¿Can you see me?

26

Thailandia, Bangkook.
Junio 18.

- Que esta sea la ultima, vez en que te metes en problemas casi arruinas mi reputacion. -el señor Kun estaba furioso con Vegas, por eso una vez que llegaron a la mansion se empezo a desquitar con el, sin que nadie se diera cuenta.- Eres un innutil, no sirves ni para hacer algo bien si te dejo a cargo de mi negocio, terminara en quiebra. -el odio que tanto le tenia a su hijo, se estaba viendo en ese momento.

- ¡Yo nunca pedi ocuparme de ello, tu me obligaste desde el principio no queria estar trabajando ahi, lo unico que tenia en mente era estudiar lo que me gustaba, pero me lo impediste! -las decisiones en la vida de Vegas siempre eran tomadas por su padre, desde la universidad que iria hasta con quien deberia ser amigo, nunca pudo ser el mismo su padre siempre se ponia en su camino.

- Pero lo haras igual, aunque no te guste tienes que ocupar mi puesto como jefe, algun dia me retirare pero viendo que eres muy idiota para ocuparte de la empresa, estoy pensando en que Macau haga esto. -no queria de ninguna formaa que su hermano pasara, por esto.

- Realmente no te preocupas ni un poco por mi o Macau, lo mas inportante para ti es la empresa y el dinero incluso cuando mama estaba, fuiste un hijo de puta cruel. -al decir todo eso, Kun no soporto su enojo golpeando de manera fuerte la mejilla de Vegas, este por el impacto se quedo atonito mientras se tambaleo un poco, puso su mano en la zona que tenia ya la marca del golpe.

- Que nunca en la vida te vuelva a escuchar eso, escoria para lo unico que naciste fue para ser una molestia. -Kun arreglo su anillo, para despues irse de la mansion dejando a Vegas solo.

Queria matar a su padre, estaba sintiendo unas ganas de hacerlo le encantaria verlo sufrir, el problema es que no se podia arriesgar tenia a la policia cada vez mas cerca, ahora que pensaba en ello subio hacia el piso de arriba, para ver si sus cosas estaban en el lugar que las dejo.

- Mierda. -cuando entro al baño en el que estaba a un lado la habitacion de Porsche, vio como la camara que habia puesto desde el comienzo no estaba, fue tan cuidadoso con todo pero se olvido de esconder algo tan importante, no entendia porque estaba tan despitado.

Tenia que irse y esconderse en donde nadie lo encontrara, porque sabia que lo volverian a buscar cuando vio como en la habitacion secreta, los muebles tenian manchas de sangres que no habia notado para nada, hasta que los vio mas cerca y eso era señal de que su plan estaba jodido, al menos difrutaria una vez mas antes de escaparase.

Cuando Vegas bajo las escaleras del zotano, con el ruido de sus pisadas Porsche se habia despertado asustado mirando hacia ahi, pego su espalda a la pared abrazando sus piernas en un intento de protegerse, se le hizo raro que no hubiera aparecido en casi todo el dia, porque siempre venia para abusar de el por mas tarde que fuera.

- Hola gatito, ¿Me extrañaste? -esa pregunta salio de forma sarcastica, acompañado de una risa.- Sabes, hoy fue un dia muy de mierda y estoy bastante estresado, me gustaria que hicieras algo por mi. -Vegas matenia sus manos dentro de los bolsillo de su pantalon, enfrente de Porsche estaba la silla que dejo la otra vez, se sento mirandolo.

Porsche se mantenia callado, estaba tan cansado ya habia llegado a un punto donde no queria ni hablar, solo seguia las ordenes que el idiota le decia para no ser lastimado, su cuerpo estaba lleno de vendajes por las heridas de ya hacia un tiempo, tardarian en irse si logra salir de aqui igual dejaran una cicatriz.

- Has estado muy callado ultimamente, quiero escucharte pero no digas ningun insulto, sabes no me gusta que seas un chico malo. -Vegas se inclino un poco tirando de la cadena alrededor de su cuello, Porsche solto un jadeo de dolor por la presion que sentia.- Estas muy bonito en esta posicion. -la sonrisa en su cara era de placer, al ver lo sumiso que se habia vuelto Porsche ya no era nada terco como antes.