ᴄᴀᴘɪ́ᴛᴜʟᴏ 16

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(ɴᴀʀʀᴀ sᴀᴘɴᴀᴘ)

-Bien, toma asiento jóven- dijo el director mirándome medio asustado y deprimido.

Me senté al lado de Karl mirándolo de reojo.
Este estaba temblando y con los ojos rojos aún llenos de lágrimas.

-Karl ya me contó lo sucedido, ya llamamos a la policía así que ellos se van a encargar de todo, ¿bien? Ahora, Sapnap, es la última vez que te metes en una pelea de este tipo, ¿entendiste?- dijo el director.

Yo asentí y volví a mirar a Karl el cual estaba con la cabeza gacha.

-Está bien, lo lamento mucho, les dejaré su espacio- añadió para luego retirarse.

Me levanté de la silla y me senté en cuclillas frente a Karl mirándolo con mucha pena.

-Hey...- traté de hablar con él, pero estaba muy mal, no paraba de temblar y llorar muy angustiado.

-Está bien... Yo estoy aquí... No tienes por qué preocuparte, ¿si...?- dije agarrando su mentón haciendo que me mire.

Él se levantó con cuidado y se tiró encima mío para abrazarme mientras continuaba llorando en mi hombro.

Apoyé mi mano en su cabeza y comencé a acariciarlo con delicadeza. Estaba muy triste por él, ojalá metan a ese idiota que provocó todo esto detrás de rejas.

Quité mi mano de su cabeza y apoyé las dos suavemente sobre sus hombros para despegarlo un poco de mí, así podía mirarlo a los ojos.
Notaba como él evitaba el contacto visual, pero de todas formas seguí mirándolo.

-Karl... Se que pasaste por mucho, de verdad lamento mucho que hayas tenido que pasar por todo aquello.
Quiero que sepas que no estás solo, cuando necesites un abrazo, yo estaré aquí para dártelo, si te sientes mal y necesitas hablar con alguien, voy a estar aquí para escucharte.
No voy a permitir que vuelvas a sufrir de está forma, lo prometo...- dije con los ojos vidriosos mientras miraba a Karl.

Él volvió a abrazarme esta vez con más fuerza.
La verdad me rompía el corazón verlo así.

-¿Quieres ir a algún lado? ¿A tomar aire o algo?

Él asintió sin todavía despegarse de mí.

-Bien, vamos- dije para luego despegarlo un poco de mí.

Karl agarró mi mano y se levantó como pudo amagando para que me levante.
Me levanté al igual que él y apreté suavemente su mano para tener más agarre, estas eran muy suaves y delicadas.
Comenzamos a caminar por la academia a pasos muy ligeros y despacios.

-Sapnap... Me duele mucho cuando camino...- dijo Karl frenando mientras miraba hacia abajo, algo avergonzado.

-Oh... Ya veo- me giré quedando a espaldas de él y me agaché un poco.

-Sube- añadí sonriendo.

El chico subió cuidadosamente, lo agarré de las piernas y me levanté sintiendo sus brazos entrelazar mi cuello.

-Karl, es medio raro que me llames Sapnap, ¿sabes?, Dime Nick de ahora en adelante- Dije para luego seguir caminando.

-Nick... Está bien- respondió el chico con una leve sonrisa.

-Bueno, ¿te apetece algo de tomar o comer?, El director nos dejó saltearnos las clases así que tenemos tiempo libre- dije caminando hacia la cafetería.

-Solo quiero jugo...- respondió Karl medio desanimado mientras apoyaba su cabeza en mi hombro.

-Está bien, ¿me esperas sentado?- le pregunté medio apenado por él.

Karl asintió y bajó con cuidado de mi espalda sentándose con dolor en una silla de la cafetería.

Me acerqué hacia el mostrador y pedí el jugo.

Estaba la misma chica de la otra vez atendiendo.

-¿Esta vez saldrás corriendo?- dijo riendo.

-¿De que hablas?- pregunté confundido mientras esperaba la bebida.

-¿Podré tener tú número?- dijo ella sonriéndome.

-¿Por qué?- sonreí también.

-Eres lindo, me interesas- respondió ella de forma muy directa.

-Oh, eh, gracias por el cumplido, pero no soy esa clase de chico que le da el número a cualquiera- dije riendo.

-¡Anda! Salgamos a algún sitio entonces y conozcámonos- respondió entregándome una tarjeta con su número.

-Veremos- dije sonriendo agarrando la bebida y la tarjeta para luego retirarme hacia la mesa, donde se encontraba Karl.

¿️ǫᴜᴇ́ ᴘᴏᴅʀɪ́ᴀ sᴀʟɪʀ ᴍᴀʟ..? [ᴋᴀʀʟɴᴀᴘ] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora