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Thailandia, Bangkook
Octubre 23.

Desde aquel dia en que paso eso con Vegas el a estado aun incluso si es posible mas cerca mio, donde sea que fuera el estaba ahi vigilandome como si estuviera esperando por el momento perfecto para hacer algo, no podia irme ni a duchar tranquilo porque cuando salia del baño el ya se encontraba en mi habitacion.

Ya a este punto no le decia nada porque sabia que si lo hacia pasaria lo mismo, tenia que tragarme mi orgullo y dejar que un imbecil como el me ordene.

Hoy era viernes, no habia mucho que hacer en la casa aun seguia pensando sobre si podre ir a visitar a Chey este fin de semana, Macau aun no dijo nada sobre lo que hablo con su padre pero solo esperaba poder ir aunque sea el sabado, extraño mucho a mi hermano.

Lo unico que estuve haciendo ultimamente fue lo mismo de siempre, pero lo unico diferente es Vegas ahora siguiendome mientras voy a limpiar su oficina, estoy harto de seguir todo lo que me ordena pero no puedo hacer otra cosa, si me despiden no habra manera en la que descubra si el es a quien hemos estado buscando por tanto tiempo.

Pase a la oficina con Vegas que venia detras de mi, no habia visto este lugar antes porque nunca podia entrar a limpiar cada vez que lo hacia Vegas se encontraba trabajando, una cosa que se muy bien es no molestarlo o interrupir cuando esta ocupado con sus cosas, da miedo una vez sin haber tocado la puerta pase y el se volvio completamente loco, no tiene muy buen control sobre calmarse cuando le dan esos ataques de ira.

Macau y Vegas son muy diferente en todos los sentidos, mientras el menor es un chico muy amable y respetuoso su hermano es todo lo contrario, no respeta mi espacio personal ademas de estar continuamente acosandome.

- ¿Estas nervioso? -mire a Vegas que estaba sentado en el escritorio, tenia que limpiar todo el lugar desde los muebles hasta el piso  estando el aqui, como no voy a estar nervioso.- No deberias de estarlo tenemos bastante confianza, por lo menos yo me siento comodo contigo. -sus ojos brillaron por unos segundos.- ¿Te sientes comodo conmigo, Porsche? -se mantuvo con los brazos cruzados.

- Realmente, no estoy nervioso me quede mirando su oficina simplemente y no me siento ni incomodo ni comodo con usted, solo no siento nada lo unico que estoy pensando es limpiar su oficina asi termino rapido para preparar la cena que el joven Macau vendra pronto, eso es todo lo que tengo que decirle joven Vegas ahora si me disculpa me pondre a hacer mi trabajo. -por mas que no lo podia insultar le mostraria que no me interesa, quiero ignorarlo.

Vi como sus ojos se abrieron un poco en señal de lo sorprendido que estaba, no pienso dejar que ningun hombre se aproveche de mi y menos el de esta forma, solo por que sea hijo de mi jefe no voy a dejarlo intimidarme con sus palabras.

Me da igual que sea mayor es un mocoso millonario y mimado, si tan solo hubiera encontrado todo para culparlo como el asesino ya me hubiera ido pero tengo que soportarlo hasta eso, estaba tan metido en mis pensamientos que me exhalte al escuchar la puerta cerrarse de manera brusca, Vegas se fue seguro no le gusto que le contestara.

Sonrei de manera victoriosa si el queria molestarme asi yo haria lo mismo pero no necesite ni insultarlo para que se enoje, soy bueno para callar a personas como el.

Estaba limpiando el escritorio pero algo llamo mi atencion, una caja de color rojo puesta debajo de muchas hojas de la empresa.

¿Can you see me?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora