gracias por el desayuno- dije medio apenado, odiaba tener que despedirme de ella.

-adiós Karl, muchísima suerte, se que te va a ir bien- me abrazó y me acarició la cara mientras sonreía.

Le dí un último beso en la frente y salí de casa dirigiéndome hacia la estación de trenes.

Mientras iba caminando me puse mis auriculares con música bastante alta y suspiré, después de todo estaba bastante nervioso..

Al llegar faltaban unos 5 minutos para que pasara el tren, mientras esperaba decidí ir a una máquina expendedora para buscar algo de tomar.
Terminé comprando una bebida energética, estas eran de mis favoritas además de que la necesitaba para el viaje de 3 horas..

Al llegar el tren, podía ver como un montón de gente subía, eran cientos de chicos, después de todo era una academia para chicos así que tenía sentido, pero nunca me imaginé tanta gente..
Suspiré y me subí al tren buscando un cubículo solo y alejado, me daba bastante ansiedad estar al lado de mucha gente a la que desconocía, pero poco a poco me tendría que adaptar.

Me senté al lado de una ventana, quería ver las vistas y el recorrido, subí el volúmen de mis auriculares, apoyé mi cabeza sobre la ventana y me quedé completamente dormido..